Industria sube la carne y gobierno evalúa tarifar cortes para pobres

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P. ANTÚNEZ/A. OYHENARD

Por cuarta vez consecutiva, los frigoríficos trasladaron la subas del ganado a la carne que vuelcan al abasto. Subieron $ 5 el kilo de la media res y 4% el precio del asado. El gobierno analiza tarifar cortes pero solo para los más pobres.

Con un mercado para el novillo gordo que sigue mostrando precios firmes y con tendencia a la suba, los frigoríficos decidieron ajustar ayer las tarifas de la carne destinada al abasto. Con este nuevo aumento -el cuarto en lo que va del año- los cortes en el mercado interno llevan un incremento acumulado de 22% en estos tres primeros meses del año.

La media res subió entre $ 4 y $ 5 y quedó al carnicero a un costo de $ 90 por kilo -algunas plantas ajustaron $ 1 más por kilo y no todas suben a la misma vez- y el asado bovino subió 4%, llegando a las carnicerías a un costo de $ 83. Los frigoríficos mantuvieron las pulpas sin hueso en caja -ya habían subido en el incremento anterior- y también las menudencias.

Los carniceros dicen que no tuvieron tiempo de evaluar la suba anterior (de hace una semana) cuando ya están enfrentando la otra y aseguran que, aún no hay signos significativos de retracción en el consumo que hoy es el más alto del mundo (los uruguayos consumen 61 kilos de carnes rojas al año).

Por el momento no se descarta la posibilidad de tarifar algunos cortes en acuerdo con los frigoríficos como se hizo en 2005 con el asado del Pepe y en 2008 con la paleta, la aguja y el pesceto, entre otros. Esos cortes, no tenían un peso tan alto en la canasta de consumo, pero sí a nivel del Índice de Precios al Consumo.

La senadora oficialista y primera dama, Lucía Topolansky, declaró ayer a Canal 10 que el gobierno está "evaluando" el mecanismo de tarifar algunos cortes de carne pero solamente a través de tarjetas para los hogares de menores de recursos "para asegurarse" que el beneficio alcance a las personas de menores ingresos en todo el país. "Yo en realidad no le puede dar un beneficio genérico que quiero que llegue a algunos", afirmó. Agregó que habría que definir qué franja de ingreso mínimo se fija para aplicar esta medida.

No obstante, si bien el secretario ejecutivo de la Cámara de la Industria Frigorífica (CIF), Daniel Belerati, aseguró a El País que "nunca se pueden cerrar las puertas al diálogo", no se mostró partícipe de que acordar precios sea la salida para paliar las subas.

"El problema es el nivel de faena. Tenemos que ser claros, escasamente se están matando 40.000 reses por semana y es muy difícil acordar precio".

Para Belerati, la salida pasa por "romper el círculo vicioso que se está dando. Por un lado, la reposición tiene un precio muy alto, impulsado por las ventas de ganado en pie hacia Turquía. Con esos valores se está afectando que el invernador pueda sacar su ganado gordo del campo y reponer. Esa situación es un tanto perniciosa, sobre todo, porque no es un precio real el que paga Turquía".

El secretario ejecutivo de la CIF recordó que entre enero y febrero se exportaron 64.000 cabezas de ganado en pie hacia Turquía, es más del 20% de la faena (con una faena de 320.000 reses se fueron 64.000 cabezas en pie). Para Belerati la fuerte exportación en pie "está desvirtuando lo que son los ciclos normales de engorde. Cuando un productor tiene el ganado gordo lo vende y repone. Con el precio subsidiado que está pagando Turquía, los precios de la reposición son tan altos que al productor le cuesta reponer".

Por su parte, el presidente del Instituto Nacional de Carnes (INAC), Luis Alfredo Fratti, admitió que "hoy hay poco margen para actuar en la línea de los acuerdos". Es que hoy se tiene una faena baja y un mercado internacional muy demandante, con valores muy firmes, de la mano de una demanda creciente y una escasez de carne en el mundo. Para Fratti, los acuerdos hoy "serían una medida que no daría los resultados esperados" y, en paralelo, el jerarca aseguró que el Ejecutivo "no descarta que se puedan tener otras medidas, pero seguramente, bastante más difíciles de implementar".

MÁS SUBAS. Mientras tanto, el precio del ganado volvió a subir en estos últimos cuatro días. Hoy se hacen negocios por arriba de los US$ 4 por kilo de carne para el caso del novillo gordo con buena terminación y a US$ 3,70 por kilo de carne para el caso de la vaca gorda. A nivel de negocios en pie, el ganado gordo está a US$ 2,10 por kilo.

Para la semana que viene la mayoría de los frigoríficos ya tienen armadas sus faenas y las entradas ya no están tan desesperadamente cortas como en semanas anteriores.

Los consignatarios aseguran que se está viendo un poco más de oferta en el mercado y eso posibilitó que los frigoríficos armaran las faenas de toda la semana próxima.

ESTUDIOS. El Instituto Nacional de Carnes viene chequeando que haya "paridad de exportación" en los valores de los cortes que los frigoríficos vuelcan al abasto.

Esos estudios detectaron el año pasado que los frigoríficos estuvieron volcando los asados bovinos más baratos hacia el mercado argentino y más caros al mercado interno. El estudio técnico elaborado por el INAC, motivó que, incluso, el propio presidente de la República José Mujica, saliera a pedirle a los frigoríficos que no se hicieran los listos con el consumo interno, porque era el que soportaba el mercado en los momentos de crisis y recordó lo que pasó con la carne en el mercado interno cuando la epidemia de fiebre aftosa desatada en 2001.

"Medimos permanentemente que se de una paridad de exportación en el mercado interno. Los últimos estudios al 15 de febrero están dando que es así", aclaró Fratti a El País.

No obstante, explicó que "los aumentos tan repetidos en el precio de la carne, no nos dan el tiempo fijo para estar suficientemente actualizados en los monitoreos. No todas las empresas suben la misma vez el producto, ni en los mismos porcentajes, por lo tanto, tenemos que encontrar el promedio y analizar los números. Eso lleva tiempo".

Desde el INAC se trabaja para poder paliar las subas de la proteína roja en el abasto, incrementando la oferta de cerdo y pollo. "Estamos por formar dos mesas dentro del INAC, una para el pollo y otra para el cerdo", adelantó Fratti. En esas agrupaciones estarían nucleados los industriales, los productores, los carniceros, las grandes superficies y el Ejecutivo.

"Hemos conversado algo con los carniceros y tenemos conversaciones anteriores con algunos de los actores tanto en el sector del pollo como en el del cerdo y pensamos retomarlas", afirmó Fratti.

A partir de mañana y por 15 días, la planta del Frigorífico Tacuarembó, perteneciente al grupo Marfrig parará las faenas por 15 días dando licencia al personal, confirmó a El País Martín Secco, director del Grupo Tacuarembó/Marfrig. El jerarca dijo que, por el momento, no se piensa aplicar una medida similar en ninguna de las otras cuatro plantas de la empresa.

Por otra parte, el Ministerio de Trabajo está redactando un proyecto de decreto que se elevará en los próximos días el Gabinete Productivo para su aprobación que prevé "ampliar el período de cobertura" del seguro de paro para los trabajadores de la industria frigorífica a un año, según informó a El País una fuente del Ejecutivo.

El decreto estará amparado en el marco de la nueva ley de seguro de desempleo y solamente estará dirigido a esa rama de actividad.

"Este marco establece que cuando existen condiciones especiales en alguna industria en particular el período para acogerse al seguro de paro puede extenderse a un año (hoy el máximo son seis meses)", explicó la fuente.

Este decreto servirá para "amortiguar" el impacto que está provocando la falta de ganado para faena en la industria en una época que debería ser normal. Asimismo, el decreto establecerá una "flexibilización" en las condiciones para acogerse al beneficio del seguro de paro.

En este caso, se reducirá el plazo mínimo de antigüedad que se exige en la actividad de la industria frigorífica para acceder al paliativo.

En las últimas semanas el frigorífico Inaler del grupo Tacuarembó Marfrig envió a sus 600 operarios al seguro de paro, al igual que la planta industrial de Sarubbi que envió a otros 300. En ambos casos se esgrimió que la falta de ganado para faena y los altos precios de la hacienda hacían inviable mantener la actividad. A esto hay que agregarle la situación del frigorífico Florida que está cerrado a la espera de un acuerdo con un inversor para reanudar su operativa. Además, la reducción de la faena en la industria también está golpeando al sector curtidor que ve reducida el acceso a la materia prima.

El miércoles, el vocero del Gabinete Productivo, el titular de Industria Roberto Kreimerman, informó que el gobierno "analizó profundamente" la coyuntura de la industria frigorífica con datos estadísticos sobre su comportamiento actual.

En la discusión del cónclave se acordó entre los distintos ministerios la elaboración de un informe para cuantificar "el impacto" y los "costos" que esta situación le está significando al gobierno por la pérdida de recaudación y el envío de trabajadores al seguro de paro.

El Ministerio de Economía ya tiene asegurado una inflación de 0,277% para marzo a partir de los incrementos de los precios de los combustibles, la inminente aprobación de la leche tarifada y la suba del asado. Sólo el incremento de precios de este corte trasladado al público derivará en un piso de inflación de 0,028%. En tanto el ajuste de las naftas que comenzó a regir ayer sumará otro 0,152% y el del gasoil añadirá un 0,056%. Por otra parte de concretarse una suba de $ 1,5 en el valor de la leche tarifada se sumaría un 0,048% a la inflación de marzo.

Resta sumar los aumentos de colegios.