Este informe analiza el clima empresarial en Uruguay en el contexto de la asunción del nuevo gobierno del Frente Amplio (2025-2030). A partir de la evolución de las expectativas del sector privado, se comparan los indicadores de 2024, previo al cambio de gobierno, con los de 2019, previo a la asunción del gobierno saliente. De este modo, se establecen ambas mediciones como la línea de base de expectativas preexistentes a las transiciones de mando.
Metodología
El análisis se basa en el Monitor de Sectores Productivos 2024, un estudio que recoge la percepción de directores y gerentes de grandes y medianas empresas en diversos sectores. La metodología combina encuestas telefónicas y web con una muestra no probabilística. La muestra global del estudio abarca 641 casos, con un total de 145 entrevistas en 2024.
El relevamiento abarca a 30 sectores económicos, los cuales son evaluados periódicamente. Entre ellos se incluyen sectores como construcción, comercio, energía, industria manufacturera, servicios financieros, telecomunicaciones, educación y agroindustria, entre otros. Las entrevistas están dirigidas a CEO, gerentes financieros y comerciales de empresas de mayor porte en cada sector, asegurando una visión estratégica y representativa del clima empresarial.
Recuperación del optimismo empresarial
El análisis de expectativas económicas muestra que, en 2024, previo a la asunción del nuevo gobierno, el 68% de los empresarios proyectaba una situación económica favorable para el siguiente año. Aunque esta cifra es inferior al pico del 81% registrado en 2022, sigue reflejando una confianza elevada en el entorno económico. El saldo de expectativas (positivas menos negativas) en 2024 alcanzó +63 puntos, consolidando un panorama de optimismo empresarial en la antesala del cambio de gobierno. Cabe destacar que, debido a un cambio metodológico en la formulación de la pregunta, no se dispone de datos comparables para 2019.

Evaluación de las políticas económicas
La percepción empresarial sobre el contexto de políticas económicas ha mostrado variaciones en los últimos años. En 2024, el 29% de los empresarios evaluó positivamente el entorno de políticas económicas, mientras que el 24% lo calificó de manera negativa y un 47% mantuvo una postura neutral. El saldo de evaluación alcanza un nivel de +5%, contrastando con el clima de evaluación de las políticas económicas del año 2019, cuando el saldo de evaluación se ubicaba en -28%.
Crecimiento sectorial más dinámico
En 2019, previo al cambio de gobierno, el crecimiento promedio esperado para los sectores productivos era del 3,0%. Para 2024, antes de la asunción de la nueva administración, esta proyección aumentó al 3,9%, reflejando una mayor confianza en la evolución económica. Asimismo, el 70% de los empresarios anticipa un crecimiento en su sector, lo que se traduce en un saldo de expectativas sectoriales de +50 puntos, consolidando una visión más optimista sobre el dinamismo económico de los sectores analizados.

Demanda de mano de obra con incrementos moderados
Las expectativas de contratación muestran una leve mejora: en 2019, previo a la transición de gobierno, el 8% de las empresas planeaba aumentar su plantilla, cifra que en 2024 crece al 14%. El saldo de evaluación en este aspecto se ubica en -3 puntos en 2024, mostrando una mejora respecto a años anteriores, aunque con un mercado laboral aún estable y con propensión a la contracción.
Inversión empresarial en ascenso
El 35% de los empresarios planea aumentar la inversión en 2024 durante los próximos doce meses, en comparación con el 11% en 2019, ambas mediciones tomadas antes de los respectivos cambios de gobierno. El saldo de expectativas de inversión se ubica en +21 puntos en 2024, reflejando un mayor dinamismo en la actividad empresarial y una confianza creciente en la estabilidad económica futura con respecto al año 2019.

Rentabilidad: recuperación con nuevos desafíos
En 2019, previo al cambio de gobierno, solo el 14% de los empresarios calificaban la rentabilidad de su sector como positiva, mientras que en 2024, en la antesala de una nueva administración, esta cifra aumentó al 49%. Además, las evaluaciones negativas disminuyeron del 50% en 2019 al 10% en 2024. Esto se traduce en un saldo de rentabilidad que pasó de -44 puntos en 2019 a +39 puntos en 2024, lo que indica una recuperación en la percepción de rentabilidad de los sectores productivos.

Desafíos de rentabilidad: persistencia de costos y transformación digital
Los principales desafíos identificados por los empresarios en 2024 son la gestión de costos y la situación económica general, tendencias similares a las observadas en 2019. Sin embargo, ha crecido la preocupación por la transformación tecnológica y digital, lo que sugiere una mayor presión por innovar para mantener la competitividad y mejorar la productividad
Áreas de gestión sensibles para el desarrollo futuro de la empresa
Cuando los empresarios son consultados acerca de las áreas estratégicas para el desarrollo futuro de sus organizaciones, la gestión de recursos humanos se posiciona como la más sensible, con un 20% de las menciones, reflejando la creciente preocupación por la captación y retención del talento en un entorno laboral desafiante.
La gestión comercial y ventas y la gestión de tecnología (TI) comparten el segundo lugar, con un 16% cada una, evidenciando la importancia de la transformación digital y la optimización de estrategias comerciales para mantener la competitividad.
La gestión de la innovación es considerada clave por el 12% de los empresarios, mientras que la planificación estratégica alcanza un 10%, mostrando la relevancia de la visión a largo plazo y la adaptación a un mercado en evolución.
Otras áreas como la gestión de calidad y operaciones (9%), la planificación financiera (8%), y la investigación de mercado y clientes (3%) reflejan enfoques complementarios para la mejora del desempeño empresarial. La planificación de marketing (3%) y la gestión de marcas (2%) reciben menor priorización.
Conclusiones: un escenario empresarial con más confianza
El análisis comparativo indica que, en general, el sector empresarial llega a la transición de gobierno con un nivel de optimismo superior al de 2019. Aunque persisten desafíos en rentabilidad y empleo, las expectativas de crecimiento e inversión han mejorado significativamente. Los saldos de expectativas en diversas dimensiones muestran un panorama más favorable, lo que sugiere un clima de confianza en la continuidad de políticas económicas que fomenten la estabilidad y el desarrollo productivo del país.
(*) Sociólogo Agustín Bonino, socio director de Opción Consultores.