ROSARIO TOURIÑO
Una fuerte oposición a la apertura de la primera Facultad de Medicina privada que comenzará a funcionar el año próximo manifestaron autoridades del Hospital de Clínicas y altos dirigentes del Sindicato Médico del Uruguay (SMU). "Elitista", "mercantilista" o un resultado de la "ofensiva privatizadora" del Banco Mundial (BM) fueron parte de los cuestionamientos que se vertieron sobre el emprendimiento universitario el viernes pasado, en un debate organizado por el SMU y el Instituto Macedo.
La nueva facultad de Medicina, que tendrá su primera generación de estudiantes en marzo de 2006, es una iniciativa del Centro Latinoamericano de Economía Humana (CLAEH) y funcionará en Punta del Este.
DISIDENTES. La directora del Hospital de Clínicas, Graciela Ubach, dijo que desde fines de los 80 hubo en los países una "ofensiva fenomenal" del BM para reducir el presupuesto de la enseñanza pública y facilitar la privatización de la educación superior.
A su juicio, los organismos multilaterales de crédito, en base a un "chantaje fiscal", promovieron reformas con una concepción de la enseñanza superior como "un bien individual" destinado a obtener "el ascenso social". Ubach apuntó que el educando pasó a ser concebido como un "consumidor" de educación, que va a mejorar su "cotización" en el mercado como fuerza laboral. La directora opinó que el "impulso a la privatización de la educación superior para controlar la industria que modela las conciencias es muy viejo" y situó los inicios de la "ofensiva" en el ataque de economistas como Milton Friedmann al Estado Benefactor.
A su criterio la política globalizadora de la Organización Mundial del Comercio intenta que la educación sea considerada "una mercancía" y no un "derecho", porque la enseñanza superior privada mueve "un mercado de U$S 40 mil millones".
Ubach también hizo mención al informe que el Consejo Consultivo de la Educación Terciaria Privada (Ccetp) le solicitara como evaluación de la nueva carrera. Así, si bien reconoció que se mejoraron componentes, marcó que los "tutores" están en etapas "iniciales" de formación y que la falta de posgrados no posibilita la "educación permanente".
El miembro de la Comisión de Asuntos Universitarios del SMU, Juan Di Génova, dijo "respetar" la nueva facultad, porque acepta la "liberalidad". Sin embargo, admitió que le llamaba la atención que quienes están a favor de limitar el ingreso en la Facultad de Medicina de la Universidad de la República (Udelar), impulsen otra facultad y que se están "reclutando clientes" a la entrada del Hospital de Clínicas.
El médico dijo que la enseñanza universitaria privada se mueve con las "reglas del mercado", es "elitista" y "discriminatoria" y no será "jamás un factor de desarrollo social", ni un factor de "cambio" estructural.
Por su parte, el presidente del SMU, Jorge Lorenzo, admitió que la propuesta le generaba "profundas sospechas" y que creía que los médicos formados por la facultad del Claeh parecían destinados a trabajar en consultorios privados o en las grandes compañías aseguradoras, consagrando una "inequidad total".
ALUDIDOS. Pero en el debate también estuvo presente el decano de la nueva facultad, Humberto Correa, que remarcó su trayectoria docente de más de 40 años en la Facultad de Medicina de la Udelar. "He recibido muchísimo de la Facultad y lo agradeceré siempre", dijo.
Correa destacó que el proyecto del Claeh fue evaluado exhaustivamente por expertos nacionales y internacionales desde 2002 y que logró un dictamen por unanimidad del Ccetp. El decano remarcó que la facultad será sometida a un intenso seguimiento por una Comisión Técnico Asesora del Ministerio de Educación, lo cual dará "mayores garantías" frente a la sociedad. Remarcó que el Claeh ha demostrado en sus 50 años de vida que es una institución "sin fines de lucro" y que todos los ingresos se reinvertirán en el propio centro.
Asismismo, destacó que el objetivo de esta Facultad es formar "médicos generalistas", con mucho énfasis en el trabajo en la comunidad y la prevención. La facultad se propone generar profesionales con "muy buena" preparación clínica, "sentido de la solidaridad humana", "comprensión" de los pacientes y personalidad crítica. Correa también remarcó que el proyecto busca tener repercusión en la sociedad y en la red asistencial de Maldonado y que en principio se dirige al 5% o al 6% de quienes anualmente resuelven estudiar Medicina.
"Competir puede ser incentivo"
Perfilándose en una visión que no fue mayoritaria en el debate, el politólogo Daniel Buquet dijo que no veía una "ofensiva privatizadora" y tampoco un gran crecimiento de la educación privada terciaria. Buquet —que reparó en la mirada ideologizada que suele subyacer en estos temas— apuntó que el Claeh parece dirigirse especialmente a la población de Maldonado y aspiraba a un 5% de la matrícula. A su criterio el nuevo centro podría contribuir incluso a aliviar la matrícula de la facultad pública, que además podría sentirse "estimulada" por la competencia.
Por su parte, el abogado Hoenir Sarthou —el otro invitado no médico del debate— manifestó su temor de que en la enseñanza terciaria ocurra un proceso similar a lo que sucedió con la educación secundaria privada. A su criterio, existe el peligro de que la Udelar en "poco tiempo" no pueda competir con la educación privada, y termine transformándose en el "educadero de los pobres".