Empresaria de la cosmética

| Fue una de las primeras en Sudamérica en aplicar terapias láser, una técnica que hoy es muy valorada en salud y cosmética

MARTHA AGUIAR

En 1989, Helena Wernik instaló su consultorio en una antigua casona de la calle Miguel Barreiro. Había adquirido en Suiza un equipo laser con virtudes analgésicas, el primer aparato que llegó a nuestro país. Era tan pequeño que podía ser llevado de un lugar a otro, por lo que Helena ofrecía tratamientos a domicilio a personas que no podían trasladarse hasta el consultorio. Los pacientes de la época eran personas mayores, accidentados o deportistas que presentaban alguna lesión. En aquel momento los beneficios del láser sobre el dolor y las inflamaciones, fueron ampliamente difundidos.

Por su parte, Helena se había decidido a trabajar con láser después de muchos años de estudios. Esta nueva tecnología, estaba empezando a convertirse en una poderosa arma para resolver temas que habían sido tabú, como por ejemplo, la miopía. Las aplicaciones láser para los ojos, tenían notables resultados, pero al mismo tiempo, ya empezaba a investigarse la utilización de la luz láser en estética con efectos maravillosos. Al día de hoy ya es una verdad indiscutida. El láser disminuye las arrugas, mejora el aspecto del cutis y embellece la piel, lo que hasta aquel momento sólo se obtenía con cirugía plástica.

A VIAJAR. "Pero volviendo al principio, la Dra. Wernik tuvo que hacer varias veces las valijas para informarse sobre la nueva tecnología, debido al vacío de conocimientos que había en esta región. "Pensaba que debía existir un médico en Uruguay que fuera especialista en láser, para enfocar esa tecnología al servicio de la salud o de la estética". - dijo la profesional. Universidades de Estados Unidos y Alemania la tuvieron como estudiante en búsqueda de información para trabajar con láser. En pocos años, Wernik era una verdadera pionera en luz láser, hasta el punto de convertirse en docente para muchos médicos, la mayoría argentinos, que empezaron a utilizarlo en la vecina orilla.

Al compás de las especializaciones que realiza en el extranjero, Wernik integra una prestigiosa sociedad internacional, que la mantiene informada sobre los últimos avances de la tecnología. Cuando nace el primer laser para tratar la piel, Helena no duda en importarlo para Uruguay. En ese momento, comienza a tratar manchas, surcos, arrugas, logrando un rejuvenecimiento profundo. Es allí cuando la Clínica Láser Light, consigue pegar un salto cualitativo, destacando por los resultados que en materia de piel ofrece a sus pacientes.

¿Cuantas personas han pasado por la Clínica? "Entre todos los tratamientos, es imposible decirlo.... han sido miles". - dijo Wernik.

DEPILACION. Con el paso del tiempo, Wernik empezó a ser conocida como una especialista en materia de láser. El prestigio de la clínica coincidió con lo que sería un paso importante en el crecimiento de las terapias laser. En Estados Unidos nacieron los primeros equipos de depilación definitiva. Las mujeres le decían adiós a la tortura de depilarse cada quince días, con métodos dolorosos y, en ocasiones, antihigiénicos. La depilación laser se consagra como la que otorga mayor durabilidad en la eliminación del vello.

"La depilación laser hace desaparecer para siempre entre el 80 y 85 por ciento del vello. Entre la primera y segunda sesión transcurren 45 a 60 días", -dijo Helena.

Como empresaria, Helena supo superar la crisis a través de una adecuación de sus precios. Aunque ella no podía contar con hacer grandes rebajas de los tratamientos pues los insumos son extremadamente caros en moneda extranjera.

" Para mantenerme trabajando fue decisivo contar con una clientela fiel que ya conocía mis tratamientos y la seriedad con que la Clínica Laser Ligth, encara sus proyectos. Afortunadamente, yo tenía una gran cantidad de pacientes, por lo tanto no sentí el efecto de la crisis, como ocurrió con otros colegas."

En los últimos meses de la crisis, Helena resolvió mudarse para dar mayor comodidad a sus pacientes y resolver un espacio amplio, de modo de instalar los nuevos equipos laser llegados al consultorio. Con ese objetivo, se trasladó el edificio World Trade Center, en el que tuvo que hacer una reforma para obtener un gran apartamento de varios pequeños. El reciclaje terminó en abril y Helena se mudó de inmediato.

"La mudanza hacia este edificio fue una jugada con cierto riesgo. Pero felizmente resultó bien. Me basé en la creencia de que no puede haber una crisis que dure 50 años. Porque hoy en día todo cambia con mucha rapidez", - comenta la médica, desde un cómodo despacho con hermosa vista sobre la avenida L.A. de Herrera.

El díficil período económico eliminó una competencia que había empezado a surgir con mucha fuerza en el rubro de Wernik. Muchos colegas tuvieron que cerrar sus clínicas porque no pudieron hacer frente a los elevados insumos en dólares. Hoy en día los que empiezan a surgir apuntan a tecnologías mucho más económicas que las que utiliza Wernik en Laser Light.

De aquí hacia el futuro la Dra. Wernik encara seguir avanzando en tecnología laser, estudiando y capacitándose en nuevas aplicaciones. " Tengo pensado traer muy pronto un equipo destinado a eliminar la flaccidez en brazos, papada etc. No tengo dudas que será un aparato con excelentes resultados, que será bien recibido por el público uruguayo."

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