Elecciones 2019
Dijo que si gana el cambio no será “traumático” ni se perderán logros del FA.
El objetivo es claro: se busca espantar los "fantasmas". Esas ideas que ya empezaron a plantear los dirigentes del Frente Amplio sosteniendo que si gana el Partido Nacional, todas las conquistas sociales y mejoras logradas en los gobiernos de izquierda se perderán. Por eso, el precandidato blanco Luis Lacalle Pou remarcó que con su triunfo "no se volverá para atrás" y que el cambio no será traumático.
Incluso el senador apeló a un nuevo concepto para graficar sus líneas programáticas: la evolución. La pasada campaña electoral el blanco logró éxito con su idea de "por la positiva". Fue así que sorprendió en la interna y triunfó sobre Jorge Larrañaga.
Ahora con las posibilidades de un triunfo nacional aparentemente más grandes, Lacalle Pou busca neutralizar los ataques desde el oficialismo que lo señalan de "restaurador". Por eso apela a la idea de "evolución" para explicar su plan de cambio en el gobierno.
"El cambio en sí mismo no tiene una connotación positiva. No necesariamente es bueno. Simplemente establece que yo quiero cambiar, lo que no quiere decir es que ese cambio sea para bien. Evolucionar sí tiene una connotación positiva", explicó el precandidato en el discurso de cierre del congreso de "Todos" en Trinidad.

Su agrupación se reunió todo el fin de semana para presentar los lineamientos programáticos que guiarán la campaña electoral. Los blancos saben que tienen una chance grande de recuperar el gobierno en la elección nacional.
Pero son conscientes de que para lograr eso hay dos aspectos clave: no cometer un solo error y contrarrestar las acusaciones de los frenteamplistas que los señalan como el partido de la "restauración".
Esa estrategia ya se vio este fin de semana en Trinidad. Por un lado se cuidaron hasta el más mínimo detalle de cualquier episodio no controlado. Los habituales vecinos que llegan con planteos que descolocan a panelistas, por ejemplo.
Pero también hubo un analizado y cuidado manejo de las palabras en cada uno de los discursos. Fue así que Azucena Arbeleche, la principal asesora económica de Lacalle Pou, explicó que se dará un giro de la política económica, "desde el Estado hacia la gente".

Pero evitó la palabra "ajuste" o "recorte" ya le costó una elección a los blancos en 2009.
Lo mismo pasa con la idea de "cambio". Ayer en el cierre del evento Lacalle Pou machacó con que la idea es evolucionar. Y les pidió a sus militantes y dirigentes que para hacerlo tengan una "enorme cuota de humildad".
Y luego explicó que esa evolución será sin refundaciones ni "marchas atrás", como lo dice el documento. "No es bueno volver para atrás", declaró.
Coalición.
Blancos y colorados han sido aliados en momentos que les tocó gobernar y apostaron por una coalición. Hoy esa idea ya la tienen conversada de forma informal. Pero también se sumarían el Partido Independiente y el Partido de la Gente de Edgardo Novick.
Esta situación sería inédita. "Vamos a hacer una coalición de dos o tres o más partidos. Hay que actuar en consecuencia. Si queremos ser los elegidos. Y si queremos tener socios, primero tenemos que ser confiables, tratarlos bien, respetar los tiempos de los distintos partidos. No queremos llegar rápidos y solos", explicó Lacalle Pou.
En ese sentido adelantó que "más temprano que tarde" se deberá pensar por parte de la oposición en una plataforma electoral común para gobernar el Uruguay.
Aquel 2004.
El líder blanco sabe que tiene una chance inmejorable para convertirse en presidente. Y trabaja para conseguir los votos explicando que el cambio no será traumático para el país.
Sostiene que ese cambio es necesario, como dice que también lo sintió en 2004, momento en que el Frente Amplio rompió la hegemonía blanca y colorada y triunfó en la elección nacional. En esa campaña el candidato blanco Jorge Larrañaga fue derrotado por Tabaré Vázquez.
"Tiendo a pensar que la decisión de la ciudadanía en 2004 fue sabia", opinó Lacalle Pou ayer.
La impronta para la campaña, y una ausencia muy llamativa
La de ayer fue la salida del túnel del candidato a la cancha. "Hoy es un día muy importante en la vida del partido, del sector, y también de mi persona", dijo Lacalle Pou. El precandidato blanco dejó entrever cual será su impronta para la campaña electoral. En su discurso mantuvo el tono durante los 60 minutos clavados que duró. No elevó la voz en momentos que criticó al gobierno, no lo hizo cundo repitió que la seguridad no tiene arreglo con el Frente Amplio, ni tampoco para pedirle a su militancia que salga a dejar todo en la cancha para convencer a la gente de la necesidad del cambio. Les pidió humildad, dedicación y respetar a los rivales. Por eso aclaró que no lo encontrarán si la campaña se vuelca hacia los agravios. Dijo estar con fuerza y ver con fuerza a su sector. Los militantes decían estar entusiasmados. El de ayer fue el cuarto congreso en Trinidad. Pero el primero del ex frenteamplista Gonzalo Mujica, ahora con los blancos. Sin embargo hubo una ausencia clave: Luis Alberto Lacalle de Herrera, padre del precandidato no asistió.

Las líneas programáticas fueron presentadas en 19 puntos. El primero es el que hace referencia a la evolución. El número dos plantea la necesidad de cambio: "Se trata de una situación normal en las sociedades democráticas", plantea el texto.
Cada uno de los puntos fue presentado conceptualmente. Pero a partir de ahora los equipos técnicos irán anunciando la serie de medidas concretas para cada caso. "Una deuda pendiente: las generaciones jóvenes", es el punto ocho vinculado a la educación.
"Tenemos que cuidar a todos y tenemos que cuidarnos entre todos. Pero muy especialmente tenemos que dar protección y oportunidades a las nuevas generaciones de uruguayos, es decir, a nuestros niños y nuestros jóvenes", plantea.
Ayer en el acto Lacalle Pou fue más especifico y anunció que construirá "un par más" de liceos militares en el Uruguay. Con su planteo, contrarrestó la idea que está plasmada en las bases programáticas del Frente Amplio de estudiar la eliminación del liceo militar.
"No hay forma de evolucionar si no medimos. Todo hay que medir. Por eso queremos que esos liceos, centros educativos, esa formación dual, que esos liceos militares que vamos a tratar de tener un par más y no cerrarlos como quieren algunos, integren un ranking, que sean medibles", planteó el precandidato blanco.
El líder del sector "Todos" dijo que su idea de evolucionar también será aplicada en las políticas educativas. "La educación desde el Estado tiene que cambiar. Tiene que evolucionar en lo curricular, en la forma de relacionarnos", explicó.
Allí hizo énfasis en mejorar la formación docente, ya que a su entender es donde se juega el partido clave.
En cuanto a la seguridad dijo que será él quien será el principal responsable. "Nosotros vamos a delegar atribuciones, no voy a delegar en nadie la responsabilidad de la seguridad pública. Esa es mía y no se puede delegar", declaró.