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UPM: jueza no falló sobre detención de la obra

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Protesta contra el tren de UPM. Foto: Darwin Borrelli

JUSTICIA

El Movimiento por un Uruguay Sustentable reclama el cese de la obra de la planta mientras UPM no presente toda la documentación requerida y que ésta sea aceptada por la Dinama.

La jueza civil de 15° Turno, María Magela Otero, no se expidió ayer sobre la acción de amparo presentada por el Movimiento por un Uruguay Sustentable (Movus) ante el supuesto “incumplimiento” por parte de UPM de las condiciones requeridas por la autorización ambiental previa de la construcción de la planta de celulosa en Paso de los Toros.

El Movimiento reclama el cese de la obra de la planta mientras UPM no presente toda la documentación requerida y que ésta sea aceptada por la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama).

Víctor Bacchetta, integrante del Movimiento por un Uruguay Sustentable, afirmó a El País que cada una de las partes hizo ayer sus alegatos en la audiencia y afirmó que las instancias judiciales proseguirán el próximo martes.

Según Bacchetta, la planta de celulosa en Durazno “no cumplió” con los requisitos establecidos en la autorización ambiental resueltos por el gobierno anterior. Agregó que la administración de Tabaré Vázquez postergó en varias ocasiones esos requisitos ambientales con el propósito de que la compañía finlandesa ratificara su inversión en Uruguay. “Esas condiciones eran previas a la construcción de la planta”, insistió Bacchetta.

Algunos de esos requisitos, explicó el ambientalista, eran claves. Uno de ellos, sostuvo, es la realización por parte de UPM del Plan de Monitoreo Ambiental que debía incluir un estudio previo a la obra del aire, suelo y de las personas que viven en la zona, entre otros puntos.

El efluente.

Bacchetta dijo que otro estudio determinante es la Línea de Base de la planta. Éste refiere al daño concreto que podría hacer el efluente de UPM 2 en el Río Negro. Ese efluente deberá diluir las descargas de la planta en un tramo de 1.000 metros aguas abajo y éstas no pueden tocar las márgenes del río donde se reproducen peces y otro seres.

Según Bacchetta, ayer quedó confirmado que UPM “no tiene” un estudio que logre demostrar que ese efluente difusor no toque las márgenes del Río Negro.

“Si no se pueden diluir los materiales contaminantes, el lugar de edificación de la planta está mal elegido”, dijo.

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