Un grupo de ciudadanos fronterizos conformó el "Movimiento de rescate y memoria del primer monumento a los constituyentes de 1830", emplazado en la intersección de Lavalleja y José Batlle y Ordóñez de la ciudad de Rivera.
El monolito originalmente estuvo en la plaza Artigas, la principal de la capital riverense. "Además de haber sido trasladado no tiene ningún tratamiento de conservación", dicen los integrantes del grupo, conformado, entre otros, por: Alfredo Parteli Gomes, Juan Carlos Bazzano Díaz, Carlos Patricio Berrutti, Jorge Smaldone, Jorge Maggi y Dino Marten Bias.
Este obelisco "es siete años más viejo que el que se encuentra en Montevideo, por lo tanto fue el primer monumento público emplazado con ese objetivo de destacar el origen de la República Oriental del Uruguay", aseguran.
Sostienen que "resulta imperioso destinar recursos para tareas de retiro, restauración y realzado del monumento. Además, esta obra debe ser reubicada en el sitio original por tres razones primordiales: es de interés nacional, es de interés departamental y por la conjunción de las propiedades estéticas y de solidez que difícilmente reúne nuestra arquitectura en general".
Aseguran que "el obelisco de Rivera fue construido con roca granítica uruguaya y los fondos para esculpirlo fueron donados por Francisco Piria".
En consecuencia, los integrantes del grupo sostienen que "del mismo modo que el obelisco de Montevideo, que es una referencia nacional, ubicado al centro de una fuente en bulevar Artigas y 18 de Julio, nuestro obelisco, que es anterior, debe ser reemplazado al centro de la plaza Artigas, que es su lugar de origen".
El obelisco fue donado por la Comunidad Italiana de Rivera, en el año 1930, y emplazado en la entonces plaza Río Branco hoy plaza General Artigas.
En 1942, sin identificar qué autoridad pública lo dispusiera, se desmanteló el obelisco y se lo ocultó en el corralón municipal. En 1946 fue instalado en Batlle y Ordóñez y Lavalleja.