Teherán - El nuevo presidente electo de Irán, Mahmud Ahmadinayad, prometió convertir a Irán en símbolo y ejemplo para los países musulmanes de cómo se debe ejercer la democracia.
En su primera reacción tras conocerse los resultados de la segunda vuelta de las elecciones celebrada el viernes, el candidato ultraconservador pidió a sus seguidores que no tomen las calles para celebrar su victoria.
"Quiero que Irán se convierta en el ejemplo de la democracia en los países árabes", aseguró.
Ahmadinayad, antiguo alcalde de Teherán, derrotó con contundencia a su rival, ex presidente del país Akbar Hachemi Rafsanyani, que se había presentado como la opción conservadora moderada.
Pese a que las encuestas vaticinaban un desenlace ajustado, este hijo de herrero de 49 años recibió el respaldo de 17,2 millones de iraníes, un 61,9 por ciento del total de votos.
A su rival solo le votaron 10,4 millones de ciudadanos, un 35,6 por ciento.
El índice de participación fue elevado, un 61,4 por ciento.
Con estos resultados, Ahmadinayad se convertirá en el sexto presidente de Irán desde el triunfo en 1979 de la Revolución Islámica.
EFE