ANDRÉS LÓPEZ REILLY
Un informe técnico de Bomberos recomienda el "retiro inmediato" del cerco construido alrededor de un grupo de torres del complejo Euskal Erría 71 y pide que "se revea" el diseño de la escuela pública que determinó ese cerramiento.
El informe, al cual tuvo acceso El País, señala que "el cerco colocado, como así también la construcción de la escuela (si ésta se dispone de manera tal que imposibilite el ingreso de los vehículos de emergencias) acrecienta considerablemente las tareas de los servicios de bomberos si estos se requieren, dejando a sus habitantes mucho más aislados y alejados de una buena respuesta ante una emergencia".
La construcción de la escuela N° 268, en Emilio Castelar y Pirán, dejó a cinco torres del complejo Euskal Erría 71 sin una entrada directa desde la calle, por la que ingresaban ambulancias, bomberos, pedidos de farmacia y garrafas de gas.
"No tenemos una entrada de ambulancia, ni para emergencias. Los que traen los pedidos de farmacia no se animan a dejar las motos lejos y venir hasta acá a pie. Tenemos personas discapacitadas y la salida ahora es únicamente por una escalera muy empinada. Nosotros queremos la escuela, pero hay que tener respeto. Un día vinieron, clavaron los palos y nos encerraron. Y acá nadie se hace responsable de nada", declaró a El País la vecina Edith Onetto.
En total, son 182 apartamentos que se han visto afectados por esta obra. Los vecinos dicen que no se oponen a la escuela e incluso han colgado un cartel en el que lo dejan en claro.
"En riesgo" la vida de vecinos
En una comunicación del Departamento Técnico y de Asesoramiento de Bomberos enviada a la arquitecta Ana Luisi (de la ANEP) se establece que los planteos de los vecinos del Euskal Erría ameritan "especial urgencia". El informe agrega que en las torres viven personas "de la tercera edad" y que de ocurrir un siniestro, se pondría en riesgo "la vida de muchos habitantes, aislándolos de la posibilidad de que una emergencia pueda brindarles los auxilios necesarios".