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LORELEY NICROSI

Carecen de identificación ideológica, no les interesa la política y muchos votan por obligación. Son los indecisos, el botín más codiciado por Lacalle y Mujica, porque quien los conquiste, tendrá asegurada la llave para gobernar los próximos cinco años.

Si no se produce un cambio significativo en las tendencias electorales para octubre, y el Frente Amplio o el Partido Nacional no logran ganar en primera vuelta, el futuro gobierno será definido a través del balotaje de noviembre por un reducido sector de la población al que le es indiferente la política.

Si bien las distintas empresas encuestadoras señalan que el próximo gobierno será elegido por todos los habilitados a sufragar, admiten que si el escenario para las elecciones se asimila al presente, el voto de los indecisos será clave para inclinar la balanza a favor de los presidenciables Luis Alberto Lacalle o José Mujica.

Entre el 7% y el 8% del electorado forma parte de ese segmento de indecisos, que no tienen preferencias por líderes ni lealtades partidarias, no comulga ni con "la izquierda" ni "la derecha", y se autodefinen como de "centro". Una parte de ellos se siente desencantados de los políticos y les interesa "muy poco lo que está en juego". Por ello, los politólogos opinan que para captar el voto de los indecisos, ni el Partido Nacional, ni el Frente Amplio podrán hacer campañas que tengan una identidad "muy blanca, o muy frentista", para obtener ese sufragio indefinido.

En cuanto a los perfiles de los indecisos, no existe una visión uniforme en las encuestadoras. Unos los ubican en las capas sociales más bajas y de escasa educación. Dominan las mujeres, y también los muy jóvenes. Otros en cambio, aseguran que son un universo totalmente heterogéneo y que, por lo tanto, estos votantes se ubican en todas las clases sociales.

Este segmento de la población no votó, en su gran mayoría, en las internas de junio. Una parte ínfima lo hizo por los candidatos a la vicepresidencia Danilo Astori y Jorge Larrañaga y ahora no sabe qué hará en octubre.

"El perfil de indecisos no cambia de lo que tradicionalmente es en los procesos electorales: predominan las edades más extremas, los menores de 30 y los mayores de 60, las mujeres más que los hombres; los estratos socioeconómicos más bajos y las personas menos interesadas por la política, menos informadas, de menor nivel educativo. No quiere decir que todos son así, sino que predominan", dijo a El País el director de Intercosult, Juan Carlos Doyenart.

Consideró que "la persona más despolitizada tiende a ubicarse en el centro o no quiere definirse en la escala ideológica. Difícilmente alguien despolitizado sea de izquierda o de derecha. Cuando alguien toma esa definición es porque tiene una formación mayor".

Sostuvo que ante la paridad que tiene actualmente el Frente Amplio y el Partido Nacional en un eventual balotaje, el papel de los indecisos será clave "sin duda". Para Doyenart, una elección nacional se define por la decisión que adopte el conjunto del electorado. No obstante, reconoce que en el actual escenario los que se definan a último momento decidirán la elección.

Dos bloques. El politólogo de Equipos Mori, Ignacio Zuasnábar, puntualizó que si bien el segmento de indecisos es heterogéneo "está concentrado en los estratos sociales bajos y medio bajos, porque el conjunto de la población está concentrado en ese estrato".

Remarcó que "efectivamente más son mujeres. Esos es tradicional; es histórico. Los indecisos se distribuyen en distintas categorías de edad, no son un segmento homogéneo, pero hay más indecisos entre los jóvenes, lo que también es habitual, porque en ese sector están menos solidificadas las identidades partidarias y políticas en general". Subrayó que no se concentran en especial en Montevideo, o en las zonas urbanas o rurales del interior, aunque, una buena parte son ciudadanos del interior.

Explicó que dentro de los indecisos se puede identificar al menos "dos grandes grupos: uno que es el segmento que no es desinteresado en política, que está siguiendo de manera razonablemente atenta la campaña, está al tanto de la dinámica política, pero tiene resistencias importantes hacia el desempeño de los políticos en general, y por lo tanto no está orientado hacia ninguno de los candidatos. Pero éste es un electorado que está vinculado a la competencia política".

En cambio, señaló que el otro bloque "sí, es mucho menos interesado en política, y es mucho más crítico de la política; es un desencantado que le interesa poco lo que está en juego. No sigue el acontecer político y no lo sigue hasta que se vea obligado a tomar una decisión, que puede ser a último momento".

Zuasnábar remarcó que "del punto de vista de la estrategia de los partidos, el primer segmento es más fácil de llegar, pero el segundo es muy difícil".

Centro Por su parte, el integrante de la empresa Cifra, Gonzalo Kmaid, estimó que los indecisos "son un grupo menos interesado en política y con algunas características especiales en el sentido que, al no tener inquietudes políticas están ubicados más al centro que el promedio del electorado".

Sostuvo que estas personas "no son muy distintas al resto del electorado, no son del estrato social más alto o más bajo", pero "son personas que le prestan menos interés a la política y que están en el centro del espectro. Eso quiere decir que son más difíciles de capturar".

Según Kmaid, los indecisos "son los que hay que conquistar. Eventualmente, campañas muy identificatorias con lo que construye la identidad propia de cada oferta política, en términos del Partido Nacional o del Frente Amplio, no es buena para capturar esos indecisos. Una campaña muy frentista o muy blanca tampoco los capta. Tienen que hacer concesiones hacia el otro espacio. Quien logre hacer eso, posiblemente sea el que tenga más éxito y pueda quedarse con la mayor parte del electorado", precisó.

"Hay que hacer una muy buena campaña para no perder nada de lo que uno tiene y además mantener el equilibrio para capturar a los que están sin definir", apuntó.

Empero, Kmaid destacó que "lo más importante son el 90% restante. No es mucha la gente que cambia de voto, esos cambios que se compensan entre sí, son pequeños", aseveró.

El Partido Nacional, a través del sociólogo Óscar Licandro elabora un estudio sobre los indecisos, a los efectos de enfocar la campaña hacia ese sector para intentar captar su voto.

El informe se realiza en base al perfil de ese segmento de votantes, su condición socioeconómica, lugar de residencia, promedio de edad y su sexo, entro otros aspectos, dijeron a El País fuentes próximas a Luis Alberto Lacalle.

El comportamiento de los indecisos es analizado por las encuestadoras no sólo mientras se lleva adelante la campaña electoral, sino después de los comicios.

El integrante de Equipos Mori, Ignacio Zuasnábar, dijo a El País que de acuerdo a estudios post electorales "el 3% y 5% decidieron su voto el mismo día de la elección, incluso un 2% lo decidió dentro del cuarto secreto. Es un electorado muy resistente, que decide su voto en el último momento", precisó.

Por su parte, el director de Interconsult, Juan Carlos Doyenart sostuvo que en el pasado para los politólogos "la vida era más fácil, y con esos perfiles de indecisos predominante se podía decir: bueno, la mayoría se van a ir a los partidos tradicionales, y no a la izquierda".

Sin embargo, Doyenart, advirtió que desde las elecciones de 2004 el comportamiento de ese segmento social cambió.

"Esto ya no es así, no se puede decir que van hacia los partidos tradicionales y ya no fue así en la elección pasada, y no va a ser así en esta elección y en adelante".

Estimó que "tanto la izquierda como los partidos tradicionales tiene capacidad de captar ese electorado de personas poco politizadas, de centro, de menor nivel educativo y de menor estrato social".

Juan Carlos Doyenart

Interconsult

"La persona más despolitizada tiende a ubicarse en el centro o no quieren ubicarse en la escala ideológica. Predominan las edades más extremas, los menores de 30 y los mayores de 60, las mujeres más que los hombres y los estratos sociales bajos".

Ignacio Zuasnábar

equipos MORI

"Dentro de los indecisos se identifica un segmento que no es desinteresado en política, pero tiene resistencias importantes hacia el desempeño de los políticos en general. Otro segmento está desencantado y le interesa poco lo que está en juego".

Gonzalo Kmaid

Consultora Cifra

"Lo más definitivo es que son personas que le prestan menos interés a la política y que están en el centro del espectro. Eso quiere decir que son más difíciles de capturar. Una campaña muy frentista o muy blanca no los capta".