Sabor Express
Nuestro especialista en vinos, Eduardo Lanza, presenta un vino que causó sensación en los 90 y hoy es elaborado en tres versiones por Viña Valdivieso.

El curioso nombre de este vinose identifica con el apodo de Jorge Coderch, principal de Viña Valdivieso, a quien de joven lo conocían por ese seudónimo.
Muy temperamental como siempre fue, este exitoso empresario no tuvo empacho en llamar así al primer tinto Caballo Loco, que su bodega elaboró a principios de los 90. Causó sensación en aquellos años, porque no tenía añada, no era un varietal y tampoco revelaba su composición.
El suceso llevó a una segunda edición y para diferenciarlas, al pionero se le agregó el Nº 1 en la etiqueta y al otro el Nº 2. Así siguieron apareciendo otros numerados, para convertirse en el vino icónico de Viña Valdivieso.
Así comenzó esta leyenda
Cuando lo entrevistan, a Jorge le gusta contar como comenzó esta saga. "Siempre estuve metido en el proceso con los enólogos y al hacerlo, me fui guardando algunas barricas que consideraba diferentes, sin poder decidir qué hacer con sus vinos. Llegó el día en que los técnicos tomaron el toro por las guampas, los ensamblaron y mandaron botellas a varios concursos. Todos quedamos asombrados con las calificaciones recibidas y el Caballo Loco que así se llamó, se transformo? en un vino exitosísimo", cuenta.

Un técnico importado
El equipo enológico está hoy bajo la dirección del neocelandés Brett Jackson que se incorporó a la empresa en 2002, luego de haber trabajado 6 años en Viña San Pedro. Antes ya había estado en otros destinos —California, Sudáfrica y el sur de Francia – que lo ayudaron mucho a adquirir la experiencia necesaria y la confianza indispensable.
Entrevistado por el wine blogger brasileño Beto Duarte, contaba acerca de cómo es trabajar en el país trasandino. “Chile es un país fascinante para un enólogo. Tiene suelos bien diferentes en un espacio muy estrecho y acotado por su geografía. Cambian de forma notable yendo desde el mar hacia la cordillera y en una distancia de apenas 20 km, se encuentran diferencias que a uno lo sorprenden. Me gusta mucho trabajar aquí, un país parecido a mi Nueva Zelanda, en la forma de encarar la viticultura y la enología. Ambos son países jóvenes con mucho espíritu de innovación y sin la rigidez y las convenciones que tienen los de Europa”.
Si bien se asocia a Viña Valdivieso con Curicó a 200 km al sur de Santiago, sus viñedos se encuentran en 10 valles diferentes.
Un suceso continuado
Al principio y durante más de una década fueron apareciendo sucesivas ediciones de Caballo Loco. Todas con el distintivo que a cada cosecha se le añadía algo del vino anterior y por eso no se destacaba su añada. Sólo se numeraban y había que apurarse a comprarlo porque rápidamente.
Al pasar el tiempo, el éxito y la demanda continuaban en aumento y el mercado obligó a realizar cambios. De esa manera se llega hasta hoy en que Viña Valdivieso elabora tres Caballos Locos, ahora con añada y de distintos valles. Uno del Valle de Limarí al norte, otro del Valle Central cerca de Santiago y este que proviene del sur de la comuna de Apalta en el Valle de Colchagua.
Elegante, sutil y muy expresivo
Se elabora en base a Carménere y Cabernet Sauvignon y es un vino elegante, que sorprende con una combinación poco común; la de ser agradable, sutil y muy expresivo a la vez.
Su color claro ya anuncia este perfil y con su intenso bouquet lo confirma. Entra en la boca en puntas de pie y apenas da dos pasos, explota con una energía que deslumbra. Es de final largo y en resumen, es un tinto para los conocedores que estén dispuestos a pagar su precio de lista. Se vende en locales de Iberpark.
Bodega: Viña Valdivieso
Origen: Apalta, Valle de Colchagua
Precio Iberpark: $ 2.371

Es Ingeniero químico y experto en vinos. Su pasión lo ha llevado a visitar terruños, descubrir cepas y probar las más variadas etiquetas.
Fundador de Catadores, escribe y enseña con el mismo placer que degusta un vino desde hace más de 20 años.