Dicen que no toman alcohol pero son fanáticos de las latas de cerveza. Las acumulan, le buscan historias y si las tienen repetidas, las intercambian con otros coleccionistas. Los que pueden, pagan miles de dólares por un objeto que en principio se pensó para ser descartado.

Tanto fanatismo terminó en la formación de grupos nacionales e internacionales de coleccionistas.

En Uruguay se presentan bajo el nombre de Uruguay Cervecero (Urucer), una asociación con Personería Jurídica que reúne a 55 coleccionistas de variados artículos relacionados con la comercialización y la promoción de la cerveza.

Desde hoy tendrá lugar en en el Mercado de la Abundancia la primera Convención Internacional de Coleccionismo Cervecero y Afines en Uruguay. Participarán representantes de las organizaciones internacionales Colcer y Bcwc, asociaciones americanas y mundiales de coleccionismo.

En la ocasión los coleccionistas uruguayos expondrán parte de sus repertorios.

Alberto Pita, vocero de la organización, anunció que quienes visiten la muestra podrán observar más de 5.000 artículos de distinto tipo. Entre ellos hay productos y objetos promocionales de distintas épocas.

Entre los "tesoros" que se exhibirán al público se encuentra la primera colección completa de jarras promocionales que la firma Norteña saca a la venta en durante la Fiesta de la Cerveza de Paysandú.

Para concretar esta muestra se debieron unir las colecciones de dos integrantes del grupo dado que nadie tiene la colección completa, según Pita.

La presencia de las primeras "jarras de Paysandú" puede provocar el interés de los coleccionistas, entre ellas se podrá encontrar una de la primera Semana de la Cerveza, de las que quedan muy pocas.

En el grupo de coleccionistas hay quienes se han especializado en tener artículos promocionales de marcas internacionales de bebidas sin alcohol. Otros tienen una enorme cantidad de las de cerveza.

Pita es uno de ellos y tiene en su poder unas 800 latas de cerveza. Las colecciona desde que tenía 9 años. Durante años las guardó en cajas, ahora las tiene instaladas en la barbacoa de su casa en una vitrina especialmente construida.

"Yo comencé con dos latas sudafricanas, era una serie con animales. De eso hace 40 años y nunca paré", contó.

Lo importante para los coleccionistas es que cada pieza sea una rareza. En ese sentido, pesan la antigüedad y la dificultad para obtenerla. Pita explicó que una lata de cerveza de Medio Oriente puede llegar a costar en Uruguay unos US$ 20.

Pero la oportunidad de hacer dinero con piezas únicas tiene que ver con la fecha de envasado. En octubre hubo una convención similar en Brasil. Allí se subastó una lata de cerveza antigua en US$ 1.500.

Otra de las piezas de interés que estarán en la muestra es un porrón de cerámica de principios del siglo XX. Lo presentará un coleccionista argentino quien pretende venderlo en la subasta, según adelantó Pita. Todo indica que será "muy difícil" que ese producto quede en el mercado local por lo elevado del precio, explicó.

En Uruguay no siempre se vendió la cerveza en latas o botellas marrones. De hecho, hay un coleccionista, que no integra el grupo, que ha alcanzado altos niveles de reconocimiento; cuenta con porrones que tienen más de un siglo. Hay una muestra abierta a la que se accede por la página web www.porronesdecerveza. com.uy. Allí se presentan imágenes de cientos de porrones cerveceros de marcas que ya no existen en el mercado.

Daniel Rodríguez (arriba) es el mayor coleccionista de latas y objetos de la marca cervecera Budweiser que tiene el club de coleccionistas uruguayos. Las jarras tienen su historia. Poder completar una serie es una pasión para los fanáticos. En el exterior se pagan cifras importantes por latas y jarras antiguas o únicas. Para los uruguayos la colección de jarras de la Semana de la Cerveza son prioridad.

Fanáticos de varios países exhiben en una expo en el Mercado de la Abundancia