El papa Benedicto XVI abogó por la paz y la libertad de credos en Medio Oriente a la vez que expresó su "profundo respeto" por el islam al iniciar este viernes por Ammán, capital de Jordania, una visita de ocho días a Tierra Santa.
"La libertad religiosa es naturalmente un derecho humano fundamental y mi esperanza ferviente (...) es que sean cada vez más firmes y mejor defendidos, no sólo en Medio Oriente, sino también en todo el mundo", dijo el Papa a su llegada al aeropuerto internacional de Ammán.
El Papa fue recibido con una ceremonia oficial por el rey de Jordania, Abdalá II, a la que asistieron la reina Rania, miembros de la familia real, así como responsables políticos y dignatarios religiosos.
Benedicto XVI, que realizar su primer viaje a un país arábe desde que inició su pontificado en el 2005, pronunció su discurso en italiano.
"Mi visita a Jordania me brinda la feliz oportunidad de expresar mi profundo respeto por la comunidad musulmana", añadió Benedicto XVI, cuya disertación sobre violencia e islam al inicio de su pontificado, en la universidad alemana de Ratisbona en 2006, causó disgusto en el mundo musulmán.
Varios líderes islamistas jordanos criticaron la visita papal y exigieron disculpas por aquel discurso.
El jefe de la Iglesia católica reconoció igualmente el papel que Jordania cumple para la paz en la región y elogió sus "iniciativas" a favor del diálogo interreligioso.
Por su parte el rey de Jordania, donde viven unos 200.000 cristianos, la mitad católicos, entre sus seis millones de habitantes, prometió combatir "la provocación, las ideologías que tienen la ambición de dividir y que hacen planear la amenaza de sufrimientos indecibles".
"Aquí, ahora, debemos crear un nuevo diálogo global, de comprensión y buena voluntad", dijo el monarca.
El Papa aprovechó la ocasión para recordar "los esfuerzos a favor de la paz" del rey de Hussein de Jordania, padre del actual soberano, así como la acogida que ese país ofrece a los refugiados de Irak.
Durante el vuelo que lo condujo a Jordania, el jefe de la Iglesia católica defendió "el diálogo trilateral" entre las tres grandes religiones monoteístas, --cristiana, judía e islámica--, para alcanzar la paz en Medio Oriente
Para el Papa, la Iglesia católica apoya "posiciones razonables" en el proceso de paz en Medio Oriente y considera que puede contribuir favorablemente "porque no es una fuerza política, sino espiritual".
El Vaticano está a favor de la creación de un Estado palestino, pero el nuevo gobierno israelí rechaza tal solución.
En la tarde, el Papa visitó un centro para la rehabilitación de minusválidos de la capital jordana donde reiteró que viaja como "peregrino de paz".
"Vengo con una sola intención, una esperanza: orar por el don precioso de la unión y la paz, especialmente para Medio Oriente", dijo.
"Paz para Jerusalén, para Tierra Santa (...) paz duradera que nace de la justicia, la integridad, la compasión. La paz que surge de la humildad, el perdón, el deseo profundo de vivir en armonía los unos con los otros", agregó durante su visita al centro Regina Pacis, administrado por voluntarios jordanos, tanto cristianos como musulmanes.
En Jordania, Benedicto XVI permanecerá tres días y visitará una mezquita -la segunda visita de ese tipo durante su pontificado- y el lugar donde se dice que Jesús fue bautizado, en el río Jordán.
El lunes viajará a Israel para una visita de cinco días que incluye Jerusalén, Belén y Nazaret. (AFP)