EN LAS REDES
Las pequeñas Eduarda y Antonia dejaron atrás sus diferencias; las hermanas brasileñas que fueron furor hace dos años se reconciliaron y las redes lo celebraron
Con apenas tres y seis años, María Eduarda Fernandes y su hermana María Antonia se convirtieron en las protagonistas de uno de los videos virales más vistos de 2020.
Las niñas oriundas de Pato Branco, Brasil, saltaron a la fama por error cuando la más grande, enojada por la celebración de cumpleaños de la menor, sopló la velita de la torta antes de tiempo y desató una feroz pelea con tirones de pelo, manotazos, lágrimas y una malvada y pícara sonrisa como condimento extra.
Yo también la fajaba. pic.twitter.com/C6IqeM9CUE
— Marla Honda (@HondaMarla) October 19, 2020
Dos años pasaron de aquel incidente y para celebrar un nuevo cumpleaños, las hermanas se unieron en un video que fue testigo de que la unión y el cariño supera cualquier pelea.
Pero esta historia tiene en realidad tres episodios. El primero fue el que saltó a la fama; 2020, enojos, una pelea y un viral. El segundo ocurrió en 2021 cuando las hermanas superaron sus diferencias, se abrazaron y besaron delante de una torta que no trajo los mismos conflictos que un año atrás. La madre de las pequeñas aprovechó la relevancia que su primer video tuvo para mostrarle a sus seguidores y a todo el mundo que las hermanas se habían reconciliado bajo la consigna: “amor fraternal”.
Pero en 2022 se vivió el tercer y último capítulo. Cuando las asperezas pasaron a formar parte del pasado y las dos pequeñas dejaron su disputa atrás, posaron juntas para un nuevo cumpleaños. Se vistieron de princesas, una del personaje “Valiente” y la otra de “Bella”, sonrieron con toda una escenografía acorde y se abrazaron para el video. Así festejaron sus cumpleaños juntas, una sus ocho y la otra sus cinco años.
La historia detrás del video y la decisión de la madre
El video se viralizó sin querer. Gabriela Aureluk le confirmó al periodista brasileño Hugo Gloss que el clip siempre estuvo cargado a su cuenta de Instagram pero privado, solo familiares y amigos podían verlo. Sin embargo, un allegado le pidió que lo pusiera público y la relevancia que cobró fue instantánea. “La fama surgió de la nada, nadie lo estaba esperando. María Antonia empezó a llorar, todos se reían y ella estaba avergonzada”, relató la mujer.
Según sus dichos, el motivo que empujó a la mayor a actuar de esa manera fueron los celos que son “normales a esa edad”. A su vez, explicó que cuando la pelea terminó y el video se cortó, las dos volvieron a estar bien como si nada hubiera pasado. “Así es una relación de hermanas, al segundo se están peleando y al siguiente se vuelven a abrazar”, explicó.
Desde entonces, un perfil de Instagram (As Marías de Pato Branco) convirtió a estas dos pequeñas en verdaderas figuras a nivel internacional. Las niñas son famosas en Brasil y en el mundo, tienen un mail de prensa, marcas y hasta un canal de YouTube. Dejaron de lado la pelea y se muestran felices en todos los videos aunque su madre sabe que esa simpática pelea les abrió las puertas para un prematuro trabajo como influencers.