ANDRÉS OYHENARD
A pesar de los "cortocircuitos" que se están dando en el Mercosur, Uruguay apoyará un planteo que hará Brasil para que se puedan "flexibilizar" las normas del Focem para financiar proyectos industriales a privados.
La delegación oficial de Uruguay que viajará a Asunción el próximo 23 de julio para participar del Consejo de Mercado Común (CMC) está dispuesta a apoyar un planteo de Brasil para que se "flexibilice" la normativa del Focem y así se puedan financiar emprendimientos de empresas privadas.
Brasil presentará un proyecto para la industria automotriz y otro para el gas y el petróleo. Asimismo, Uruguay vería con buenos ojos que se pueda extender esta iniciativa a otros sectores industriales.
El director Nacional de Industrias, Roberto Kreimerman, dijo a El País que Uruguay dará un "fuerte impulso" -cuando asuma la presidencia pro témpore del Mercosur el próximo 24 de julio- a los "procesos de integración productiva" entre empresas privadas con el dinero del Focem si la iniciativa de Brasil tiene "éxito". Actualmente este fondo solamente se puede utilizar para obras públicas de los países del bloque.
Otro punto que se abordará en la próxima reunión del CMC, será la elaboración de un programa que defina qué cadenas específicas se quieren desarrollar y cuáles serían las condiciones por parte de los Estados para que se habilite el financiamiento del Focem para proyectos privados.
Según comentó Kreimerman, la iniciativa que se discutirá en Asunción tiene consenso porque en otros bloques comerciales como el sureste asiático la integración productiva entre las industrias supera el 40%, mientras que en el Mercosur apenas llega al 15%.
El funcionario sostuvo que de aprobarse la iniciativa, se daría un "dinamización" de las cadenas industriales en los próximos semestres.
La integración de las cadenas productivas puede darse bajo dos modalidades. Una vertical que implica que -por ejemplo- Uruguay se vuelva proveedor de alguna industria de otro país del Mercosur. Mientras que las asociaciones de tipo horizontal se darían para desarrollar áreas como la biotecnología, la industria farmacéutica, entre otras.
El SOCIO. En diálogo con El País el embajador permanente de Brasil ante la Aladi y el Mercosur, Regis Arslanian, dijo que su país ya redactó los dos proyectos de integración de cadenas productivas que tienen como finalidad "ayudar" a Uruguay y Paraguay a "reducir las asimetrías" dentro del bloque.
La propuesta de Brasil es que la contrapartida nacional para proyectos de integración de cadenas productivas con dinero del Focem pueda contar con recursos de privados y organismos que estén vinculados a dependencias de gobierno.
"Si se quiere una integración del sector automotor lo primero que se deber hacer es desarrollar un plan de normas de calidad en común", aseveró. Por ese motivo, el diplomático informó que se hicieron gestiones ante las Cámaras de autopartes de Brasil para contar con el apoyo y asesoramiento porque son los involucrados. Arslanian sostuvo que estos proyectos serán "financiados" con parte del dinero que Brasil tiene en el Focem.
"Los proyectos de gas y petróleo están listos, y no pueden aplicarse si no se aprueban estas condiciones que permitirían la flexibilización de la contrapartida a nivel nacional", afirmó el embajador de Brasil.
La otra iniciativa que Brasil planteará en el CMC y espera sea avalado por los demás miembros del bloque, es la reglamentación del Fondo de Garantías para el financiamiento de proyectos de pequeñas y medianas empresas dentro del Mercosur que ya fue aprobado y cuenta con US$ 100 millones.
Arslanian indicó que su país está trabajando en la reglamentación de este fondo para que esté operativo a partir de enero de 2010. Con este proyecto, las Pymes podrán solicitar un préstamo a un banco con el respaldo del Fondo de Garantías. Según el diplomático, esto hará que las empresas obtengan un financiamiento con condiciones "más favorables" porque habrá un menor riesgo para los bancos.
Límite: Hoy el dinero solo se puede utilizar para obras públicas de los países del bloque.
Asunto pendiente
En la reunión del CMC, Uruguay pondrá sobre la mesa otros temas. Con Argentina el aval para financiar la interconexión con Brasil, las licencias de importación, la negativa a Pluna para volar a Bariloche y Chubut y las trabas a las operaciones con SAFI. Con Brasil, los problemas para exportar lácteos y las licencias para la venta de neumáticos recauchutados.
El Focem cuenta con US$ 270 millones disponibles
El Fondo de Convergencia Estructural del Mercosur (Focem) fue creado hace dos años y medio y tiene al día de hoy recursos disponibles por US$ 270 millones. Los cuatro países -Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay- aportan en conjunto US$ 100 millones por año. Brasil transfiere el 70%, Argentina 27%, Uruguay 2% y Paraguay 1%. En cuanto a cómo se distribuyen los recursos del Focem, Paraguay recibe el 48%, Uruguay 32%, mientras que Brasil y Argentina obtienen el 10% cada uno. Hasta el momento, solamente se han aprobado proyectos con dinero del Focem por un monto de US$ 16 millones, pero hay un número importante de planes que están en vías de definición. Por ahora, sólo se puede utilizar para la financiación de obras públicas del Mercosur con la contrapartida que el país beneficiario aporte como mínimo un 15% del proyecto. En todos los casos, se requiere del consenso tanto técnico como político de los cuatro miembros del bloque para que se libere el dinero. Actualmente, Uruguay tiene el proyecto de interconexión eléctrica con Brasil a la espera solamente del consentimiento político de Argentina.