El Instituto Nacional de Alimentación (INDA) pretende facilitar los trámites y el tiempo de espera de sus beneficiarios. Para ello realizó modificaciones en el sistema de entrega de números de su servicio de comedor y tique alimentario, así como para las canastas de riesgo nutricional y de enfermos crónicos.
Este nuevo sistema funciona desde el 28 de noviembre y los interesados deben comunicarse con el Ministerio de Trabajo a través de la línea 08007171, opción 5, de lunes a viernes entre las 9 y las 15 horas. El titular del núcleo familiar deberá registrarse con su número de cédula. El mismo deberá ser mayor de edad (salvo en el caso de la canasta de riesgo nutricional).
Los beneficiarios podrán solicitar día y hora para presentar la documentación necesaria para acceder a los distintos servicios que el INDA brinda, y así evitar desplazamientos y tiempos de espera, informa Presidencia.
"Si bien la pobreza ha disminuido en el país, la calidad de los servicios que presta el INDA mejoró y el acceso a las poblaciones vulnerables, también. Entonces, en términos globales, hay una baja de los beneficiarios, pero ahora el Instituto sale a buscarlos para conocer sus condiciones, de manera que suben algunos números y mejora el mecanismo de acceso que en estas poblaciones es determinante, en Montevideo y más aún en el interior", reflexionó el director del INDA, Luis Álvarez.
BENEFICIARIOS. Los números de comedor y de tique alimentario se destinan a embarazadas, madres lactantes, niños menores de 18 meses, preescolares, escolares, adolescentes, estudiantes, desocupados, discapacitados y adultos mayores. Los preescolares y escolares pueden acceder al beneficio cuando no reciban asistencia alimenticia en el centro educativo. Este sistema puede ser gratuito (para personas en situación de pobreza extrema) o pago (jubilados, pensionistas y estudiantes abonan $ 37 pesos y público en general $ 42).
Las canastas de riesgo nutricional a menores de 18 años y mujeres embarazadas o en lactancia a quienes diagnostique riesgo nutricional el servicio de salud.
Los beneficiarios de las canastas de enfermos crónicos son para los enfermos renales y renales-diabéticos en etapa de hemodiálisis, celíacos, portadores de tuberculosis, portadores de HIV+, pacientes oncológicos en tratamiento (hormonal, quimio o radioterapia), diabéticos imposibilitados laboralmente por esta patología, pacientes en espera de transplante pulmonar y hepático, niños contaminados con plomo y otras patologías con compromiso nutricional e imposibilidad laboral. Todos estos casos serán estudiados por el técnico encargado del programa, informa Presidencia.