¿Dónde está el "Champa" Muñoz?

| A casi seis meses de su desaparición, la familia de Juan Pablo Muñoz pide respuestas. "Estamos viviendo un infierno", confiesa su hermana Mónica, quien ha recurrido a Serpaj, Amnistía y hasta a videntes para intentar saber algo. Desde la policía, indican que es un caso muy complejo, pero ya tienen hipótesis.

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El País

MAGDALENA HERRERA

Más que un caso atípico, la Policía entiende que se trata de una persona atípica. Tenía 800 contactos en su celular y en un día podía estar en el Cerro o en Carrasco.

El 5 de noviembre, Juan Pablo Muñoz festejaría sus 44 años. Dos días después, se cumplirían seis meses desde que desapareció, el 7 de mayo, en el barrio La Comercial sin dejar mayores rastros que un auto algo chocado. El domingo su madre dormía y sintió el timbre. Se levantó, abrió la puerta y allí estaba el "Champa", como le decían todos quienes lo conocían, mucho más flaco. Se colgó de un abrazo y cuando éste le iba a contar lo ocurrido, su madre se despertó.

Aunque eso fue un sueño, desde hace casi medio año la familia Muñoz vive una pesadilla. No hay señal alguna del hijo, del hermano, del padre de una niña de siete años, del amigo de muchos, y también del financista, un hombre que se ganaba la vida descontando cheques, prestando dinero.

"Soy la mayor de siete hermanos, y siento la responsabilidad de moverme, de hacer lo que sea necesario para que aparezca `Champa`. Hasta aquí llegó mi silencio y el estar quietita. Se debe tener conciencia de que el `Champa` está desaparecido. La familia y los amigos necesitamos saber qué pasó con él. No es un reclamo a la Policía, porque han trabajado muchísimo en el caso, y lo siguen haciendo, especialmente el departamento de Delitos Complejos. Pero quiero saber qué ocurrió con mi hermano. No puede quedar en el olvido, sin esclarecerse. Sólo una cosa puedo decir y es que `Champa`, por el ser humano especial que es, no se merece lo que le está pasando, no se lo merece", reflexiona Mónica Muñoz, quien está decidida a movilizar cielo y tierra para encontrar como sea a su hermano.

Ha enviado personalmente mails a la ministra del Interior, de cuya cartera la convocaron, ha recurrido a organizaciones como Serpaj y Amnistía, se entrevistó con astrólogos y videntes, ha abierto un blog llamado "Buscando a Champa", y continuará hasta el fondo.

Su próximo paso será solicitar una entrevista en la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento para dejar la denuncia planteada, conjuntamente con un abogado que buscará para que los asesore.

"Toda la familia está viviendo un infierno, esto ha golpeado muy duro en nosotros, muchas personas estamos sufriendo mucho. Pero no nos podemos rendir. Tenemos que seguir moviéndonos, quizás alguien que vio algo, y eso le pesa en su conciencia, pueda aportar un dato", agrega, no sin cierto temor.

"En toda esta historia, me siento totalmente desprotegida. Jamás me iba a imaginar encontrarme en el medio de esta situación, y siento temor de hablar. Siento miedo. Pero no me debe importar, quiero decir y descargar todo el dolor y rabia que siento. Mi hermano desaparece y no hay forma de que se pueda saber qué es lo que pasa. Todo es posible, y ¿hasta dónde no corro riesgos? Pero también tenemos derechos, y no podemos seguir viviendo como si nada hubiera pasado", confiesa.

MISTERIO. "Te corto porque hay inspectores", fueron las últimas palabras que pronunció Juan Pablo Muñoz a un amigo, el miércoles 7 de mayo, entre las 11 y las 12 horas, mientras se dirigía en su auto Effa modelo Ideal, color azul, hacia un cambio ubicado en La Comercial. Nunca llegó al cambio, ni a ninguna de las reuniones que había acordado en el correr del día. Su vehículo apareció en la noche, en Rivadavia y Martín C. Martínez, sin señales de que hubiera sido un robo, según asegura la familia. En la investigación policial se indagó a 200 personas.

A casi seis meses de ese episodio, los Muñoz aún no tienen respuestas claras, salvo hipótesis que Mónica ni se anima a mencionar. "Es lo que la lógica lleva a pensar, de acuerdo al tiempo que pasó. Pero no lo quiero ni decir. Mi esperanza y mi corazón están abiertos a que mi hermano aparezca. Que todo esto no sea más que una confusión, no sé, que se enfermó, que perdió la memoria. Claro que nos aferramos a cualquier cosa que lo mantenga con vida, pero las posibilidades son tantas..."

La familia está convencida que no se trató de un robo, sino de un acto realizado por profesionales ya que no se encontró ninguna huella, ni rastro de su paradero, "todo fue muy limpio, no se equivocaron en nada. Hay demasiada inteligencia detrás".

Desde la Policía se mantiene hermetismo al respecto, salvo algunos detalles (ver recuadro), porque se continúa trabajando en el caso, ya que últimamente se presentaron ciertas pistas que se están siguiendo, conjuntamente con la Justicia.

La desaparición se encuentra en etapa de presumario y, en colaboración con la jueza que tiene el caso, se están intentando nuevas indagaciones para aclarar dudas y llegar al paradero de Juan Pablo Muñoz, según fuentes policiales.

LA PERSONA. "El `Champa` es un ser especial, queridísimo por todo el mundo. Desde que nació tenía como una magia, que los atraía a todos. Me puedo acordar perfectamente cuando de chiquito desaparecía porque siempre estaba haciendo pillerías por los techos. Antes de irnos a Italia (mi padre fue diplomático), vivíamos en Pocitos, y cada dos por tres, teníamos que ir a buscar al `Champa` a la panadería de la vuelta, porque se había hecho amigo de los dueños, y siempre estaba allí con una bolsa de bizcochos. Así era él: ¡mirá esta foto! Estamos toda la familia en una audiencia con el Papa, y ¿quién está casi en la falda del Papa? El `Champa`. Siempre fue confianzudo, no le tenía miedo a nada", recuerda su hermana Mónica, con la fotografía en la mano.

De adulto, según relatan familiares y amigos, siguió con igual personalidad, siempre optimista, alegre y leal. "Como si lo escuchara todavía. Salíamos a caminar por la Rambla, o me llevaba a algún lado, y me decía: `Mirá Moni, mirá si esto no es disfrutable`, y me mostraba la Rambla. `¿No somos unos privilegiados? ¿No es esto divino?` Siempre le estaba diciendo a los amigos que debían aprender a vivir y a disfrutar de la vida y no dejarse llevar por los problemas. Y si tú ves dónde vivía, perdón, dónde vive mi hermano, te querés morir. ¡En una caja de zapatos! No tenía ningún tipo de pretensión. Lo que quería era disfrutar, estar con los amigos y la familia. Siempre fue muy solidario con todos mis hermanos, cada vez que lo necesitamos. Él dio mucho. Sí, era socio del Club de Golf, le gustaba jugar al golf, cancherear, pero nada más", afirma.

Juan Pablo Muñoz tenía un proyecto laboral entre manos con un amigo, "una suerte de red de pagos o algo así", y estaba muy contento al respecto. "Estaba feliz con su vida, le gustaba lo que hacía, no era una persona que dijeras: le va a pasar algo. Su trabajo le implicaba riesgos, él lo sabía y me lo había manifestado, pero también decía que le gustaba la adrenalina. Era un riesgo con cierto sentido para él", cuenta Mónica, quien más de una vez le preguntó a su hermano por qué se dedicaba a prestar dinero.

"Champa" le respondía: "Porque soy libre, porque no estoy atado a ningún escritorio, porque puedo disponer de mi tiempo y así no le tengo que rendir cuentas a nadie".

EL FINANCISTA. Desde la propia Policía reconocen que era un ser muy especial, y que mucha gente lo quería, según se desprende de los cientos de indagaciones. "Le caía bien a todo el mundo, era muy extrovertido, hablaba con cualquiera y contaba todo. Ganaba y ya gastaba la plata. Y toda esa frescura era la base de su negocio, pero también lo volvió vulnerable para algunas cosas", señalan autoridades allegadas al caso.

De hecho, sí, Juan Pablo Muñoz vivía del préstamo de dinero, de descontar cheques. "Quiero hacer una aclaración importante -dice la hermana- por ahí alguien escribió financista, y es un término muy apropiado. ¿Por qué? La tarea de mi hermano era ayudar a la gente, por supuesto que con un lícita ganancia, pero no era un usurero. Prestaba dinero a quienes no tenían acceso a otro tipo de crédito por ciertos requisitos que solicitaban bancos u otras casas. Pero, por lo que pude percibir, hasta sus clientes lo querían, lo sentían un amigo. Lo que te puedo decir es que `Champa` es un hombre de ley, íntegro, muy leal con sus amigos, si le contabas algo, ni a patadas se lo decía a nadie, pero en lo de él era súper abierto, de respuestas rápidas, ágil, ingenioso, divertido".

DESCONCIERTO. Apenas se en- teraron de la desaparición del "Champa", en la familia Muñoz reinó la desorientación. No sabían qué hacer, dieron algún manotazo mal dado, y luego se dejaron llevar por todo lo que la Policía les fue indicando. Además, según ellos mismos confiesan, cada duda o pista que ellos sentían tener, la Policía intentaba despejarla. Pero las respuestas no llegaban, según señala Mónica Muñoz, y "los tiempos de la Policía no son los de la familia".

Frente a ese panorama, cualquier situación que pudiera beneficiar el "encontrar al Champa", era bienvenida. Recurrieron a astrólogos y videntes, y todos concordaron en ese momento en lo mismo. "Privación de libertad, situación complicada a nivel laboral y de salud. Pero no dan muerte", dice la hermana. "Hablamos con otros que curiosamente llegan hasta determinado punto, y como que se cierne la oscuridad. No nos pueden decir nada".

Las hipótesis de la familia son múltiples. "Puede haberse enterado de algo que no tenía que saber, o se trata de alguien que le debe dinero y por eso lo tiene secuestrado. Pero no sabemos, no hay nada concreto. Está todo hecho tan perfecto que tiene que haber sido estudiado y realizado a propósito. Los videntes dicen que lo venían siguiendo. Lo que a nosotros nos angustia es ¿por qué? Si era dinero, ¿por qué no aparecieron a pedirlo? ¿Qué es lo que estaban buscando? ¿Por qué no le podían perdonar la vida? Y no debo hablar así, tengo que creer que está vivo, pero a veces se hace muy difícil, y mucho más a medida que pasa el tiempo. De todos modos, la gente escribe y me hace llegar que los milagros existen. Porque además, hay cosas llamativas: no había signos de violencia, es como si el `Champa` se hubiera bajado del auto conscientemente, subido a otro, y conociera a la otra persona. Me hace pensar que si no lo chocaron, fue alguien conocido de él, con quien se fue y no se supo más nada. Desde Delitos Complejos nos aseguraron que no había traspasado la frontera", indica Mónica Muñoz.

Conciencia. Más allá de las actividades laborales de Juan Pablo Muñoz, nada indica que estuviera en mal camino, y mucho menos, como señala su hermana, que mereciera ser privado de su libertad o la peor de las hipótesis que se manejan, que esté muerto. "Es algo que no sólo nos atañe a nosotros, como familia, sino a toda la sociedad. ¿Qué sucede si dejamos que estas cosas pasen y no se esclarezcan? ¿Que no se sepa qué pasó? ¿Quién será el siguiente?"

Por lo pronto, la hija de siete años de Juan Pablo Muñoz ha preguntado por él: "No sabemos dónde está", le han respondido hasta ahora.

A casi seis meses

Miércoles 7 de mayo, 10.30 horas. Juan Pablo Muñoz partió del Club de Golf, de donde es socio, en auto, hacia un cambio ubicado en La Comercial.

11 horas. En el trayecto mantuvo su última comunicación telefónica. "Te corto porque hay inspectores", le dijo a un amigo.

12 horas. Una pareja cobra un cheque de Muñoz por 50.000 pesos. La imagen de ambos queda registrada en las cámaras de seguridad del Banco.

22 horas. La Policía halló su auto en el cruce de Rivadavia y Martín C. Martínez. Tenía un golpe en la parte delantera y otro en la puerta del conductor. El vehículo estaba en perfecto estado antes. Se encontró cerrado con llave y faltaba la radio, la agenda y el celular, pero estaba correctamente estacionado y contenía 4.000 pesos en su interior, debajo de la alfombra.

Sábado 10. El departamento de Delitos Complejos de la Policía detiene e indaga a varias personas por la desaparición de Muñoz, incluida la pareja que cobró el cheque el miércoles, pero se supo que éste había sido entregado días antes y por lo tanto fueron desvinculados del caso. También hubo otros indagados inmediatos, que tampoco resultaron sospechosos.

Lunes 19. La familia y amigos ofrecieron una recompensa a quien aportara datos que permitieran localizarlo. No hubo ninguna llamada veraz.

Al día de hoy. En los casi seis meses de investigación, se convocaron a declarar a 200 personas. El caso se encuentra en etapa de presumario.

Blog cuenta historias y pide ayuda

"Los otros días, buscando pruebas o señales, encontré unas fotos de él en un museo de cera de Londres, donde aparece `conversando` con los famosos, de manera muy divertida. En una está besando a una actriz famosa... la estatua por supuesto... ocurrencias tenía mil. Los cuentos nos hacían descostillar de risa. Juntó cantidad de copas, medallas y trofeos. En los últimos años le había dado por el golf... incluso llegó a formar el `Champa Golf Team` (hizo remeras con el nombre), del cual se relataron los éxitos en algún diario deportivo (...). Quien lo oyera hablar, creería que él vive en un palacete, porque su monoambiente estilo caja de zapatos para él es su palacio. En alguna oportunidad me dijo `Moni, te invito a un asado en mi residencia`, allá iba y me esperaba con un asadito hecho por él en la mini kitchenette, y me decía `Esto es vida, vamos a disfrutar, pasemos al comedor` (que estaba ahí mismo encima de su cama por así decir!!!!!) (...) A mi hermano le encanta disfrutar la vida. Por nada del mundo podría estar atado a un escritorio. Hace pocos años descubrió que podía tomarse vacaciones y no pasaba nada (...) Cómo duele su ausencia!!!!!"

Extracto del blog Buscando a Champa (https://jazmin-buscandoachampa.blogspot.com/)

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