El cambio de voto de un ex representante colorado en el directorio del Banco Hipotecario del Uruguay (BHU) provocó que una deuda con el empresario Fernando Barboni por cese de contratos que originalmente era de unos U$S 9 millones, se convirtiera en una demanda judicial por U$S 130 millones.
Tres ex representantes blancos en el organismo salvaron su responsabilidad en el caso, al poner en conocimiento de la comisión legislativa que investiga la gestión de los entes entre 2000 y 2005, que en aquel momento del año 2004, ellos plantearon la necesidad de contratar un arbitraje externo al Banco para dilucidar las diferencias contractuales. Pero cuando el tema fue al directorio, los nacionalistas quedaron en minoría y el arbitraje quedó en la nada, según explicaron.
Los ex directores Néstor Moreira Graña, Gustavo Delgado y Raúl Giuria entregaron un documento de 2004 donde el directorio acordaba por mayoría la necesidad de apelar al arbitraje.
Pero, relataron ante la comisión que luego el Ejecutivo decidió impugnar esa resolución. Una vez vuelto al BHU, el directorio cambió porque uno de los directores colorados votó diferente e inclinó la mayoría en contra del pedido de arbitraje.