Latinoamérica es el área donde más se ha dado el encarcelamiento de ex dictadores, como el caso del ex dictador Augusto Pinochet en Chile, procesado por genocidio y ahora el Juan María Bordaberry en nuestro país.
La Justicia también a perseugido a los miembros de la antigua Junta Militar argentina, los generales Jorge Videla y Roberto Viola y el almirante Emilio Massera, quienes deben responder judicialmente por crímenes cometidos durante la última dictadura, tras ser derogada las Leyes del Perdón durante el mandato de Néstor Kirchner.
En una situación similar de responder ante la justicia por delitos de lesa humanidad se encontraba el ex dictador paraguayo Alfredo Stroessner, quien gobernó de 1954 a 1989 y que falleció en agosto pasado.
En Bolivia destacan los procesos a los ex presidentes Gonzalo Sánchez de Lozada (2002-2003), a quien la Fiscalía General acusa de numerosos delitos contra los derechos humanos, y Luis García Meza (1980-1981), quien cumple una condena de 30 años en un penal de máxima seguridad desde 1995 por genocidio, sedición y corrupción.
El antiguo presidente peruano Alberto Fujimori (1990-2000) se encuentra a la espera de que Perú decida si pide su extradición a Chile, acusado, entre otros delitos, de dos violaciones a los derechos humanos referentes a las matanzas de Barrios Altos (1991), donde murieron 15 personas, y de la Universidad La Cantuta (1992), cuyas víctimas fueron un profesor y nueve alumnos.
El ex presidente mexicano Luis Echeverría (1970-1976) fue acusado de genocidio, pero la justicia rechazó procesarlo por ese cargo y arrestarlo de manera preventiva, como exigía un fiscal especial que investiga la "guerra sucia" en México entre las décadas de 1960 a 1980.
También se encuentra en libertad el antiguo dictador guatemalteco Efraín Ríos Montt (1982-1983), que, entre otros cargos, está acusado de genocidio por un tribunal español.
En base a EFE