Cabildo Abierto de duelo tras la muerte de su mentor Hugo Manini Ríos

Por Pamela Díaz
Cabildo Abierto vive la pérdida de uno de sus referentes, Hugo Manini Ríos. Fue una persona que no pasó desapercibida. De joven integró la Juventud Uruguaya de Pie (JUP), luego dirigió la Sociedad Rodoniana, fue un mentor para el joven partido político y más tarde refundó el semanario La Mañana. Los integrantes de Cabildo Abierto lo consideran un “maestro” que los marcó con sus ideas, aunque decidió no ser una figura visible de la agrupación.

Fue una persona a quien no le interesaba el “protagonismo personal”, que “podía ser muy duro en un reproche y al rato extremadamente cálido”, y que estaba “muy contento” de que su hermano Guido Manini Ríos “haya podido armar con mucho brillo un partido que levantaba las banderas en las que él creía”, describió a El País el presidente de Cabildo Abierto, Guillermo Domenech.

El legislador dijo que su partido representa en un 99% del ideario de este Manini Ríos, quien fue uno de “esos hombres que marcan un trillo hermoso de seguirlo”, una persona “realmente muy sensible”. Y añadió: “Siempre estaba dispuesto a contemplar al otro, a ser generoso con los errores de los alumnos”.

Marcó, dijo Domenech, sobre todo, al líder de Cabildo: “en el fondo, es un alumno de su hermano mayor”. Recordó que los Manini “perdieron al padre” cuando el senador “era chico” y que el empresario “fue, de alguna manera, el que tomó la conducción de la familia”. Por lo tanto, “todo lo que Guido dice, de alguna forma, está inspirado en sus enseñanzas”, concluyó.

Manini Ríos los “marcó ideológicamente” de “manera profunda” en lo que Domenech sintetiza “como el nacionalismo católico”.

Por su parte, el coordinador político de los cabildantes, Marcos Methol, contó que Hugo Manini Ríos representó una “corriente de ideas que aprendió de su abuelo Pedro, que está muy vinculado con el pensamiento rodoniano. Eso nutrió mucho a lo que es Cabildo Abierto, y ha sido un referente, un maestro”.

A pesar de no integrar la orgánica del partido, sus opiniones eran escuchadas. Los integrantes intercambiaban ideas con él en “charlas muy enriquecedoras” y “daba aportes políticos importantes”, según indicó a El País una de las personas que fundó el partido y hoy es vicepresidente del Cabildo de Montevideo, Eduardo Radaelli.

Cumplió un rol en segundo plano y sin visibilidad pública. Domenech “siempre” creyó que uno de los senadores cabildantes debería haber sido Hugo Manini Ríos, no él. Pero “quizás no era la imagen que se quería dar de un partido que podía parecer un emprendimiento familiar”.

Consultado sobre por qué no tuvo un rol público, respondió: “Le preocupaba tener sucesores. Tenía muy claro que somos una especie de chispa en el fuego de la vida, y que es necesario que ese fuego permanezca encendido. Lo que quería era eso. Entonces, no le interesaba el protagonismo personal sino que se abriera paso a un ideario que era bueno para Uruguay y el mundo”.

Casi al mismo tiempo que se oficializó la creación de Cabildo, se relanzó La Mañana, en esta oportunidad en una edición semanal, y Hugo Manini Ríos ocupó el cargo de director. Sus columnas eran, para Domenech como “el instructivo de la semana”.

Antes de refundar el medio de comunicación y de cumplir un papel fundamental en Cabildo Abierto, fue presidente de la Asociación Cultivadores de Arroz, donde tuvo una “actividad destacada”, señaló el director en el Banco República por Cabildo, Pablo Stijar. Y es que, durante parte de su vida, Hugo fue un empresario de este sector de producción.

También presidió la Sociedad Rodoniana, que tiene como objetivo la difusión de la obra del escritor uruguayo José Enrique Rodó. Además, en la década del 70 integró la JUP, la organización estudiantil de derecha, nacionalista y anticomunista.