Emotivo funeral del único hijo de Nelson Mandela, muerto de SIDA

QUNU, SudAfrica n Varios miles de sudafricanos asistieron ayer en Qunu (provincia del Cabo Oriental) al funeral de Makgatho Mandela, el hijo de Nelson Mandela que murió de SIDA hace diez días a los 54 años.

El presidente sudafricano Thabo Mbeki y el ex arzobispo de Ciudad del Cabo Desmond Tutu fueron algunos de los asistentes al funeral del que fuera el último hijo en vida del ex presidente sudafricano.

Mandela, que perdió a su otro hijo en 1969, no tomó la palabra durante la ceremonia oficiada bajo una inmensa carpa blanca.

Makgatho Mandela, hijo del héroe de la lucha contra el apartheid y de su primera esposa Evelyn Mase, falleció el 6 de enero en Johannesburgo. Horas después, el Premio Nobel de la Paz 1993 anunció a la prensa que su hijo había "muerto de SIDA".

"Espero que con el tiempo nos demos cuenta de que es importante hablar abiertamente de quienes mueren de SIDA" y que la gente deje de verlo "como una enfermedad reservada a los que van al infierno y no al paraíso", dijo entonces.

El hijo de Makgatho, Mandla, reveló que su madre también murió de SIDA hace un año. "No es el primer muerto de SIDA. Nuestra madre también murió de SIDA pero seguimos sin acostumbrarnos a la muerte", declaró.

PROCESION. Tras la ceremonia, Nelson Mandela encabezó la procesión hasta el cementerio de la mano de su actual esposa, Graa Machel, donde asistieron a la inhumación.

Estaban presentes junto a él muchos miembros de su familia, así como su ex esposa Winnie Mandela.

Nelson Mandela, retirado de la vida política desde 1999, convirtió la lucha contra el SIDA en su prioridad. Emprendió una campaña bautizada 46664, su número cuando estaba preso, para recaudar fondos y llamar la atención sobre la enfermedad.

Sin embargo, como explicó, nunca imaginó al lanzar esa campaña que el SIDA afectaría a su propia familia.

Más de cinco millones de los 45 millones de sudafricanos están infectados con el VIH, cantidad que supera a la de cualquier otro país. Pero este año, el gobierno se negó a entregar drogas antirretrovirales —que prolongan la vida de los afectados— a través del sistema de salud pública. AFP