El Cairo siempre estuvo cerca

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DESDE FINES del año pasado, luego de un litigio entre sus herederos, los libros de Roberto Fontanarrosa comenzaron a regresar a las librerías, esta vez en manos de la editorial Planeta. Durante los cinco años que siguieron a su muerte, el 19 de julio de 2007, agotadas las últimas ediciones de De la Flor, fueron inconseguibles. Medió un conflicto judicial entre su hijo, Franco, por una parte, y su segunda esposa, Gabriela Mahy y el editor Daniel Divinsky, por la otra, a quienes les tocó resignar los derechos sobre los más de sesenta títulos de uno de los autores más populares de la Argentina.

Parodia, bares y escritura.

El mundo ha vivido equivocado y otros cuentos integra la ahora llamada Biblioteca Fontanarrosa, junto a los tomos de relatos La mesa de los galanes, El mayor de mis defectos, No sé si he sido claro, Nada del otro mundo, Te digo más, y Uno nunca sabe, además de las novelas La gansada, Best Seller y El área 18. Es el primer libro de cuentos de Fontanarrosa -la primera edición es de 1982-, y reúne los tópicos que habría de frecuentar la mayor parte de su narrativa: las mesas del bar El Cairo, en Rosario, las historias de fútbol, las parodias de la literatura y el cine policial, algunos escenarios de la Segunda Guerra Mundial, el absurdo salvaje de los estereotipos populares.

Tuvo Fontanarrosa una relación personal con la cultura de masas, manifiesta en la imaginación de sus historias y el notable registro de la expresión oral. Como en sus célebres dibujos e historietas (Inodoro Pereyra, Boogie el Aceitoso), en el relato alternó el chiste y la ironía, la desmesura y la ocurrencia, despojado de la convicción dramática pero sensible a sus manifestaciones, que a menudo trazan un relato en segundo plano, detrás del argumento y su anécdota.

El cuento que da título al libro es un clásico de la literatura argentina. No solo se introduce en las fantasías sexuales masculinas acerca de lo que puede considerarse "un día perfecto". A medida que avanza la conversación de dos amigos en una mesa de El Cairo, el tiempo presente de la fantasía imanta una expectativa que desplaza su carácter ilusorio hasta darle la naturaleza de una experiencia vivida, con el beneficio de volver intrascendente la frontera entre imaginación y realidad. Es el cuento más logrado del conjunto. Varios relatos son exploratorios y culminan sin cerrar la idea que les dio inicio. En otros abundan los hallazgos y las sátiras demoledoras, como en "Una vida salvaje", parodia de las impiedades que asoman en los retratos de la vida norteamericana, o en "Crónica de caza", relato de una cacería de dragones por parte de los caballeros del rey Arturo y el Príncipe Valiente, con tono y lenguaje típicamente argentinos.

Varios cuentos se introducen en la naturalización de los absurdos. Es particularmente eficaz "Un hombre en soledad", expedición de unos periodistas detrás de un personaje recluido en el delta del Paraná, donde los protagonistas y cada una de las personas que encuentran declaran amar un oficio pero ejercer con resignación otro. También el relato "Inspiración", las tribulaciones de un dramaturgo que tiene la oportunidad de su vida y es visitado por su musa con la milagrosa solemnidad de una alucinación bíblica, hasta que la musa lo obliga a ponerse a trabajar. Y "Patria potestad", típica confrontación de un escritor con los directores de cine que tergiversaron su obra para hacer una película, resuelta por las seducciones del dinero.

"Memorias de un wing derecho" es un certero homenaje a la institución popular del futbolito, a través de la inesperada voz de de uno de los muñecos del manillar, que comenta y recrea sus hazañas con gran convicción de realidad.

"Lo que se dice un ídolo" abunda en el mundo del fútbol, pero esta vez desde el consejo del amigo de un delantero demasiado correcto y respetuoso para ser idolatrado, hasta que seducido por los consejos, cae en un escándalo que lo eleva a la gloria merecida. Más de un cuento se introduce en la Segunda Guerra Mundial, pero el más logrado es "Un teniente primero", relato breve en el que Fontanarrosa homologa a los oficiales con los niños y hace vibrar en segundo plano una reflexión.

Cada libro de la nueva colección lleva en la tapa la ilustración de un humorista gráfico o artista. En esta edición, Crist, en otros Caloi, Rep, Nine, Carlos Alonso. Todos convocados a rendir homenaje a una figura que se ha convertido en emblema del talento argentino.

EL MUNDO HA VIVIDO EQUIVOCADO Y OTROS CUENTOS, de Roberto Fontanarrosa. Planeta, 2012. Buenos Aires, 260 págs. Distribuye Planeta

ENTRE LAS CONSECUENCIAS del litigio por los derechos de la obra, una declaración de Daniel Divinsky al diario Página 12 sumó una inesperada complejidad sobre la genética de los textos de Fontanarrosa, que seguramente interesará a los críticos más que al público, masivamente agradecido por la risa y la genialidad. Luego de definir su estado emocional como de "bronca reconcentrada" y "amargura absoluta", Divinsky explicó: "Porque las ideas de esos libros eran de Fontanarrosa, y la realización básica también, pero la reescritura la hicimos nosotros en la editorial. Porque El Negro era muy desprolijo para escribir, nunca revisó nada de lo que hice. Cuando le propuse que releyera mis correcciones dijo `no, no, si lo hiciste vos está bien`. Era por fiaca y por confianza, las dos cosas. O sea que siento como que se han apropiado de hijos míos. Legalmente, no puedo acusar de otra cosa".

Desde 1971 Roberto Fontanarrosa publicó sus libros con Ediciones De la Flor, pero su hijo, Franco, puso fin a la renovación automática de los contratos y aceptó la nueva oferta de Planeta. Perdida la obra, Divinsky planteó un juicio a Franco Fontanarrosa por los derechos del último libro de relatos, Negar todo, en un juzgado civil.

"Dos o tres días antes de morir, El Negro me mandó el original, con los dos o tres primeros cuentos ya revisados por él -declaró Divinsky-. Luego hicimos un trabajo de editing profundísimo, primero yo y después Daniel Samper Pizano, que es un experto en su obra y muy amigo suyo. O sea que fue trabajado con una devoción monacal. Pero el libro está listo y sigue en el limbo, desde hace dos o tres años. Hay un texto que él escribió cuando nos hicieron un homenaje a la trayectoria en la Feria de Guadalajara, en donde decía que él no publicaría en ninguna otra editorial. Más aún, cuando Juan Forn dirigía Biblioteca del Sur le hizo a Fontanarrosa una propuesta, medio en broma, y él respondió: Bueno, si les pasa algo a los Divinsky... Pero que parezca un accidente".

Negar todo continúa inédito, hasta que la justicia dirima el pleito por los derechos.