Buenos Aires - Un custodio privado murió hoy al estallar dos bombas de fabricación casera en una sucursal del banco Citibank de Buenos Aires, mientras otros dos explosivos fueron colocados en otras sedes bancarias, donde un policía resultó herido.
El custodio de la sede del banco Citibank del barrio de Caballito, de 38 años de edad, murió mientras era operado en un hospital cercano al lugar de la explosión, en el cual había sido internado.
"La Secretaría de Seguridad de la Argentina trabaja sobre dos hipótesis: que los atentados tuvieran una motivación política o que fuera una maniobra distractiva, ya que a pocas cuadras se cometió el asalto a otro banco", explicaron sus voceros a ANSA. "Estamos en una etapa primaria pues tenemos que revisar los videos de los bancos para observar si hay indicios, pero nos suena raro que se trate de un atentado político", agregaron los funcionarios. Los voceros de la Secretaría de Seguridad aseguraron que "no hay indicios de que grupos políticos estén organizados como para cometer atentados" y resaltaron que "tampoco hubo una reivindicación de las bombas colocadas hoy, que tampoco contenían planfletos".
La última vez que se colocaron sendas bombas contra cajeros automáticos fue el 31 de agosto, con motivo de la visita del titular del FMI, David de Rato, que provocaron daños materiales de escasa dimensión.
En cambio, los funcionarios de Seguridad estimaron ante la consulta de ANSA que los atentados pudieron ser una nueva táctica de las bandas delictivas para generar una maniobra "distractiva, mientras asaltaban otro banco, como ocurrió en esta ocasión".
El banco asaltado fue el Macro Bansud, ubicado a pocas cuadras del Citibank del barrio de Caballito, en la zona oeste de la capital argentina, donde murió el custodio privado.
Las dos primeras explosiones se registraron alrededor de las 9.15 locales (10:15 hora de Uruguay) y se trató de bombas de fabricación casera colocadas en una sede del Citibank. Una tercera explosión, a las 9.30 hora local, se produjo en una sucursal del banco Galicia, ubicada sobre la céntrica avenida Santa Fe, norte de la ciudad, sin que se registraran heridos, informaron fuentes policiales.
El cuarto explosivo fue detectado y hecho detonar por la policía frente a una sede del Citibank ubicada a tres cuadras de la sucursal del banco Galicia, a las 11:20 hora local, donde resultó herido un policía.
El alcalde de la Ciudad de Buenos Aires, Aníbal Ibarra, manifestó su "profundo rechazo e indignación" por los estallidos y advirtió que "la violencia no puede instalarse en la Argentina".
La Asociación de Bancos Privados de Capital Argentino (ADEBA) repudió "con firmeza y preocupación" los criminales atentados y reclamó "una profunda investigación para que todo el peso de la ley caiga sobre los instigadores y ejecutores". La asociación bancaria consideró que "esta forma salvaje de violencia pertenece a una Argentina que ya ha quedado atrás con su triste secuela de muerte, dolor y desencuentro".
Los hechos se produjeron mientras el presidente de China, Hu Jintao, realizaba una visita a la Argentina con promesas de inversiones multimillonarias a un plazo de diez años.
La policía argentina informó que el custodio de 38 años ingresó al banco con el gerente, un adicional de la Policía Federal y una empleada administrativa. En el cajero se encontraron con una bolsa de supermercado en el que había un envase tipo tetrabrik , donde estaba oculto el artefacto, consistente en un caño galvanizado de 20 centímetros de largo. El empleado levantó la bolsa y se accionó el dispositivo, que ocasionó la explosión, tras lo cual resultó con una grave herida abdominal que le afectó el hígado y fue derivado en ambulancia al Hospital más cercano en estado desesperante.
La víctima sufrió una "arritmia y paro circulatorio" cuando era trasladada y murió minutos después en el centro asistencial, mientras era sometido a una intervención quirúrgica.
Personal de la Brigada de Explosivos de la Policía argentina hizo detonar otro artefacto explosivo encontrado en el mismo banco.
También estalló otra bomba de características similares en la sucursal del Banco Galicia en Barrio Norte, aunque allí sólo se registraron daños materiales. El tercer ataque se registró minutos frente a la sucursal del Citibank, a apenas tres cuadras de distancia del anterior, sin que ninguna organización se adjudicara el atentado.
La policía halló un paquete sospechoso al pie de un árbol y al hacerlo estallar un agente resultó con lesiones leves en una pierna. Poco después, tres delincuentes aprovecharon que la policía argentina se encontraba investigando en la sede del Citibank de Caballito y, a apenas cuatro cuadras de distancia, robaron una sede del Banco Macro Bansud.
ANSA