Redacción El País
Un siniestro de tránsito ocurrido el pasado miércoles en Rivera sigue teniendo idas y vueltas a nivel judicial. El presunto responsable de atropellar a un niño de diez años —que hoy se encuentra grave— primero huyó de la escena y rato más tarde fue detenido. Lo citaron a declarar al día siguiente, pero no se presentó y la sospecha de los investigadores es que escapó de nuevo, esta vez a Brasil.
El nuevo parte de la Jefatura de Policía de Rivera indica que el niño fue trasladado a Tacuarembó, donde permanece en CTI en estado grave. Añade que "presenta crisis" y su vida "corre riesgo".
Una vez que el hombre presuntamente responsable había sido detenido, fue citado por la Fiscalía a declarar este viernes, pero sobre la marcha la citación se adelantó para el jueves.
Sin embargo, el hombre incumplió el llamado y cuando fueron a buscarlo no lo encontraron, sino que "se obtiene la información de que se habría retirado a la ciudad de Santana do Livramento, dado que no tiene intenciones de presentarse".
La Fiscalía tomó entonces la decisión de librar una orden de detención.
Cómo fue el siniestro de tránsito
Según informó la Jefatura de Policía de Rivera en un comunicado, los funcionarios de la Brigada de Tránsito fueron llamados el miércoles a la esquina de Avenida Altivo Esteves y Eduardo Pachiarotti, a pocas cuadras del límite fronterizo con Brasil.
Allí había un niño de diez años "caído contra el cordón", según el parte policial. El diagnóstico médico fue "politrauma severo grave" y fue trasladado a un sanatorio.
En la escena no estaba el responsable de la embestida, pero mientras la Policía Científica analizaba el lugar y buscaba indicios, otros efectivos vieron que un auto con matricula brasileña circulaba por la zona del hecho y "presentaba daños en su parte delantera".
El conductor fue identificado, tiene 28 años de edad, nacionalidad brasileña y licencia de conducir de ese país. La documentación del auto está en regla, aunque pertenece a otra persona.
El hombre aseguró que "los daños eran resultado de la colisión con una piedra en otro momento" y se desvinculó del siniestro en el que resultó herido el niño.

Pero "comparados los daños, en primera instancia, con fragmentos encontrados en lugar del siniestro", la Policía Científica determinó que había coincidencia.
Finalmente el hombre reconoció su participación en el siniestro, aunque, según el parte policial, aseguró que "nunca se percató que se trataba de un niño".
El examen de alcohol en sangre arrojó resultado negativo y la Fiscalía del caso dispuso que, mientras se aguarda por la evolución de la salud del niño (que puede hacer cambiar la carátula del delito cometido), el hombre concurra con un abogado para declarar, cosa que hasta el momento no hizo.