Vázquez cambia y mitiga el impacto del aumento al IRPF

Queda igual en sueldos de menos de $ 50.100 y sube en franjas superiores.

El presidente Tabaré Vázquez anunció un cambio sustancial en el ajuste fiscal: no se subirá el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a los que ganan entre $ 33.400 y $ 50.100 nominales (ver nota aparte). Esto abarcará a alrededor de 200.000 asalariados y obligará al gobierno a buscar de dónde obtener unos US$ 60 millones para completar los US$ 500 millones que busca con el ajuste, y con los que pretendeabatir el déficit fiscal en un punto del PBI.

El mandatario acordó también ayer con el Secretariado del Frente Amplio, que no bajarán a 8% las deducciones de IRPF para quienes ganan menos de $ 33.400 y que se dividirá en dos la franja que a los efectos del cálculo de IRPF va de $ 50.101 a $ 167.000.

El presidente dijo que se incrementarán más de lo que estaba previsto las alícuotas del IRPF para quienes ganen más de $ 50.100, a fin de compensar la caída de ingresos que genera que se exonere del aumento a la franja previa. En el mismo sentido se modificará el Impuesto a la Asistencia de la Seguridad Social (IASS).

Los detalles se anunciarán tras el Consejo de Ministros del próximo lunes. El gobierno quiere enviar el proyecto de Rendición de Cuentas que incluirá estas novedades a mediados de junio. Cada Cámara del Parlamento tendrá 45 días para su análisis.

El mandatario descartó cambios adicionales en el Impuesto a la Renta de las Actividades Económicas (IRAE).

"Tampoco va a ser algo descabellado, estamos hablando de cifras moderadas. Esto no es un tarifazo, esto no es un impuestazo (...). El gobierno no es solo el gobierno, es la fuerza política que no ejerce el gobierno pero tiene la responsabilidad. La propuesta es una sola, es la que presentó el gobierno para profundizar la justicia tributaria", dijo el presidente. El anuncio lo hizo Vázquez rodeado de los integrantes del Secretariado del Frente Amplio.

Una posibilidad que se baraja en el oficialismo es que en la franja de $ 50.101 a $ 100.000 la alícuota que iba a fijarse en 23% termine en 24% y que en la franja de $100.000 a 167.000 se establezca en 25% y no en 23%.

"El gobierno tiene mucha cautela y mucha responsabilidad y todo lo que sean gastos superfluos lo vamos a llevar a su disminución. El número de cargos de confianza ya está disminuido y estudiaremos topes para sueldos muy importantes que hay en el sector público", agregó Vázquez.

El anuncio del gobierno mitiga pero no elimina el impacto neto del ajuste sobre la franja que va de $ 33.400 a $ 50.100. La suba de la alícuota para esta franja había generado el rechazo de la mayoría Frente Amplio.

Un cálculo del estudio Rueda, Abadi, Pereira, indica, a modo de ejemplo, que para un asalariado con dos hijos a cargo que gane $ 40.000 nominales, el impacto de la propuesta del ministro de Economía, Danilo Astori, más la reducción del porcentaje de deducción a 8%, llegaba a $ 867. Ahora el efecto de la reducción de la deducción es de $ 597, por lo que se puede estimar que el "alivio" que supone el cambio anunciado ayer con respecto a lo anunciado en un primer momento por Astori, es de $ 270.

Para el caso de un asalariado con dos hijos a cargo con un sueldo de $ 50.000 la carga se reduciría en $ 588.

Hoy todos los trabajadores pueden descontar del pago del IRPF ciertas partidas, como ser los aportes personales al BPS, los gastos por hijos a cargo y el pago al Fondo Nacional de Salud (Fonasa), entre otros. Para calcular esas deducciones se utilizan las mismas tasas del impuesto.

Las que suman entre $ 0 y $ 10.020 descuentan el 10% del pago de IRPF; entre $ 10.021 y $ 26.720 descuentan el 15%, y así sucesivamente. De esta forma, si un trabajador gana $ 40.000 nominales, puede descontar $ 7.800 (teniendo en cuenta solo aportes jubilatorios y Fonasa), lo que llevado a la tasa del 10%, da $ 780. Eso se resta a lo que se debe pagar por IRPF que en este caso es de $ 2.002, por lo que terminará pagando de impuesto $ 1.222.

La propuesta de Astori fue unificar en 8% las deducciones, pero Vázquez dijo ayer que la medida no abarcará los salarios inferiores a los $ 33.400.

El economista Pablo Moya, de Oikos, dijo a El País que si el gobierno tomó la decisión de no introducir cambios en la franja de $ 33.401 a $ 50.100, "lo fácil" es subir la carga a los salarios más elevados y porque aumentar la carga sobre el capital puede afectar al empleo. Moya no cree que se cumpla el objetivo de reducción del déficit y que en cualquier caso el ajuste será recesivo, por lo que debe optarse "por lo menos malo".

El secretario general del Pit-Cnt, Marcelo Abdala, dijo a El País que la decisión del gobierno es "un primer movimiento", pero que se requieren más datos sobre las deducciones. Por ahora, la central mantiene el paro general, pero para el 22 o 23 de junio, y no para el 29 como había anunciado, dijo Abdala al programa Quién es Quién de Diamante FM.

El Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) que grava los salarios es un impuesto progresivo, o sea, se le cobra más a quien gana más. El impuesto tiene un mínimo imponible que es $ 23.380. Esto implica que quienes ganan menos de esa cifra no lo pagan. Luego existen franjas salariales a las que se les aplican diferentes tasas para liquidar el impuesto. Hoy se paga un 10% sobre el tramo de salario que va de $ 23.380 a $ 33.400, un 15% de $ 33.401 a $ 50.100, un 20% al tramo entre $ 50.100 y $ 167.000, un 22% entre $ 167.001 y $ 250.500, 25% entre $ 250.501 y $ 384.100, y 30% sobre los que sobrepasan $ 384.101. Así, si una persona cobra $ 28.000, va a pagar IRPF por el tramo de salario por arriba de los $ 23.380 y hasta $ 28.000, esto es, por $ 4.620. En este caso la tasa es 10%, por tanto pagará $ 462 de IRPF. El ejemplo se extiende para salarios mayores. Alguien que gana $ 40.000 paga un 10% por el tramo entre el mínimo imponible y $ 33.400, y un 15% sobre lo que resta entre ese monto y lo que gana.

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La propuesta inicial anunciada por el ministro de Economía, Danilo Astori, aumentaba las tasas de 15% a 18%, de 20% a 23%, de 22% a 26%, de 25% a 29% y de 30% a 34%. Pero la tasa de 15% se mantendrá igual y la franja salarial entre $ 50.100 y $ 167.000 que está gravada con un 20% será dividida en dos nuevas franjas: $ 50.100 a $ 100.000 y $ 100.001 a $ 167.000, aunque no se especificó qué tasas se aplicarán en estos casos.

El gobierno quiere recaudar US$ 350 millones y postergar gastos por US$ 125 millones. De lo que planea recaudar, US$ 283 millones provendrían del incremento del IRPF por sueldos y US$ 18 millones del Impuesto a la Asistencia de la Seguridad Social. El exministro de Economía, Isaac Alfie, dijo a El País TV que los cambios en las deducciones mejorarían los ingresos del Estado en US$ 140 millones.

El presidente Tabaré Vázquez anunció ayer al Secretariado del Frente Amplio que no se postergarán los gastos destinados a educación, ciencia y tecnología. Por lo que se dará un incremento de $ 130 millones para diferentes organismos, entre los que están la Agencia Nacional de Investigación e Innovación ($ 100 millones), el Instituto Pasteur ($ 20 millones) y el Programa de Desarrollo de las Ciencias Básicas ($ 12 millones). El planteo había sido realizado por el Movimiento de Participación Popular (MPP), que junto a otros sectores del Frente Amplio se había mostrado preocupado por la postergación de estas inversiones.

"Analizamos las postergaciones de los incrementos que se previó en el Presupuesto para la ANEP, UdelaR y la Agencia de la Innovación; vamos a tratar de que eso no se difiera. Nuestra propuesta va a andar por ahí", dijo la semana pasada el exsenador Héctor Tajam, que ofició de vocero de la dirección del MPP.

La no postergación de gastos referidos a la educación y la tecnología para el año 2018, como había anunciado el ministro Danilo Astori, también fue planteada por el Secretariado del Frente Amplio, en una propuesta que entregó por escrito a Vázquez en la reunión de ayer en la residencia presidencial de Suárez y Reyes.

La Cámara Nacional de Comercio y Servicios cuestionó duramente el ajuste fiscal. En un comunicado sostuvo que "este paquete de acciones propuesto no sólo llega a destiempo, sino que tiene un trasfondo en un presupuesto aprobado el año pasado en el que se proyectó un aumento del gasto para los años siguientes, siendo conscientes del escenario de vulnerabilidad económica que el país ya estaba enfrentando y que tendría un fuerte impacto en un mayor deterioro de las cuentas públicas". "Es decir, se puso en riesgo la sostenibilidad de la planificación financiera del sector público, como resultado de una tendencia creciente del endeudamiento público", acusa la gremial.

"Esto se traduce en un aumento de la presión tributaria que debe enfrentar el sector privado, lo cual significa no sólo un cambio en las reglas de juego sino que también se vulnera uno de los grandes valores positivos de toda sociedad como lo es el principio de la veracidad, generando un perjuicio al sector empresarial que desarrolla su actividad económica a nivel local, a lo que se podría sumar el desaliento a la llegada de nuevas inversiones", advierte. "Los gastos del sector público han aumentado por encima de las capacidades productivas de la economía", insiste.

VIRAJE IMPORTANTEJ.P CORREA/L. BALDOMIR