La Nación (GDA)
Adiah y Adrial Nadarajah pesaban apenas 330 y 420 gramos al momento de nacer. Estos mellizoscanadienses apenas llevaban 22 semanas de gestación cuando se convirtieron en los más prematuros del mundo e ingresaron al Guinness.
Según relataron sus papás, los médicos les daban “0% de chances de sobrevivir”. Shakina Rajendram, madre de los pequeños, confesó que si hubieran nacido unas horas antes, no se habría hecho ningún intento por salvarles la vida. “Cuando me puse de parto, a los bebés se les negaron todas las medidas de soporte vital en el hospital en el que me ingresaron y casi los dejaron morir”, reveló Shakina.
Adiah y Adrial permanecieron bajo el cuidado del hospital durante casi seis meses, enfrentando complicaciones con sangrado cerebral, perforación intestinal, sepsis y dificultades en el manejo de fluidos. Actualmente los mellizos tienen un año, pero tuvieron que sobrellevar complicaciones médicas graves. “Vimos a los bebés casi morir ante nuestros ojos muchas veces”, dijo la mujer al sitio de los Guinness World Records y asegura que los bebés están muy bien de salud.
Adiah se desarrolló “muy bien” y tiene las características típicas de su edad: “Es una bebé extremadamente feliz y sociable, y sonríe todo el día”, reveló la madre. En cambio, Adrial tuvo que volver al hospital dos veces desde que le dieron de alta y pasó por varias infecciones y problemas respiratorios.
“Los bebés estuvieron cerca de la muerte tantas veces, y mientras la gente rezaba, las cosas cambiaban milagrosamente”, explicó Shakina, quien es una cristina devota.