El Tiempo/GDA
Estilos de vida en los que las personas se mantienen en reposo la mayor parte del día repercuten en serios problemas en la salud del organismo. A nivel global, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), "uno de cada cuatro adultos no experimenta niveles de actividad física estables, que repercute en un alto riesgo en enfermedades que afectan la salud cardiaca, funcional y mental". Por esto, incentivar la actividad física, desde temprana edad, es primordial para no tener consecuencias en el futuro.
Según Angélica García, médica del deporte de Top Doctors Colombia, "el sedentarismo ha surgido como un importante factor de riesgo vinculado con el desarrollo de afecciones en el paciente". Provoca que la persona padezca enfermedades crónicas, fallas en el metabolismo y debilidad ósea y muscular.
También tiene consecuencias a nivel social, personas con sedentarismo prolongado están en aislamiento constante, lejos de amistades o interacciones sociales, que puede ocasionar problemas relacionados con la soledad en la que se encuentran inmersos.
También, un estudio publicado en línea en el British Journal of Sports Medicine encontró que la mayor actividad física diaria ayuda a contrarrestar el riesgo de padecer enfermedades o problemas de salud.
Además, establece que "en los países desarrollados pasan alrededor de 9 horas sentados durante sus jornadas de trabajo, lo que influye en aumentar el riesgo de muerte".
La OMS establece que "las personas con un nivel insuficiente de actividad física tienen un riesgo de muerte entre un 20 % y un 30 % mayor en comparación con las personas que alcanzan un nivel suficiente de actividad física". Adquirir rutinas de ejercicios contantes es esencial para contrarrestar las consecuencias del sedentarismo.
Recomendaciones de expertos.
La investigación publicada en el British Journal of Sports Medicine concluyó que las personas que realizaban más de 22 minutos de ejercicio al día presentaban mucho menor riesgo de sufrir complicaciones de salud.
La doctora García afirma: "Se debe comenzar lentamente, es decir, deberá hacer ejercicio de forma gradual, sin sobrecargar el cuerpo o excederse". Es necesario tomar precauciones para no experimentar lesiones u otras afectaciones, y procurar iniciar gradualmente de acuerdo con la capacidad que resista el cuerpo.
"El paciente también puede hacer otros pequeños cambios que podrían darle grandes beneficios, como subir y bajar escaleras en lugar de tomar el ascensor, implementar lapsos de caminata cuando sea posible y usar la bicicleta para ir al trabajo, entre otras opciones", afirma la experta.
Beneficios del deporte en la salud mental.
El Centro de Psicología Canvis registra que "participar en actividades deportivas puede aumentar la autoestima y la confianza en uno mismo". Al establecer metas y lograr mejoras en el rendimiento físico, las personas pueden experimentar una sensación de logro que se traduce en una mayor autoestima.
La conexión social que a menudo acompaña a los deportes también puede fomentar un sentido de pertenencia y apoyo, lo que contribuye a la salud mental en general.
La actividad deportiva regular también está relacionada con una mejor calidad del sueño. Dormir lo suficiente y tener un sueño de calidad son fundamentales para una buena salud mental. El ejercicio puede ayudar a regular los patrones de sueño, lo que a su vez puede reducir los problemas de insomnio y el agotamiento.
Precauciones que se deben tomar durante la actividad física.
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos menciona ciertos riesgos que toman las personas al momento de hacer ejercicio.
Hacer demasiadas repeticiones sin haber acostumbrado el cuerpo: esto puede causar lesiones, desgastes musculares y deserción, pue muchas veces hace creer a las personas que no son buenas para el ejercicio cuando no tienen la asesoría necesaria.
Falta de disciplina: muchas personas son intermitentes al momento de entrenar y esto genera que su cuerpo no se adapte a la actividad física y no vean resultados.
Alimentación desbalanceada: se debe combinar una rutina de ejercicio con una buena alimentación para que la persona no se descompense y pueda rendir en su cotidianidad.
El sedentarismo prolongado es una amenaza para la salud humana. Por esta razón, la actividad física no solo es beneficiosa para el cuerpo, sino que también es una poderosa herramienta para mejorar la salud mental. Igualmente, es necesario combinar el ejercicio con una buena alimentación, y seguir las indicaciones del personal médico especializado.