El hombre responsable de iniciar el fuego en el pasado fin de semana en Sierras del Tirol, a pocos minutos en auto de Piriápolis, que terminó con seis hectáreas prendidas fuego, fue condenado ayer tras una audiencia que se celebró en Maldonado.

Esta persona había ya reconocido el domingo que había iniciado el fuego y dijo que lo había hecho con el objetivo de “limpiar” un terreno de su pertenencia. “Se me terminó yendo de las manos”, incluso confesó.

El caso fue evaluado el mismo domingo por la fiscal Fabiana Corbo, que luego de interrogarlo aceptó que lo liberaran por entender que “únicamente había afectado terrenos privados” y que “no puso en peligro la vida de terceras personas”.

Luego, durante la madrugada del lunes, el fuego se reavivó y llegó a afectar territorio público, por lo que la fiscal reabrió el caso y finalmente interpretó que se había “puesto en riesgo la vida de otras personas”.

Por ese motivo se convocó ayer la audiencia en la que se terminó condenado al hombre con 18 meses de prisión preventiva, los que deberá cumplir en régimen de libertad a prueba.

Los primeros nueve meses de condena los pasará con arresto domiciliario total, mientras que los restantes los cumplirá con medidas preceptivas y deberá realizar trabajos comunitarios.

Además, la Intendencia de Maldonado estudia el caso para evaluar si se incurrió en alguna falta municipal.

Al cierre de esta edición, el incendio permanecía “controlado”. Según informaron desde la Dirección Nacional de Bomberos a El País, “hay que tener paciencia”, y “no apurarse” en estos casos. “Puede que sea declarado como extinto mañana (por hoy)”, concluyeron. Es que se seguían llevando adelante tareas en el marco de la etapa de enfriamiento.

“Para que el incendio sea declarado extinto, tienen que pasar ocho horas de luz en las que no se detecte humo ni fuego, y que el terreno sea enfriado”, explicaron.

El fuego comenzó pasado el mediodía del domingo en Sierras del Tirol -próximo al Cerro Pan de Azúcar-, y personal de Bomberos de esta ciudad acudió rápidamente al lugar.

Al ver que se trataba de un terreno al que era “casi imposible acceder”, según declararon desde Bomberos, se solicitó el apoyo de la Armada Nacional y la Fuerza Aérea, quienes dieron apoyo hídrico desde dos helicópteros.

Con el pasar de las horas se consiguió reducir las llamas, hasta que fue controlado en la tarde del lunes. Uno de los momentos más críticos, al que se le tuvo que prestar especial atención, fue entre la mañana y el mediodía del lunes, ya que, según explicó a El País Simón Burlón, vocero de Bomberos, en esa franja horaria se dieron las temperaturas más altas, aumentando así el riesgo de que las llamas se reaviven.

Con el trabajo conjunto de más de 50 personas -30 de Bomberos sumado al personal que brindó apoyo hídrico-, se logró “controlar de buena manera”, y para la noche del lunes se habían reducido las cortinas de humo.

También se continuó con el trabajo durante la madrugada del lunes y martes con el objetivo de que el fuego no se reavive.

“A los ojos de una persona casi no son reconocibles las zonas calientes”, dijo Burlón, y explicó que estas son identificadas a través de cámaras termográficas que se instalan a drones. De esta forma, al conocer los puntos que concentran mayor temperatura, los helicópteros pueden tirar el agua donde corresponda.

Consultado sobre los trabajos luego de controlado el incendio, tanto Burlón como Mauricio Souza, coordinador del Centro Coordinador de Emergencias Departamentales (Cecoed) de Maldonado, coincidieron en que “no se termina el trabajo hasta no lograr que se enfríe la zona y tener la certeza total de que no existe ningún riesgo”.

Según contó Souza, periódicamente se hacen recorridas por lugares en los que se tiene registro que por sus condiciones presentan riesgos reales de incendio ante altas temperaturas.

Tanto Souza como la Dirección de Bomberos, hicieron hincapié en que desde noviembre hasta la segunda quincena de abril no está permitido realizar quemas si no se cumple con determinados requisitos.

“Es necesario que las personas respeten las medidas de seguridad y se asesoren en caso de ser necesario en el destacamento de Bomberos más cercano”, dijo Souza.

Desde Cecoed se “monitorean constantemente” varias actividades entre las que se encuentra la subida al Cerro Pan de Azúcar, debido a que las altas temperaturas -que pueden impactar en la salud de las personas- sumadas al riesgo de incendio por las condiciones del lugar, pueden resultar peligrosas.

“Hasta el momento se han dado las condiciones para que esta actividad sea llevada adelante con normalidad”, dijo Souza, aunque aseguró que “siempre está bajo evaluación.