Declaró Schoklender e involucró al vice Boudou

Duro. Dijo que quiso comprar acciones de su empresa

 20120604 800x437

El exapoderado de Madres de Plaza de Mayo, Sergio Schoklender, arremetió contra el vicepresidente argentino, Amado Boudou, implicándolo con la constructora inmersa en el desvío de fondos de la Fundación.

Investigado en la Justicia por encabezar una asociación ilícita que supuestamente desvió millones de pesos públicos, Schoklender dijo que Boudou "ofreció financiar proyectos de Meldorek", constructora de las casas que realizaba la Fundación Madres de Plaza de Mayo, con dinero del Estado.

A diferencia de su excontador Alejandro Gotkin -también imputado en la causa-, que en su declaración indagatoria aseguró que el exapoderado quiso venderle parte de las acciones de la constructora Meldorek al vicepresidente, Schoklender dijo que fue el propio Boudou el que se ofreció a comprarlas.

"Sergio me dijo que le iba a dar un porcentaje (de Meldorek) a Amado Boudou", había dicho Gotkin semanas atrás.

De la firma Meldorek, Schoklender poseía el 90% de las acciones, mientras que el resto pertenecían al piloto del avión del exapoderado, Gustavo Serventich.

Boudou había sido uno de los funcionarios -como ministro de Economía- que intervino en la aprobación de un crédito del Bicentenario por 10 millones de pesos (más de dos millones de dólares) para la construcción de viviendas sociales por parte de Meldorek, que trabajaba para las Madres.

En las gestiones por la constructora también participó la ministra de Industria, Débora Giorgi, y el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.

En su momento, Schoklender justificó la compra de Meldorek para poder acceder a dos aviones que, decía, necesitaba para recorrer las obras de las Madres en todo el país.

Sin embargo, tras estallar el escándalo, las principales sospechas apuntan a que el mano derecha de la presidenta de la Fundación Madres utilizó la firma para desviar fondos en beneficio propio.

Postura. Desde la cárcel, Schoklender, también volvió a cargar las tintas contra Hebe de Bonafini, presidenta de Madres de Plaza de Mayo, y su hija, Alejandra. "Acá se intentó tergiversar todo y reducir el tema de la participación de Alejandra a la venta de un departamentito, y en realidad su responsabilidad es muy grave", afirmó Schoklender desde el penal de Ezeiza, donde está alojado por decisión del juez federal Norberto Oyarbide.

En una entrevista televisiva, aseguró que fue la presidenta de la asociación de derechos humanos quien lo obligó a comprarle a Alejandra "un departamento de 90.000 dólares, una casa de 348.000 dólares, una camioneta, y varias computadoras".

Tanto Schoklender, como su hermano Pablo y Alejandra Bonafini están acusados de integrar la asociación ilícita -aunque la hija de Hebe no fue detenida- que desvió unos 280 millones de pesos (unos 62 millones de dólares) de los más de 700 (156 millones de dólares) que el Estado le destinó al programa de viviendas sociales "Sueños Compartidos".

Schoklender y Bonafini hija se cruzaron muy duro la semana pasada cuando fueron citados a declarar en los tribunales de Comodoro Py.

"Jamás integré una asociación ilícita", aseguró en diálogo con América TV. Y agregó: "Con la construcción de viviendas nunca hubo desvío de fondos, el problema fue no haber pasado por `caja`, a través de (el secretario de Obras Públicas, José) López y (el subsecretario de Vivienda, Luis) Bontempo".

Schoklender acusó también a la titular de Madres de realizar movimientos por 1.500.000 dólares que, según expresó, "nunca los ingresó a la fundación".

Por último, consultado sobre su situación en la cárcel, aclaró: "No me voy a suicidar, tengo el cuero muy duro. Esto para mí no es un juego de chicos, no me asusta. Doloroso es el silencio que intentan imponerme".

Schoklender: "No me voy a suicidar, tengo el cuero muy duro. No es un juego de chicos".

"Es un psicópata y un manejador"

BUENOS AIRES | La polémica y el cruce de acusaciones por el desvío de fondos públicos destinados al programa Sueños Compartidos de la fundación Madres de Plaza de Mayo continuó con las declaraciones de la hija de la presidenta de la fundación. María Alejandra Bonafini , hija de Hebe, acusó a Sergio Schoklender y lo llamó "psicópata y manejador".

"Fue un plan (de Schoklender) deliberado desde el comienzo, desde que le dio la carta en la mano cuando estaba en la cárcel", acusó María Alejandra Bonafini, al referirse a quien está acusado de se haber sido jefe de una asociación ilícita que desvió fondos públicos destinados a viviendas sociales.

La mujer, señalada en la Justicia como integrante de esa presunta asociación, agregó: "Schoklender es un psicópata y un manejador", informó la agencia DyN.

María Alejandra Bonafini, en una entrevista publicada el domingo por el diario Tiempo Argentino, argumentó: "Entró en un lugar donde hay una mujer que le faltan dos hijos varones y él se quería parecer a mi hermano Jorge, quien era muy inteligente, muy pensante y serio". "Como que Sergio se disfrazaba (psicológicamente) de Jorge y le entraba por ahí a mi vieja", añadió.

Alejandra dijo ante la Justicia que nunca supo que Meldorek, que le compró a ella el departamento que tenía en venta, pertenecía a Sergio Schoklender. La Nación/GDA.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar