El proyecto urbanístico que comprende la zona de Haras del Lago y los predios linderos, a cargo del estudio de arquitectos Aguerre y que demandará una inversión de U$S 50 millones, fue aprobado finalmente por la comuna canaria el martes pasado.
En una reunión que contó con la presencia, entre otros, del propio intendente Marcos Carámbula y del Director General de Planificación Territorial y Ordenamiento Urbano, Andrés Ridao, (al principio no afín con la propuesta) se aprobó la construcción en dos fases, con el principal objetivo de evitar un alto impacto urbanístico, aspecto que no se ajusta al plan de desarrollo de Canelones que, entre otras cosas, fomenta la construcción hacia el Sur y cuyo sistema de saneamiento no está previsto para esta zona.
Las obras comenzarán en dos meses y en esta primera etapa se construirán un total de 250 viviendas (en un principio se preveían unas 500 unidades de uno, dos, tres y hasta cuatro dormitorios) con una inversión que alcanzará, en un principio, unos U$S 30 millones.
La segunda fase del proyecto quedará sujeta a la evaluación que realice la comuna del impacto urbanístico que generen las obras en la zona. Consultado sobre el punto por El Empresario, Leonardo Aguerre, principal responsable del proyecto, reconoció entusiasmado que, si bien el mismo se reduce a la mitad, al menos "no pierde la viabilidad".
Como novedad, en el mismo predio se construirá un hotel que tiene como principal objetivo cubrir la demanda de los extranjeros que llegan al país por un tiempo determinado, máxime si se tiene en cuenta la cercanía con el aeropuerto de Carrasco. Aún no está desarrollado, pero desde la Intendencia exigen que se trate de un hotel de primer nivel. Sobre la posibilidad de un convenio con cadenas hoteleras, Aguerre fue contundente: "No hay nada definido aún. Pero buscaremos a un operador".