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PATRICIA MANGO Y M.E LIMA

Reclusas del pabellón femenino de la cárcel de Canelones y del establecimiento Cabildo en Montevideo decoran carros alegóricos que desfilarán en el Carnaval. Es una forma de "inclusión social", dijo Juan Castells del Museo del Carnaval.

En Canelones trabajan en la confección de un carro alegórico que trasladará a las Reinas de Carnaval en la próxima edición de esta fiesta popular.

El proyecto "Recuperación de tradiciones carnavalescas en espacios de trabajo no convencional" comenzó en julio. Fue declarado de interés por el Ministerio del Interior.

El entusiasmo es generalizado entre las presas, aunque el material está escaseando y temen no poder llegar a tiempo con todo lo que diseñaron, dijeron a El País en una visita al taller de trabajo en Canelones.

El carro llevará una "mama vieja" -aún sin terminar-, un gramillero, tres tambores y muchas palomas.

En un ala nueva del pabellón, las presas armaron el taller que el viernes abrieron a la prensa para mostrar la evolución del trabajo y hacer público el pedido de material para poder continuar adelante. Papel de diario, cola y pintura al agua son imprescindibles para seguir armando el carruaje principal.

"Queríamos mostrar una buena noticia", dijo el artista John Teixeira, orientador de los talleres de Montevideo y Canelones y docente de las presas.

El carro que fabrican en Canelones es el que paseará a la reina en Montevideo y Canelones, afirmó. En Cabildo están fabricando otro carro pero aún no saben exactamente cuál, dijo Castells. "Es un trabajo muy lento por la dinámica de los talleres de las cárceles", explicó el representante del Museo del Carnaval, uno de los promotores del proyecto.

Ana, Sonia y Mirtha, voceras de las talleristas abocadas a la construcción del carro en Canelones, contaron que saber que la iniciativa era aprobada por el Ministerio provocó la alegría generalizada. "La gente no sabe que nosotras hacemos algo", opinó Mirtha.

"Tiene un significado enorme", agregó Sonia, "porque además de unirnos a las reclusas, vemos cómo evoluciona, cómo va quedando".

El taller trabaja a un ritmo de tres veces por semana, con materiales comprados por la Asociación Civil Emaús, el Patronato de Encarcelados y Liberados y el Museo de Carnaval, informó Ana. Ahora yeso, diario, pintura, alambre y demás está escaseando.

"No teníamos idea de los costos porque es la primera vez que hacemos esto", explicó Texeira, y "son altos". Puso como ejemplo que 10 litros de cola - que es lo que se usa en una sola clase- cuestan $ 620, el papel de embalaje sale $ 7 y ya hubo que comprar 300.

"Podríamos haber usado harina y el viejo sistema de la pegatina, pero estamos en la mitad del trabajo", indicó.

El Patronato y Emaús aportan partidas al igual que la Intendencia de Montevideo. Falta una partida que enviará la Intendencia de Canelones. Por ahora "nos revolvemos como podemos", dijo Teixeira.

"Pedimos apurar las partidas, que nos ayuden los vecinos o alguna empresa que pueda darnos un precio y poder terminar el trabajo en enero", expuso el docente.

El viernes, una de las reclusas fue notera por un rato. El programa local "El Surtidor" le dio el micrófono a una de ellas para que entrevistara a las demás. Finalmente y ya cuando varias estaban frente a la cámara una gritó: "¡Aguante Cabildo, aguante Comcar y Penal!", con la ovación del resto de las reclusas que miraban.

Otros proyectos de las internas para iniciar 2009: estudio, clases de mimbre y el segundo libro a ser escrito por ellas.

Al carro terminado lo verán desfilar a través de la televisión.

El trabajo de las reclusas de Canelones y Montevideo en los adornos para el Carnaval 2009 será computado para reducirles la pena.

El plan de trabajo es de julio a noviembre de 2008 con un mínimo de 3 horas semanales y de diciembre a febrero de 2009, con un mínimo de 12 horas semanales.

Las actividades desarrolladas están consideradas en el marco del decreto 225/06, a efectos de que puedan computarse para la redención de pena, para esto el proyecto "Recuperación de Tradiciones Carnavalescas en Espacios de Trabajo no Convencionales" está coordinado con la Junta Asesora o de Tratamiento de cada establecimiento.

Los promotores de la iniciativa darán certificado como participantes del proyecto a las reclusas que hayan trabajado y tengan un nivel de asistencia a los talleres igual o superior al 80% del total.