El Senado de la República aprobó anoche el proyecto de ley que reconoce como ahorristas a los clientes del Banco Montevideo y del Banco La Caja Obrera cuyos depósitos fueron derivados al Trade & Commerce Bank (TCB).
Con las barras colmadas, la Cámara Alta acompañó la iniciativa por 18 votos en 26. Respaldaron el proyecto todos los senadores del Partido Nacional, la bancada del Foro Batllista, el Nuevo Espacio y parte de la bancada del Frente Amplio. Votaron en contra los legisladores de la Lista 15 y los frentistas Danilo Astori, Alberto Couriel, Alberto Cid, Enrique Rubio y Marina Arismendi.
Cuando la mesa anunció el resultado de la votación, prorrumpieron los aplausos de la barra y los gritos de "justicia".
La iniciativa aprobada —que atenderá los casos hasta U$S 100.000— interpreta el artículo 31 de la ley que creó el Nuevo Banco Comercial y el Fondo de Recuperación Patrimonial de las entidades bancarias que cerraron en 2002.
Quienes se opusieron a la ley marcaron que la inclusión de los depositantes del TCB como ahorristas supone U$S 50 millones menos para el universo de ahorristas de los bancos liquidados, lo que bajaría en 10% la cuota parte que le correspondería a cada cliente, según se indicó.
En su fundamentación a favor de la ley, el senador blanco Francisco Gallinal dijo que la misma significa "el menor daño posible".
La senadora Arismendi —que votó en contra— reconoció que hubo parte de los ahorristas que fueron estafados, pero advirtió que la "sociedad uruguaya" no puede pagar por la "responsabilidad de los delincuentes".
El senador oficialista, Alejandro Atchugarry, dijo que la modificación "no la paga el Estado" sino que "repercute en los derechos de otros ahorristas".
Por su parte, el senador Carlos Julio Pereyra (Partido Nacional) apoyó la ley y anunció que presentará un proyecto para facultar al Estado para que pueda "proceder" sobre la responsabilidad de funcionarios públicos que no hayan cumplido correctamente con los controles.
En tanto, la senadora Julia Pou dijo que en un escenario "injusto" sería "mucho peor" no apoyar el proyecto.
El senador Astori dijo que hubo U$S 218 millones "que quedaron aquí" y U$S 97 millones que fueron al TCB. "Quiero atender con mayor prioridad a quienes dejaron el dinero en el país", expresó.
Sobre el final de la sesión, varias personas de la barra gritaron contra el senador Couriel cuando éste se disponía a hacer uso de la palabra. "¡Hasta nunca Couriel! ¡Quedate solo!", gritaron. Varios senadores rechazaron la actitud y se solidarizaron con el legislador.