Consideran que el salario real podría registrar una caída.

Pasadas las cuentas en la calculadora tras los anuncios de ajuste del gobierno, los trabajadores hacen nuevas matemáticas. La sensación es que ante una suba de precios que no cesa y que llegó a 11% en mayo, el dinero que tienen en la billetera cada vez les rinde menos. Sin embargo, los números indican que el poder de compra de los salarios (salario real) no ha caído. En eso coinciden gobierno y economistas. Pero a futuro hay gran parte de acuerdo en que de no cambiarse los lineamientos salariales —algo que ya comunicó el ministro de Economía al PIT-CNT—, se producirá una pérdida. El meollo está en que si se modifican, la rigidez salarial puede poner en riesgo los puestos de trabajo.

En todo 2015 se perdieron 28.000 puestos de trabajo y entre abril 2015 y 2016, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística se perdieron 35.000 empleos.

Los trabajadores consideran que en el primer ajuste salarial recibirán correctivos anteriores que harán "maquillar" la pérdida de poder de compra, pero en enero, cuando ya no haya correctivos, "ahí se va a ver que nos empezamos a comer el crecimiento que habíamos conseguido", dijo a El País el director del Instituto Cuesta Duarte Milton Castellano. Con los niveles de inflación actuales, dentro de la central sindical creen que si no se toman medidas para mitigar la suba de precios se llegará a una pérdida de salario real de 1% o 2%. Esto es, van a poder comprar con su salario 1% o 2% menos de lo que lo hacían hasta ahora.

"El salario real hasta ahora no cayó. Bien medido, esto es en promedios anuales, ya que tenés un aumento y hasta el próximo año no hay otro, en lo que va del año el salario real no cayó, leves aumentos en enero y febrero, pero en marzo y abril quedó en cero", dijo a El País el economista Horacio Bafico. Empero consideró que a futuro podría caer dada la suba de precios.

"La desaceleración del salario real es consistente con el enfriamiento de la actividad y el deterioro del mercado laboral", agregó por su parte el economista de CPA Ferrere, Santiago Rego, quien a futuro considera que podría darse una pérdida. "Con pautas nominales y una inflación por encima del 10% durante este año y el que viene, algunos sectores perderán poder adquisitivo hasta que operen los correctivos (por la diferencia entre la inflación y el aumento salarial) previstos para los 18 o 24 meses. De todas formas, nuestra proyección de salario real para este año apunta a que los salarios privados tendrán un deterioro del poder adquisitivo aunque más moderado que el año pasado, convergiendo a los niveles de crecimiento de la economía", agregó.

Para Rego si las pautas se modifican al alza "podríamos ver una mayor afectación del mercado laboral en términos de empleo y de esta forma un efecto adicional sobre el consumo y el nivel de actividad". En este sentido recordó que el año pasado el mercado laboral precisamente redujo los puestos de trabajos al crecer los salarios por encima de la economía.

El economista socio de Deloitte, Pablo Rosselli, considera que las pautas que plantea el Poder Ejecutivo tienen como objetivo conducir a una moderación del salario nominal y en un contexto de inflación persistente en 10% puede generar una caída del salario real en el promedio. En Deloitte proyectan que el salario privado promedio real este año va a subir entre 1% y 1,5%, pero en 2017 sería nulo.

"Lógicamente la aplicación del correctivo por inflación mitiga esa posible caída transitoria entre un ajuste y otro que puede terminar ocurriendo. El punto es que si la economía está estancada y al país le falta competitividad y el empleo esta bajando, lo que deberíamos pensar es que los fundamentos macroeconómicos no son consistentes con mantener salario real y si la economía no permite ningún descenso lo más probable es que se afecte el empleo. Hoy la discusión entre modificar la pauta o no es una discusión sobre qué objetivo se quiere preservar".

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Las pautas que dio el Poder Ejecutivo a trabajadores y empresas para la negociación salarial establecen para el primer año de convenio en los sectores con problemas un incremento anual de salarios de 8%, de 6,5% para el segundo y 6% para el tercero. Para los rubros que se encuentran en una situación intermedia los porcentajes son 8,5%, 7,5% y 7%. En tanto, para aquellas actividades más dinámicas los porcentajes oscilan entre 10%, 9% y 8%.

El salario real registró un incremento de 1,6% el año pasado, muy inferior a como venía evolucionando los años anteriores, según reflejan los datos del Instituto Nacional de Estadística. En 2014 el salario real había mostrado un crecimiento de 3,4%, pero en 2009 había alcanzado aumentos de 7,3%. Esto es, el poder de compra del salario aumentó en esa proporción. Al analizar la serie, la última caída del salario real se verificó en 2004 cuando disminuyó 0,1%.

SALARIO REAL