E. BARRENECHE / F. FERNÁNDEZ
A 13 meses de la renuncia del padre Mateo al INAU, el Directorio no investigó las denuncias sobre una eventual corrupción en el organismo. "Mateo no dejó nada formal", dijo la presidenta del INAU, Nora Castro.
El 2 de marzo de 2009, 14 días antes de asumir como titular del instituto y tras una entrevista con el entonces presidente Tabaré Vázquez, Castro anunció que investigaría las denuncias de corrupción que lanzó el padre Mateo Méndez cuando renunció como director del entonces Instituto Técnico de Rehabilitación Juvenil (Interj), oficina que gestiona los hogares del INAU. Ahora esta repartición se denomina Semeji.
Castro también afirmó que daría a conocer los resultados de esa investigación.
Cinco días antes, Méndez dijo que el Interj "tiene mucho de enfermo, tiene mucho de perverso y tiene mucho de corrupción".
Ayer Castro dijo que las denuncias de Méndez "no fueron encontradas. Nada había en la nota de renuncia de Méndez ni en otro lugar".
Consultada sobre si el Directorio no pudo investigar porque le faltó material suficiente, la jerarca del INAU respondió que eso fue lo que ocurrió. "Lo único que hay son de declaraciones de prensa de Méndez. Tampoco hay datos en ellas que ameriten decir que en tal o cual lugar (del INAU) hay determinados problemas. Hicimos una búsqueda fehaciente y no encontramos ninguna denuncia", advirtió.
Un año y un mes después de su alejamiento del INAU, Méndez trabaja en tareas pastorales en la parroquia San Isidro de Las Piedras.
El religioso dijo ayer a El País que ha tomado distancia del instituto. "Nadie me ha llamado ni he llamado a nadie" por las denuncias formuladas hace más de un año, relató.
"Tampoco nadie me ha preguntado nada. Tal vez eso sea lo mejor. Sin embargo, cuando se quiere investigar algo, usualmente lo primero que se hace es preguntarle a quien hizo determinadas afirmaciones", indicó el sacerdote salesiano.
Durante los seis meses que duró su gestión, Méndez expuso conceptos que generaron polémica. Dos meses después de asumir, el 10 de octubre del 2008, el sacerdote dijo al diario Últimas Noticias que "es preferible la fuga a los motines. No queremos ni una ni otra, pero si me dan a elegir, prefiero que el adolescente se fugue y que no se amotine".
Esas afirmaciones provocaron un rechazo de juristas y de una parte del sistema político por considerar que el párroco habría violado el principio de autoridad del Estado sobre los adolescentes infractores.
BLOQUEO. En la misma conferencia de prensa donde Méndez renunció a su cargo, el entonces presidente del INAU, Víctor Giorgi, compartió las reflexiones del sacerdote y también cargó las tintas. "Intereses económicos, gremiales y políticos dificultan la posibilidad de llevar adelante una buena gestión en el Interj", señaló en clara alusión al sindicato del organismo.
Actualmente Giorgi trabaja en el Instituto Interamericano del Niño como coordinador del Área de Protección y Promoción de la Niñez.
Giorgi dijo a El País que en el INAU hay funcionarios que "realizan una tarea admirable". Sin embargo, agregó, "al igual de lo que sucede en otras áreas del Estado, hay una serie de normas, mecanismos y de formas institucionales que hacen que haya grupos de funcionarios que no aportan a la tarea que se está realizando".
Consultado acerca de si esos trabajadores bloquean la gestión del organismo, Giorgi respondió que "la enlentecen, la encarecen y en algunas situaciones pueden llegar a bloquearla".
Expresó que "es significativo" que cualquier sesión del Directorio del INAU que "tiene para discutir 100 expedientes, 70 u 80 son conflictos vinculados a adultos. Eso ocurre todas las semanas. Se trata de reclamos, sanciones, problemas disciplinarios, entre otros".
En una entrevista concedida a El País el 28 de agosto del año pasado, Méndez dijo que "lo que a uno más le duele es que los gurises, que eran la razón nuestra, no fueron el centro de las preocupaciones. Nos llevó más tiempo el tema de los adultos", agregó coincidiendo con Giorgi.
Consultado sobre a qué se refería cuando habló de corrupción, Méndez dijo que "a veces cuando pensamos en la corrupción, creemos que son cosas grandiosas. Pero son cosas de todos los días. El no cumplimiento de mi tarea como tiene que ser, una actitud a desgano genera un ambiente, una actitud de vida, llegar a final de mes y cobrar igual, aunque no haga ni la mitad de las cosas que debería hacer".
En tanto que el presidente del sindicato del INAU, Joselo López, afirmó que el sacerdote salesiano debió denunciar en la Justicia si entrevió hechos corruptos en los hogares de internación de jóvenes infractores. "Era un funcionario público y tenía el deber de denunciar", agregó.
López recordó que cuando los funcionarios del INAU amenazaron con entregar las llaves de los hogares por "carecer de garantías" para trabajar, "se nos presionó con procesamientos desde el Poder Judicial y con la esencialidad desde el Poder Ejecutivo. "Sin embargo, el padre Mateo que estaba ejerciendo un cargo público, en 24 horas planteó la renuncia violando los códigos y normas de la administración pública y se fue dejando un vacío de poder en una situación muy grave", indicó el dirigente gremial.
Ayer, el Ministerio de Desarrollo y el sindicato del INAU acordaron prolongar por 120 días el contrato de 80 trabajadores contratados. Es la cuarta prórroga. El gremio ya había decidido ocupar hogares si no se otorgaba esa prórroga. Al finalizar el plazo otorgado, habrá un concurso abierto, dijo Nora Castro.
Fugas, motines, rehenes y copamientos
Un adolescente con problemas psiquiátricos se resistió ayer a ser internado en un hogar del INAU situado en el centro de Montevideo, lo que provocó que varios menores intentaran agredir a los funcionarios con "cortes" artesanales. Los funcionarios avisaron a la Policía y estos redujeron a los adolescentes movilizados.
En febrero del año pasado, una fuga masiva del Hogar Desafío generó la renuncia del padre Mateo. Pocos días más tarde, hubo otros escapes similares en el Hogar Cimarrones y en el Desafío.
En el correr del 2009, el hogar La Casona se transformó "en una válvula de escape" del sistema y las fugas llegaron a ser cerca de 1.000 en un año, según denunció la Mesa Sindical de la Colonia Berro. El problema es la falta de cupos, señalaron los trabajadores.
Las continuas fugas -algunas de ellas con toma de rehenes- llevaron a la entonces ministra de Desarrollo Social, Marina Arismendi a señalar que funcionarios tenían implicancias en esos hechos. El sindicato rechazó estas afirmaciones y amenazó a Arismendi con una denuncia penal por injurias.
El 24 de noviembre del 2009, seis jóvenes fueron liberados del Hogar Desafío de Montevideo tras un copamiento hecho por dos jóvenes armados. Nada se sabe de los copadores ni los resultados de una investigación interna sobre el caso.
A fin de año, el Directorio del INAU propuso a los jueces de Menores revisar los expedientes de 52 internos para otorgarles la libertad anticipada. La medida logró descomprimir la población de la Colonia Berro y de centros capitalinos, según el Directorio. El gremio coincidió con esa visión.
Compra de esposas y candados
El INAU comprará 500 juegos de esposas y hasta 1.300 candados a través de una licitación que será abierta el 23 de abril. El instituto adquirirá "hasta 250 juegos de esposas con bisagra, confeccionadas con materiales de aleación de acero, fuerte y resistente, doble sistema de seguridad y dos llaves". También necesita "hasta 250 juegos de esposas con cadena".
En el mismo llamado a proveedores solicita "hasta 1.000 candados" de 50 milímetros, estándar, "de bronce, con arco cementado y templado y sistema de doble traba de seguridad, sin sistema de discos con movimiento radial". Y por último el Directorio escuchará ofertas por 300 candados de 75 milímetros.