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Ponen fin a la emergencia sanitaria: ¿qué implicancias tiene y qué cambiará?

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Daniel Salinas y Luis Lacalle Pou. Foto: Marcelo Bonjour.
Conferencia de Daniel Salinas, Ministro de Salud, Luis Lacalle Pou, Presidente de la Republica, y Alvaro Delgado, Secretario de Presidencia, para anunciar la decicion de volver al cierre parcial de fronteras tras la reunion del Consejo de Ministros para analizar la situacion de la emergencia sanitaria a causa de la pandemia de coronavirus Covid19 en Uruguay, en la Torre Ejecutiva en Montevideo, ND 20210127, foto Marcelo Bonjour - Archivo El Pais
Marcelo Bonjour/Archivo El Pais

TRAS DOS AÑOS

Uso de tapabocas se recomienda, pero deja de ser obligatorio salvo en sintomáticos.

Daniel Salinas y Luis Lacalle Pou. Foto: Marcelo Bonjour.

Dos años y 17 días después acabó la emergencia sanitaria. Presidencia de la República y el Ministerio de Salud Pública acordaron ayer el punto final a la declaración de emergencia que regía desde la noche en que Uruguay reportó sus primeros cuatro infectados con el coronavirus.

“Llegó el día anhelado”. La voz de José Luis Satdjian, subsecretario de Salud, es de alivio. Porque si bien la pandemia no acabó -ese es un rótulo que depende de la Organización Mundial de la Salud-, la marcha epidemiológica local permite decir adiós a la obligatoriedad de la mayoría de las medidas preventivas.

Las autoridades sanitarias concurrieron ayer a la Torre Ejecutiva, sede de la Presidencia, con las últimas evidencias epidemiológicas: la letalidad por covid-19 alcanzó su mínimo histórico (ocho fallecidos cada 1.000 infectados), diez semanas consecutivas de caída de casos positivos, 38 internados en cuidados intensivos (de las 857 camas que dispone el sistema), y la circulación de las mismas variantes para la cual la mayoría de la población tiene inmunidad (por vacunación o infección natural).

Con esos datos sobre la mesa concertaron la finalización del decreto 93/020 que, aunque parezca un simple tema jurídico y de nomenclaturas, implica cambios en los protocolos y en cómo la sanidad hará el seguimiento a la epidemia.

Medidas preventivas

Salvo para aquellas personas con síntomas del covid-19, quienes deberán seguir usando el tapabocas obligatorio, la mascarilla facial pasa a ser una recomendación y no una imposición. En el transporte público, por ejemplo, el chofer no puede prohibir el ingreso de un pasajero porque no lleva puesto su protección.

Al menos esa es la interpretación que hace el constitucionalista Martín Risso, director del Departamento de Derecho de la Universidad Católica del Uruguay. Distinto es el requisito para el ingreso a un establecimiento privado. “En el país sigue rigiendo el derecho de admisión, y así como en un almacén pueden exigirle a un cliente que ingrese sin una visera tapándole la cara, también puede exigir el uso del tapabocas”, dice Risso.

La normativa uruguaya, agrega el constitucionalista, establece que “no puede exigirse cosas descabelladas, pero sí medidas preventivas que están probadas y que incluso hacen a una buena imagen comercial de la empresa”. En el caso del ómnibus, “el pasajero puede aducir que es su mecanismo de transporte y no tiene otra opción, pero en un supermercado o un baile puede existir admisión y que el cliente vaya a otro local”, advierte Risso.

Las autoridades sanitarias se reunieron este martes con las máximas jerarquías del Ministerio de Educación y de la Administración Nacional de Educación Pública y resolvieron que no habrá más cuarentenas. "No hay más cuarentena. A la persona que tiene síntomas se le pide idealmente que no vaya a clases y si no que vaya con tapabocas mientras tenga síntomas y el resto siguen asistiendo normalmente", dijo el ministro de Educación Pablo da Silveira en diálogo con El País. La medida "aplica a todos los centros educativos del país, públicos y privados, para todos los niveles", detalló en conferencia de prensa tras la reunión Robert Silva.

La Universidad de la República, por su parte, espera la redacción del nuevo decreto para tomar una posición, ya que tiene autonomía en la toma de decisiones.

Más allá del cambio de protocolos, el MSP insistió en un comunicado con que siguen vigentes las recomendaciones de lavarse las manos, ventilar los espacios cerrados, la medición continua del dióxido de carbono en interiores y la adherencia a la vacunación.

Eso sí: el aforo a cualquier actividad ya no cuenta con limitante de personas ni se exigirá la presentación del certificado de vacunación.

Medidas de vigilancia

Los reportes diarios de los casos de covid-19 -esos que emite el Sistema Nacional de Emergencias, que formaron parte de la rutina epidémica y hasta implicaron móviles en vivo de los informativos centrales de televisión- pasarán a emitirse una vez por semana. Esa es la señal más evidente de que, desde ahora, la epidemia tendrá un seguimiento más parecido al resto de las infecciones respiratorias.

Pero, como ya han señalado las autoridades, el covid-19 “no es una gripe más” y, por tanto, “hay cambios culturales que se imponen”. Uno de las modificaciones del comportamiento social al que aspiran desde el MSP es que aquella persona que tenga síntomas, se aísle y llame a su prestador de salud.

Cuando se interna a una persona o cuando el afectado es personal de la salud, el criterio es que se le realice un test de diagnóstico del coronavirus. De lo contrario, el paciente tiene que seguir la indicación médica.

El MSP pidió especial atención con aquellas personas que tienen factores de riesgo. En esos casos se recomienda el testeo, siempre y cuando lo dictamine un médico. Lo mismo para el alta hospitalaria de aquellas personas que residen en establecimientos de larga estadía o en cárceles.

En los casos en que se le realice un test a una persona con una infección respiratoria aguda y el resultado sea positivo al coronavirus, la muestra será enviada para la secuenciación genómica. El objetivo de esta medida es que los científicos puedan ir monitoreando el ingreso de nuevas variantes, una de las incertidumbres biológicas del fin de la emergencia sanitaria.

En esa misma línea, seguirán notificándose los infectados confirmados del covid-19, seguirá la categorización de fallecido con covid-19 e internado por la misma causa (aunque el reporte del Sinae se limite a una vez por semana).

Medidas de ingreso

El pasado viernes el gobierno anunció que ya no es requisito el test PCR o antígeno para quienes tengan la vacunación completa contra el covid y quieran ingresar al país. Esto, pese al levantamiento de la emergencia sanitaria, se mantendrá, dijo el ministro de Salud, Daniel Salinas. Forma parte de un acuerdo al que se llegó con los ministros de Salud del Mercosur.

Tampoco requerirán test aquellos pacientes que hayan cursado la infección hace más de diez días y menos de 90.

El MSP reiteró que “no deberían viajar personas sintomáticas o que hayan sido recientemente identificadas como contacto de caso confirmado (en los últimos cinco días)”.

Así las cosas, la nueva normalidad toma forma, cada vez más, de normalidad a secas.

El secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, confirmó a El País que el Fondo Covid, que en el año en curso desembolsará US$ 400 millones, seguirá vigente hasta que el gobierno determine su punto final.

Estrategias de control y vigilancia contra el covid-19

-Uso obligatorio y permanente de mascarilla facial en personas con síntomas respiratorios. Y también se aconseja su utilización en personas asintomáticas cuando usen medios de transporte colectivo de personas y para el personal sanitario con atención regular a público o pacientes. El gobierno también recomienda el uso de mascarilla facial a funcionarios encargados del cuidado de grupos vulnerables (refugios, cárceles, centros de cuidado de personas con dependencia funcional, etc.) o de personas no vacunadas. También deben utilizar mascarillas personas que sean parte de espacios dónde se sospeche la ocurrencia de un brote de enfermedad respiratoria aguda. La mascarilla se aconseja, además, en espacios cerrados con aglomeraciones de personas. Así también en trabajadores que manipulen alimentos.

-Al ingreso de personas al país no se pedirá ningún test para detección de coronavirus, salvo para aquellas no vacunadas.

-Toda persona con sintomatología respiratoria debe iniciar aislamiento y consultar con su mutualista a la brevedad para ser evaluado no concurriendo a sus actividades regulares y minimizando la interacción con otras personas. Si el caso no presenta criterios de internación, solo se recomienda testeo para covid-19 en personal de Salud. Aquellas persona con sintomatología leve que no sea personal de salud podrá testearse para covid-19 según indicación médica.

-Todo caso de infección respiratoria aguda o crónica agudizada que requiera internación (IRAG) deberá ser estudiada con Test de Antígeno y PCR para SARS-COV-2 en forma inmediata.

-Toda internación por infección respiratoria aguda positiva al covid-19 deberá ser notificada exclusivamente on line al Sistema de Vigilancia en un plazo no mayor a 24 horas.

-Ante la detección de la ocurrencia de dos o más casos sospechosos de enfermedad respiratoria aguda con posible nexo con coronavirus, deberá notificarse al sistema de vigilancia al mail [email protected], dentro de 24 horas de detección de la situación.

El sistema de vigilancia nacional del MSP continuará monitorizando e investigando con fines epidemiológicos todo caso confirmado de SARS-Cov-2 que requiera internación así como todo caso fallecido con test positivo sobre dicho virus.

El aforo para toda actividad, cerrada o abierta sin control de vacunas será de un 100%, recomienda el gobierno.

Fueron dos años exigentes
José Luis Satdjian. Foto: Estefanía Leal.

“Esta es la pandemia de la incertidumbre y, a medida que la ciencia fue arrojando luz y confianza, los uruguayos tomamos real conocimiento del desafío”, dijo el subsecretario de Salud, José Luis Satdjian. Para el jerarca todavía no es momento de una evaluación general del manejo de esta pandemia, sino que debería darse “cuando el mundo pase esta etapa”. Pero, como adelanto, el subsecretario reconoce que “fueron dos años en los que la pandemia nos exigió a todos dar nuestro mejor esfuerzo para salir adelante: primero aplanamos la curva de contagios, cuidándonos entre todos y poniendo por encima el bien mayor de la salud. Luego fue adhiriendo a la vacunación, que es la gran herramienta que tenemos para continuar transitando este camino hacia el final de este tiempo”.

Por su parte, el ministro de Salud, Daniel Salinas, dijo que “es el momento de hacer este cambio cualitativo necesario hacia la normalización”. ¿Por qué? En rueda de prensa, tras el acuerdo del fin de la declaración de la emergencia sanitaria, respondió: “Veíamos en la evolución que los números bajaban, que estamos en un nivel mínimo y que este es el momento de hacerlo; (...) es un momento epidemiológico muy favorable para el país”.

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