Desde el primero de enero a la fecha la playa de Fraile Muerto recibió cerca de 7.000 personas. El sábado pasado había 250 carpas en su parque.

Fraile Muerto es la tercera ciudad de Cerro Largo, detrás de Melo y Río Branco por su número de habitantes. Se accede por Ruta 7 y está a orillas del arroyo del mismo nombre.

Los melenses la prefieren porque es la playa más cerca que tienen de la capital, está a 37 kilómetros. Arrinconada contra el viejo puente del ferrocarril encuentra a la playa de Fraile Muerto rodeada de monte indígena, donde sus cristalinas y frescas aguas proporcionan "un baño inigualable, sus doradas arenas y el entorno de su abundante vegetación proporcionan un descanso muy apacible", según destacó la alcaldesa Graciela Echenique.

"La Playita", como le dicen los vecinos, cuenta además con cuatro cabañas que están para alquilar a $ 1.000 por día, instalaciones para picnic, parador, parque infantil.

Además, el parque cuenta con 30 parrilleros individuales con techos de paja, puentes aéreos de madera que dejan pintoresca toda el área, césped natural, monte nativo y agua dulce que corre permanentemente por encima de las rocas, sin ofrecer riesgo a los más pequeños, y baños. "También brindamos energía eléctrica y un parador que siempre está abierto", dijo Echenique.

Resaltó el sistema de vigilancia de los funcionarios del municipio. "Aquí nadie anda alcoholizado ni a altas velocidades dentro el parque, controlamos todo para que haya un orden de manera que la familia toda pueda venir tranquilamente a descansar y disfrutar, para eso estamos trabajando con empeño y dedicación", afirmó.

El arroyo que le da el nombre a Fraile Muerto "tiene las aguas más puras del país, por eso no queremos saneamiento", afirmó la alcaldesa Echenique. "No podemos ampliar la red de saneamiento debido a la falta de piletas de decantación de los efluentes; eso terminaría con nuestra playa", indicó.

Hasta ahora solo los complejos de Mevir y del Banco Hipotecario —que significan aproximadamente el 4% de la población de Fraile Muerto— están conectados a la red de saneamiento. No obstante, la alcaldesa denunció que la pequeña usina de tratamiento de aguas residuales que existe en el pueblo, beneficiando a esas viviendas, no funciona como tal y vierte los desechos sin tratamiento alguno al arroyo, zona de playa y camping. "Queremos saneamiento sí, pero que no desagüe en el arroyo", insistió.

Este año en la "playita" de Fraile Muerto se instaló un sistema de arrendamiento de canoas que es la novedad del balneario. Las embarcaciones se alquilan por $ 50 la hora. "La idea es que la gente aprenda a remar y la capacidad de las canoas es de 4 personas; está muy bueno", afirmó la alcaldesa Echenique.

Un arroyo se transforma en la “playita” del departamento