CONFLICTO ARMADO
El jueves, los presidentes de Rusia, Vladímir Putin; Estados Unidos, Donald Trump, y Francia, Emmanuel Macron, pidieron a ambos países un “inmediato” cese el fuego.
El conflicto en el Nagorno Karabaj cumple una semana de intensos combates sin que hayan visos de que Armenia y Azerbaiyán están dispuestas a dialogar un alto el fuego.
Las sirenas volvieron a sonar en Stepanakert, la capital del enclave separatista ubicada a medio centenar de kilómetros de la línea del frente, para anunciar un nuevo ataque, esta vez con cohetes, que causó destrozos. La mayoría de los habitantes se ha mudado a los sótanos de sus viviendas y trata de capear el temporal ayudándose entre sí, compartiendo agua y comida.
“A lo largo de la noche se abortó la actividad del enemigo en diversas direcciones del frente. Los cruentos combates continúan a lo largo de todo el frente”, afirmó el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán.
Por su parte, la vocera del Ministerio de Defensa de Armenia, Shushán Stepanián, informó que las fuerzas azerbaiyanas iniciaron una ofensiva masiva, abortada por las tropas armenias.
El jueves, los presidentes de Rusia, Vladímir Putin; Estados Unidos, Donald Trump, y Francia, Emmanuel Macron, pidieron a ambos países un “inmediato” cese el fuego y condenaron la escalada militar en la línea de separación de Nagorno Karabaj, cuya soberanía enfrenta a armenios y azerbaiyanos desde 1988. (Con información de EFE).