El aumento de sodio en el agua de OSE está provocando cambios en nuestra vida cotidiana: desde el consumo hasta la preparación de bebidas y alimentos. Un sector que ya ha tomado medidas al respecto es el de las cafeterías que vieron modificado el gusto de sus preparaciones tras lo sucedido.
Rafael Grimbe contó que en la cafetería Plaza Café hace días trabajan con agua de bidón, ya que el gusto comenzó a ser cada vez más notorio, tanto en limonadas, licuados, café espresso o americano, donde era más fácil sentir diferencia en el sabor. En tanto, en bebidas como los capuccinos o cortados, lo salado se camufló un poco: “La leche opacaba ese sabor salado, aunque estar, estaba”, sostuvo.
“Trabajamos con un filtro especial, pero igualmente no quita la sal, entonces ahora estamos averiguando para instalar uno de osmosis inversa que puede asegurar filtrar eso”, detalló Grimbe, quien agregó que ante la situación actual los costos se elevan para ellos: “Comprar agua envasada eleva el costo en un porcentaje muy superior para la máquina, aunque no influye tanto en el valor de la taza. Todavía no lo hemos calculado porque es muy reciente, pero la reacción inmediata fue pensar en la calidad del producto más allá del costo. No solo en el café, sino en otras bebidas y en preparaciones de la cocina, como los panificados”.
Por su parte, Álvaro Arijón, de Cardenal Café, señaló que también están utilizando agua envasada para la cafetería, ya que aunque también usaban desde antes filtro, “el agua estaba arruinando el café”.
Los precios, por el momento, no se ven afectados a raíz de estos cambios, porque son recientes y cada establecimiento evalúa la situación.
Daniel Benseñor, de La Resistance Boulangerie , contó que por el momento no han tenido que rever la forma en que hacen sus preparaciones pero están atentos para, eventualmente, hacer alguna modificación en las recetas de ser necesario.