Diplomas falsos a cambio de dólares

lucia baldomir

La obtención de un título "trucho" hoy está al alcance de la mano a través de Internet. Numerosos sitios en la web ofrecen la posibilidad de obtener diplomas falsos muy similares a los verdaderos por un costo entre 65 y 1300 dólares. Todo el proceso no supera los 30 días.

Con cierto ingenio en la búsqueda por la red de redes y algunos dólares, la persona puede llegar a ser en un mes abogado, ingeniero civil o arqueólogo, entre otras carreras.

La oferta on—line es tan vasta como peligrosa. Y para algunos tentadora. El sitio www.instantdegrees.com ofrece títulos universitarios de instituciones en Gran Bretaña, Estados Unidos y Canadá en tan sólo cinco días. Como si fuera poco, el paquete incluye cartas de recomendación de parte de los profesores, reconocimientos particulares, un esquema con todos los exámenes aprobados en el transcurso de los estudios y la dirección en Internet del instituto de donde proviene, para hacer más creíble el diploma.

La forma de obtención es sencilla. Después de registrarse en el sitio y aprobar el programa se puede elegir el tipo de reconocimiento deseado: certificado, diploma, master, doctorado u optar por una combinación de todos ellos.

Otro de los sitios, cuyos administradores se jactan de tener millones de clientes y estar avalados por las más prestigiosas universidades del mundo, es el de Professional Degrees (www.professionaldegrees.com). Con precios entre 325 y 1300 dólares, el portal ofrece entregar, en casa u oficina, y en un plazo de cuatro semanas, el certificado que garantiza el título de estudio. Según describen en su sitio transforman la experiencia de vida adquirida en un reconocimiento universitario; sin embargo, a la hora de llenar los formularios, cada uno es libre de destacar la experiencia que tiene e incluso de inventar. En ese caso, después de registrarse y aceptar la política de normas que, paradójicamente, obliga a la no difusión o publicación del portal y su servicio, o asociación del mismo con las universidades de las cuales se expiden los títulos, el usuario debe aprobar el programa para luego elegir el reconocimiento con el que el "estudiante" más se identifique. Así podrá recibirse de Ingeniero Civil, Arquitecto, Contador, Administrador de Empresas, Músico, Teólogo y otras disciplinas.

Las únicas carreras de las cuales la página dice no expedir títulos de ninguna especie son las de Medicina, Odontología y Psiquiatría ya que, según se especifica, involucran la medicación. También existen otras ofertas online como www.phonydiploma.com, con similares mecanismos y precios más económicos que oscilan entre los 65 y 255 dólares.

URUGUAY. Ninguna de todas esas propuestas son legales en el país ni se asemejan a la educación a distancia. En Uruguay el ejercicio ilegal de una profesión, es penado por el artículo 167 (Usurpación de título) del Código Penal, que establece que quien "abogare títulos académicos o ejerciere profesiones para cuyo desempeño se requiere una habilitación especial, será castigado con 20 Unidades Reajustables a 900 UR". De esa forma la multa puede alcanzar a los $ 198.864 (UR setiembre = $ 220,96).

Para el Profesor titular de Derecho Telemático e Informática Jurídica de la Universidad de Montevideo y Director del Instituto de Derecho Informático de la Facultad de Derecho de la Universidad de la República, Dr. Carlos Delpiazzo, esa situación presenta tres dimensiones a tener en cuenta. "En primer lugar, en el caso de quien obtenga un título de esa naturaleza, habrá que hacer una distinción entre las profesiones cuyo diploma habilite a ejercer la profesión y el que acredite conocimiento, ya que ésto tendrá distinta trascendencia jurídica. No es lo mismo según sea de médico o analista de sistemas a pesar de que el engaño existe en ambos casos. En segundo lugar deberá atenderse al creador que introduce una maniobra ilícita y al proveedor que le proporciona el espacio para que la lleve adelante y es responsable desde el punto de vista del contenido que tiene Internet. Como tercer aspecto está la determinación de qué ley es aplicable y cuál es la jurisdicción ya que Internet es mundial".

De todas formas la posibilidad de engaño se mantiene, por lo que las empresas, instintivamente, tendrán que dudar de la naturaleza de los diplomas y corroborar los conocimientos que puede llegar a señalar un curriculum vitae.

En www.boxfreeconcepts.com es posible armar su propio certificado en alguna materia divertida. Basta usar la imaginación para que una desconocida universidad le envíe un doctorado.

En Uruguay, el promedio de años para recibirse en una universidad es de cinco. Si a esto se le restan los períodos perdidos por paros (en la pública) o exámenes no aprobados, la cifra aumenta.

Según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística, en el 2001 egresaron 4.181 profesionales de la Universidad (1.472 hombres y 2.710 mujeres) y 1.219 de la Universidad privada. Esas cifras son alarmantes si se tiene en cuenta que ese año ingresaron a la universidad estatal 15.648 jóvenes (5.263 hombres y 10.386 mujeres).

El 1o. de febrero de este año comenzó a exigirse el carnet de abogados y escribanos en los diversos juzgados como forma de evitar el ejercicio de la profesión a personas no habilitadas. Según datos de la Suprema Corte de Justicia, hasta el momento no se han registrado casos de ejercicio ilegal de ambas profesiones. La implementación de la medida se produjo en 2002 y tuvo un año expidiendo los carnets antes de establecerse obligatorio.