Las tres señales de que a uno le quedan 24 horas de vida, según una enfermera de cuidados paliativos

Redacción El País
La enfermera de cuidados paliativos Julie McFadden, autora del libro “Nothing to Fear: Demystifying Death to Live More Fully” (Nada que temer: Desmitificando la muerte para vivir más plenamente), se ha convertido en una voz reconocida en redes sociales al compartir sus experiencias acompañando a pacientes en estado terminal.

Solo en TikTok, acumula más de 1,7 millones de seguidores que buscan comprender mejor el proceso de la muerte y aprender cómo apoyar a sus seres queridos en esos momentos.

En uno de sus videos más vistos, McFadden explica cuáles son los tres signos más comunes en las últimas 24 horas de vida de un paciente:

Este primer signo se manifiesta como un sonido parecido a un gorgoteo, provocado por la acumulación de secreciones en la garganta. Al final de la vida, el paciente pierde la capacidad de tragar o toser, lo que genera este ruido característico. Según McFadden, el ronquido de la muerte no produce dolor y es parte natural del proceso de fallecimiento.

Otro signo típico de las últimas horas de vida es el cambio en el patrón respiratorio. La respiración se vuelve más lenta, irregular y con pausas prolongadas, a veces acompañada de suspiros profundos. La enfermera señala que la respiración agónica es uno de los indicios más evidentes de que la muerte está cerca.

El tercer signo es la llamada “mirada de la muerte”. El paciente puede estar inconsciente, con los ojos y la boca abiertos, pero su mirada queda fija, sin foco ni expresión. Aunque parezca desconectado, existen indicios de que aún puede percibir la presencia de los familiares.

McFadden aclara que estos signos de la muerte no siempre están presentes, ya que algunas personas fallecen de forma repentina y sin síntomas previos. Sin embargo, conocerlos puede ayudar a familiares y cuidadores a reducir la ansiedad y el miedo, enfocando sus energías en brindar acompañamiento emocional al paciente en sus últimos momentos.

En base a O Globo - GDA