Polemica por despido de municipal no vidente

RIVERA | FREDDY FERNaNDEZ

Una suerte de despido de un funcionario público impactó fuertemente en la sociedad riverense, dado que el sujeto de la medida es un personaje popular en la zona. El 25 de enero de 2005 pasará a la historia como uno de los días más tristes en la vida del no vidente Hugo Rosendo Florio. Ayer, este trabajador de 65 años, fue notificado de su cese en la Intendencia Municipal, a raíz de la anuencia "ficta" concedida por la Junta Departamental.

Florio, hasta la década del 90 era el encargado de fabricar los escobillones que se utilizan para barrer las calles. Ese año, la administración consideró que era más conveniente comprarlos.

El funcionario en 1961 ingresó a la Intendencia Soriano; dos años más tarde, a raíz de un trueque, se incorporó a la comuna riverense. Desde entonces, fabricó escobillones, y pese a que era militante de izquierda, no fue cesado durante el gobierno de facto.

El propio Florio señala que "tuve muy buena relación con los intendentes interventores Adolfo Gutiérrez, el Coronel Raúl Mermot y Ariel Pereira".

La acumulación de licencias médicas, ciento cincuenta, al cabo de tres años, dieron lugar en su momento a la iniciación del sumario respectivo. El trámite siguió su curso normal, con las garantías del debido proceso, al punto tal, que el funcionario, presentó descargos, con asesoramiento de un Letrado.

Más allá de las eventuales consecuencias del trámite, el funcionario estaba convencido de que en la Junta Departamental no se alcanzarían los votos para cesarlo.

De acuerdo a la normativa vigente una vez que el Ejecutivo envía el documento, los ediles tienen 40 días para expedirse.

El Estatuto del Funcionario, establece que en caso de que no haya pronunciamiento, se considerará como anuencia ficta y por lo tanto el ejecutivo comunal, tiene vía libre para proseguir el trámite, hasta las últimas consecuencias.

Sin embargo, las expectativas originales del trabajador se vieron alteradas, porque el Dr. Velleda, Asesor Letrado del legislativo departamental se llevó el expediente para estudiarlo, y lo entregó una vez que habían transcurrido los 40 días.

Esa acción impidió que la Comisión de Legislación estudiara el tema, y se expidiera, en virtud de que los plazos estaban vencidos, y su competencia había cesado.

Eso fue lo que ocurrió, ya que la Junta no se expidió.

Una vez conocida la drástica determinación, todos se rasgaron las vestiduras, y anoche en la reunión de Adeomr el tema ocupó el primer lugar en el orden del día. También, se adelanta que el 15 de febrero, varios ediles pedirán sanciones para el abogado que "se constituyó en Junta Departamental" impidiendo que los ediles se expresaran.

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