BRUSELAS - AP, AFP Y ANSA
La ceniza del volcán Eyjafjoll volvió a perturbar el tráfico aéreo europeo y obligó al cierre de los aeropuertos de Italia, España, Portugal, Francia, Austria, Alemania y Croacia. Hubo 1.000 vuelos cancelados.
Aunque las interrupciones de vuelos de este fin de semana fueron menores que las del cierre de cinco días de espacios aéreos europeos de abril. De todos modos, miles de personas quedaron varadas este fin de semana con el regreso de la nube de ceniza, que está centrada en el Atlántico a una altura de 10.500 metros y toca partes de España y Portugal.
Al menos 1.000 vuelos europeos se cancelaron en siete países, lo que representó una baja del 4% con respecto al tráfico aéreo normal.
Los expertos también verificaron una "lenta disminución de la actividad volcánica, no suficiente para permitir previsiones confiables sobre el desarrollo de la erupción".
La Agencia Europea para la Seguridad en la Navegación Aérea (Eurocontrol) calcula que ayer hubo 24.000 vuelos en el área europea, menos de los 25.000, en promedio, que hay cada domingo. El sábado se cancelaron 200 viajes en el continente; se realizaron 22.424.
Bjorn Oddsson, integrante del instituto islandés que monitorea las emisiones del volcán Eyjafjoll, coincidió en que se redujo la cantidad de micropartículas de ceniza dentro de la nube, aunque advirtió que "la actividad del volcán es vivaz y podría volver a intensificarse".
En la zona europea, "la nube, de un color gris claro, se eleva entre 4 y 5 kilómetros de altitud, con picos de 6 kilómetros, y se dirige hacia el sureste, mientras los vientos de baja altura la impulsan hacia el Este", indicó un boletín emitido en Reykjavik.
CANCELACIONES. Con respecto a los vuelos transatlánticos, Eurocontrol reportó nuevas demoras y cambios de rutas: los aviones fueron desviados hacia la zona de Groenlandia para evitar los cielos afectados por la nube de ceniza. De todas maneras, no hubo cancelaciones masivas en los viajes intercontinentales.
La Autoridad Irlandesa de Aviación dijo que la nube tenía hasta 3.380 kilómetros de longitud y 2.250 kilómetros de ancho y ordenó el cierre de los cinco aeropuertos más occidentales del país. Sin embargo, las bases aéreas de Dublin, Cork y Shannon -las tres mayores de Irlanda- permanecieron abiertas porque la ceniza no afectaba su zona de operaciones.
La aerolínea irlandesa Aer Lingus se disculpó con sus usuarios por una serie de cancelaciones que está realizando desde el martes 4 de mayo, cuando la ceniza del Eyjafjoll volvió a amenazar el espacio aéreo del país luego de una pausa de dos semanas en que el tránsito en el cielo fue normal. Sus servicios transatlánticos a Boston y Nueva York operaron ayer, aunque hubo demoras.
"Cuando la nube impacta nuestro espacio aéreo, nuestro primer objetivo es planear una ruta diferente de vuelo para evitar cancelaciones, pero eso es a veces inevitable", dijo el director ejecutivo de Aer Lingus, Christopher Mueller, en una declaración en el portal de la aerolínea en Internet.
Desde Lisboa, Joao Andrade, del Instituto portugués de Meteorología (IM), declaró que "la banda de nubes se extiende sobre miles de kilómetros de Oeste a Este, más no es muy ancha, unos 300 km".
Declaró que la densidad de la ceniza era "suficiente" como para impedir el tránsito aéreo en toda la zona, como en los Azores y en Oporto, donde la totalidad de los vuelos se suspendió hasta la noche de ayer, según la agencia portuguesa de Navegación Aérea (NAV).
La NAV advirtió que la nube volcánica podría desplazarse hacia el Sur y provocar "restricciones operacionales" tanto en Oporto como en Lisboa, donde el Papa Benedicto XVI es esperado mañana para su primera visita de cuatro días a Portugal.
Sin embargo, el portavoz del Vaticano, el padre Federico Lombardi, confirmó el viaje del Papa al santuario portugués de Fátima.
"Actualmente, ningún cambio ha sido previsto en el programa" de Benedicto XVI, indicó el padre Lombardi.
En Italia, el espacio aéreo del noroeste se cerró ayer de mañana y perturbó el tráfico en los aeropuertos de Torino y Milán.
Según las autoridades aeroportuarias locales, se anularon 103 vuelos en Fiumicino de Roma, 194 en Milán-Malpensa, 85 en Milán-Linate, unos treinta en Torino y decenas en otros aeropuertos del país.
En cambio, las escalas de Venecia, Trieste y Rimini, destinos muy turísticos, se salvaron.
En España, la autoridad de control aéreo Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) anunció ayer de tarde que "la evolución de la nube de ceniza volcánica obliga a cerrar los aeropuertos de Asturias, Santander, Bilbao, Salamanca, Valladolid, León y Burgos".
También ayer de tarde abrieron, sin embargo, las bases de Santiago de Compostela, Vigo y La Coruña, que habían cerrado el día anterior. El sábado, 19 aeropuertos del Norte de España cerraron, entre ellos el de Barcelona, el segundo del país, y más de 900 viajes fueron anulados.
En Escocia cerraron seis aeropuertos y en Alemania, tres de la región de Baviera: Munich, Memmingen y Augusta.
En Francia, casi 70 vuelos, sobre todo con destinos al Norte de Italia y Portugal, fueron anulados en varios aeropuertos (París, Niza, Lyon, Burdeos y Toulouse), pero su espacio aéreo todavía no se ha visto afectado por la nube, según declararon fuentes aeroportuarias.
El Festival de Cannes está en peligro
PARÍS n Los organizadores del Festival de Cannes temen por las cancelaciones de vuelos en el aeropuerto de Niza, adonde aterrizan muchos de los participantes del Festival que comienza pasado mañana.
El Sur francés fue golpeado la semana pasada por olas gigantes que atemorizaron a la población y a los organizadores del evento.
El alcalde adjunto de Cannes, David Lisnard, bromeó con la situación y dijo que "incluso la nube" quiere asistir al Festival que aloja su ciudad. "Compruebo que todo el mundo quiere venir a Cannes, incluso la nube", bromeó. "Pero hablando más seriamente, los elementos que poseemos son más bien tranquilizadores", enfatizó.
"No se puede estar permanentemente alimentando temores", opinó el responsable, en alusión a las inquietudes sobre eventuales retrasos en los preparativos para el Festival, después de la tormenta que provocó olas de seis metros que causaron daños en la Croisette, el litoral de Cannes.
A los efectos de poner todo en orden, las autoridades de la ciudad no ahorraron medios. A partir de este miércoles, habrá en la localidad francesa cientos de artistas, realizadores, celebridades, productores, compradores y periodistas de todo el mundo.
El jurado de la 63° edición del festival, presidido por el director de cine Tim Burton, anunciará los premios el 23 de mayo. AFP
Una crisis aérea que no termina
El 14 de abril pasado, los países europeos cancelaron vuelos hasta cerrar por completo los aeropuertos del continente a causa de la nube de ceniza del volcán irlandés.
Durante la medida, en 5 días, 100.000 vuelos fueron cancelados en Europa y se calcula que 7 millones de personas quedaron varadas en cientos de aeropuertos de todo el mundo.
Primero se interrumpieron los viajes entre países europeos; pero luego, cuando la nube de ceniza se movió hacia el Océano Atlántico y se elevó hasta llegar a los 11 kilómetros de altitud, se cancelaron también los viajes intercontinentales.
Las aerolíneas fueron las primeras en presionar para que se reanudaran los viajes, pues cada día de inactividad les suponía unos 200 millones de dólares en pérdidas.
Hasta que se restableció por completo el espacio aéreo, el 22 de abril, las compañías de aviación de todo el mundo perdieron unos 1.000 millones de dólares, según sus propias estimaciones.
Las cifras
24.000 Es la cantidad de vuelos que hubo ayer en toda Europa, mil menos de los que suele haber todos los domingos.
100 Son los miles de vuelos que se cancelaron durante los cinco días que el espacio aéreo europeo estuvo cerrado hace casi un mes.