Madrid | La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) mantuvo reuniones con ETA y se ofreció a ocultar a miembros de la organización separatista armada vasca a cambio de que ésta le proporcionara expertos médicos, informó ayer la radio española Cadena Ser.
Según la emisora, basada en documentos requisados a ETA por la policía francesa, dos representantes de la organización armada vasca se reunieron con dos de las FARC para intercambiar "técnicas y procedimientos" en un campamento de la guerrilla durante siete días en 2003.
En estas reuniones, la guerrilla colombiana se ofreció a "ocultar a miembros de ETA durante el tiempo que fuese necesario" a cambio de que la organización armada vasca proporcionara "voluntarios expertos en medicina que pudiesen ayudar en los campamentos de prisioneros".
ARMAS. Las FARC también solicitaron a ETA "armamento antiaéreo", como el sistema de misiles tierra-aire SAM 7, uno de los cuales fue requisado en octubre de 2004 tras la detención en Francia del entonces número uno de ETA, Mikel Albitzu Iriarte, alias "Mikel Antza".
La Cadena Ser afirma que según las actas que guardaba ETA de estos encuentros y que la policía francesa se incautó, la organización armada vasca se interesó en cómo las FARC utilizaban teléfonos celulares para hacer detonar explosivos. Por su parte, la guerrilla colombiana quería perfeccionar la construcción de "zulos", escondites de material bélico, que suelen ser utilizados por ETA.
ATAQUES. Las FARC también solicitaron a ETA que realizara algunos atentados contra objetivos en Europa, tal y como supuestamente recogía el ordenador que se incautó al número dos de las FARC, Raúl Reyes, muerto en una incursión del ejército colombiano contra un campamento de la guerrilla en territorio ecuatoriano el 1º de marzo pasado.
Entre los supuestos objetivos que figuraban en el ordenador estaban la embajadora colombiana en España entre 2002 y 2008, Noemí Sanín y el actual vicepresidente de Colombia, Francisco Santos. Sin embargo, la Cadena Ser manifestó que no hay constancia ni policial ni jurídica en la comisión de atentados o secuestros, que adviertan que las colaboraciones entre ETA y las FARC se llevaran a cabo. AFP y ANSA