El presidente de la Suprema Corte de Justicia dijo que la seguridad del partido debe estar a cargo de la AUF, pero "si se vulnera el orden público", debe actuar la Policía.

El presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Ricardo Pérez Manrique, dijo ayer miércoles en declaraciones al programa Código País de Teledoce que "es un despropósito" que se implemente el servicio de 1.000 policías en el clásico del próximo domingo.

"Me preocupa que gran parte de los informativos y la opinión pública esté concentrada en discutir si la Olímpica se va a habilitar o no en el clásico, cuando el país tiene problemas de seguridad muy importantes y vamos a destinar 1.000 policías a tratar de que en este partido no haya problemas de violencia", opinó el magistrado.

Pérez Manrique criticó que se discuta la habilitación de la tribuna como "un problema de Estado", y señaló que "se ha llegado a decir que esto depende del presidente de la República". El debate al respecto "es un problema que hace a toda la sociedad, donde también está en discusión qué es lo que se prioriza", indicó.

"A mí me encanta el fútbol, los únicos partidos que voy a ver son los de la selección, (porque) no se puede ir al fútbol de clubes así", confesó, respecto a los recientes hechos de violencia sucedidos en canchas locales y en torno a las hinchadas de los equipos grandes.

El jerarca dijo que "se debe priorizar la situación de la población" y que "por 40.000 personas que hay en un clásico tenemos tres millones de personas que están necesitadas de seguridad y que no están vinculadas con el clásico". "Creo que esas son las cosas que hay que llamar a la reflexión, a mí me preocupa", manifestó.

"Lo que no hay que olvidar es que el fútbol está organizado por una organización privada, que es la AUF", continuó, y dijo que "es un negocio como tal y tiene reglas particulares en cuanto a su funcionamiento".

"De alguna forma, el Estado está llevado a hacer este tipo de esfuerzos que no solo cuestan dinero sino que cuestan traer fuerzas policiales a otro tipo de cosas que son también importantes", expresó el magistrado.

Consultado sobre quién debe hacerse cargo de la seguridad en el fútbol, Pérez Manrique se manifestó a favor de que la seguridad en el estadio esté a cargo de una empresa privada, pero con matices. "Hay un tema que es la responsabilidad organizadora del espectáculo y otro tema que es el orden público. Cuando el orden público se vulnera, la única fuerza que tiene que actuar es la Policía, que tiene como función la prevención del delito y hacer respetar el orden público", sentenció.

Los dirigentes del fútbol uruguayo esperan un gesto del presidente Tabaré Vázquez y que ordene al Ministerio del Interior que los policías ingresen a la Tribuna Olímpica del Estadio Centenario durante el encuentro entre Peñarol y Nacional. De esta forma, se podría armar "un pulmón", apoyado por una treintena de policías, que separaría a ambas hinchadas durante el partido clásico. En caso de que el presidente Vázquez no adopte ninguna decisión, el clásico se jugará de una manera inédita: sin parciales en la Tribuna Olímpica.

El pasado miércoles, el Ministerio del Interior emitió un comunicado manifestando que los clubes eligieron "la peor solución" para resolver el problema del público en la tribuna.

La secretaría de Estado señaló quese propuso una alternativa, que consistía en "hacer una separación con una infraestructura física, (que permitiera el acceso a la Policía), de forma que las hinchadas no tuvieran contacto visual entre ellas; y que la puerta de acceso a dicha separación estuviera clausurada, asignando en ese puesto un grupo de la Guardia Republicana para una respuesta inmediata en caso de incidentes. Esta opción no fue aceptada por la Comisión de Seguridad de la AUF, por lo cual los organizadores optaron por no habilitar la citada tribuna".

VIOLENCIA EN EL FÚTBOL