Publicidad

Descartan tregua navideña y Rusia intensifica ataques en los territorios en disputa

Compartir esta noticia
Ucrania intenta reparar su red eléctrica, destruida por el bombardeo ruso
Workers repair power lines in the town of Lyman, Donetsk region, on December 14, 2022, amid the Russian invasion of Ukraine. (Photo by Genya SAVILOV / AFP)
GENYA SAVILOV/AFP fotos

GUERRA EN UCRANIA

El Kremlin advierte a Estados Unidos por el suministro a Ucrania de sistemas de defensa antiaérea Patriot; los bombardeos rusos han destruido buena parte de la infraestructura eléctrica ucraniana.

Ucrania descartó ayer jueves una tregua navideña hasta que Rusia no retire las tropas de su territorio, mientras el Ejército ruso ha intensificado su ofensiva en la región de Donetsk.

“Un completo alto el fuego por nuestra parte lo habrá solo cuando ni un solo ocupante permanezca en nuestro territorio”, dijo Alexéi Gromov, subjefe del principal mando operativo del Estado Mayor del Ejército ucraniano, en una rueda de prensa.

El Kremlin también negó esta semana esa posibilidad y conminó a Ucrania a aceptar “la realidad sobre el terreno”, es decir, la anexión rusa de cuatro regiones ucranianas.

En medio de los rumores sobre el posible suministro a Ucrania de sistemas de defensa antiaérea Patriot, Rusia advirtió hoy al gobierno de Joe Biden de que esto aumentaría el riesgo de una implicación directa de Estados Unidos en el conflicto armado.

“Muchos expertos, incluso en el extranjero, han cuestionado la sabiduría de tal paso, que conduce a una escalada del conflicto, aumenta el riesgo de participación directa del Ejército estadounidense en las hostilidades”, señaló en una rueda de prensa la portavoz de Exteriores de Rusia, María Zajárova.

Según la portavoz rusa, “Washington continúa torciendo los brazos de otros países de la OTAN, exigiéndoles una contribución más sustancial a la militarización de Ucrania”.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, descartó esta semana la posibilidad de que su país despliegue tropas en Ucrania.

Mientras, el centro de la ciudad de Jersón, abandonada por las tropas rusas hace un mes, fue bombardeado por segunda jornada consecutiva por la artillería rusa. Al menos dos personas murieron en los bombardeos, uno de cuyos proyectiles cayó junto a un punto de reparto de ayuda humanitaria y asistencia médica.

Los ataques alcanzaron la infraestructura civil más crítica y dejaron sin luz la ciudad y sus alrededores.

Los bombardeos se produjeron a solo cien metros del edificio de la administración militar regional, que sufrió daños en la víspera por misiles rusos y donde el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, izó la bandera ucraniana tras la retirada rusa al sur del río Dniéper.

“El próximo medio año será decisivo (...). Los próximos seis meses nos exigirán mayores esfuerzos”, dijo Zelenski al dirigirse ayer jueves a los líderes de la Unión Europea, a los que llamó a apoyar a Ucrania con armamento y equipos contra el “terrorismo energético” ruso.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad