Un proyecto de ley que ya fue enviado al Parlamento, propone la obligatoriedad de una autopsia a toda persona menor de un año de vida fallecida con el diagnóstico primario de "muerte súbita e inesperada del lactante". Además, establece la creación del programa Muerte Inesperada del Lactante (MIL), que tendrá a su cargo dicha tarea y estará integrado conjuntamente por técnicos del Ministerio de Salud Pública y del Poder Judicial (Instituto Técnico Forense).
La iniciativa fue presentada por el diputado nacionalista Javier García (Alianza Nacional).
El legislador destacó que la mortalidad pos-neonatal sigue siendo un problema en el Uruguay. "La muerte inesperada del lactante es frecuente entre las defunciones de niños menores de un año. Se sabe que en Uruguay la causa puede ser identificada en el 60% de los casos", se expresa en la exposición de motivos del proyecto.
Según García (médico de profesión) son múltiples las causas que pueden condicionar predisposición para morir precozmente "pero es contundente que la verdadera causa de muerte sólo se conocerá mediante un estudio profundo, pormenorizado y protocolizado de la autopsia".
El proyecto es impulsado por la Sociedad Uruguaya de Pediatría y el Departamento de Medicina Forense del ITF.