Redacción El País
El canciller Francisco Bustillo irá al Parlamento el 8 de noviembre para explicar la “lentitud” y la “floja” respuesta del gobierno uruguayo ante el desplazamiento de varias decenas de miles de personas luego de que tropas de Azerbaiján ocuparan el enclave separatista poblado por una mayoría étnica armenia. La citación la presentó la senadora frenteamplista Liliam Kechichian, que hizo notar que, mientras la invasión azerí y sus efectos se concretaron el 12 de setiembre, el pronunciamiento de Cancillería llegó recién el 30 de ese mes.
En cuanto a su contenido y pese a que el ministerio declaró su preocupación por las consecuencias humanitarias e hiciera referencia a los históricos “lazos de amistad” con Armenia, Kechichian cuestiona que el gobierno ponga en pie de igualdad a Azerbaiján y a los independentistas de la “República de Artsaj”, cuando se habla de exhortar a las partes a abstenerse de adoptar medidas” que agudicen las tensiones y agraven la situación de los civiles.
La senadora lamentó que el gobierno no condenara la acción azerí contra la población armenia y dijo sentir “mucha tristeza” de que Uruguay “abandone” su tradicional defensa de ese pueblo.
Tras la invasión azerí, la “República de Artsaj”, un enclave de mayoría armenia en territorio de Azerbaiján y sin reconocimiento internacional, dejará de existir el 1° de enero. Se pondrá fin así a un conflicto originado cuando en 1988, en los años finales de la Unión Soviética, Armenia reclamó la restitución de un territorio que considera histórico y que había sido asignado a su vecino país a principios del Siglo XX. Pasó a estar autogobernado tras la victoria armenia en 1994, en una de varias guerras por su dominio.