"Supercool" rescata inquietudes de los adolescentes de película

Estreno. Una aventura de dos amigos llega a los cines el próximo viernes

MATÍAS CASTRO

El cine de adolescentes vuelve a las salas el viernes. "Supercool" retoma situaciones comunes, con actores poco conocidos, pero con un autor interesante en la producción de la película. Las hormonas hierven.

Por una extraña razón, el título que en inglés lleva esta película fue convertido para Latinoamérica en otro título en inglés, que significa otra cosa. De Superbad, o Supermalo, pasó a Supercool, o Superonda (en España se llamó Supersalidos). De todos modos, el nombre se ajusta a la trama, ya que los protagonistas son dos adolescentes nerds, Seth y Evan, y sus aventuras para colarse en una fiesta de fin de cursos, previa a la entrada a la Universidad.

Hollywood se ha mostrado prolífico en el género de películas de adolescentes de hormonas en ebullición. Desde Porky´s (Bob Clark, 1982) hasta la serie de American Pie (Paul Weitz, 1999), los jóvenes del cine han luchado de una y mil formas por perder su virginidad, codearse con adultos, tomar alcohol y entrar a la universidad con esa etapa cumplida. Supercool es parte de esta tradición y, al igual que aquellas, no lleva protagonistas de gran fama, aunque tiene alguna referencia previa de interés.

Está producida por Judd Apatow, guionista y director de Virgen a los 40 y Ligeramente embarazada. Estas dos películas le han valido cierto reconocimiento como autor de comedias, género para el que además escribió muchos otros guiones como los de Ricky Bobby: loco por la velocidad y El periodista: la leyenda de Ron Burgundy.

El director de Supercool es Greg Mottola, realizador de series de televisión cable como Arrested development y The comeback. Los guionistas son dos jóvenes habituales colaboradores de Apatow: Seth Rogen y Evan Goldberg, que además bautizaron a los dos protagonistas con sus nombres.

Cuando Rogen, que interpreta al policía Michaels, conoció a Apatow, actuando en la serie de televisión Freaks and geeks (algo así como Raros y nerds), en 1999, le mostró un guión escrito junto con Goldberg, su mejor amigo. Ese texto era el de Supercool, o más bien, Superbad.

Christopher Mintz-Plasse, el actor de 18 años (su madre tuvo que estar en el rodaje porque en ese momento tenía 17) que interpreta al extraño y retraído Fogell, no tenía experiencia previa en la actuación. Salió directamente de la preparatoria en Los Angeles al set de filmación. "Todo en la película es justo lo que sucede en una preparatoria de la vida real... Bueno, nunca me arrestaron ni tuve problemas con la policía, pero las fiestas y chicos que quieren conseguir chicas, eso sucede como algo natural en cualquier preparatoria. Así fue como Seth y Evan lo escribieron, querían que fuera realista". Los dos guionistas, de 25 años de edad, apoyaron esta idea contando que para gran parte de la historia se basaron en sus propias experiencias en la secundaria. De hecho, comenzaron el guión cuando tenían 13 años, planteándose el desafío de llegar a terminarlo en algún momento.

Las experiencias e inquietudes de los adolescentes no varían gran cosa de un país a otro. Los contextos en que viven si lo hacen. La comparación se podrá hacer desde el viernes.

Jonah Jilll hace carrrera

Jonah Jill, el protagonista, fue descubierto por Dustin Hoffman. El actor le ayudó a conseguir su primer trabajo en I heart Huckabees, de 2004. "Consigo cada vez mejores oportunidades de estelarizar más películas, y escribir y producir las mías propias por medio de Judd (Apatow) y, si quisiera, podría hacerlas por mí mismo, con base en lo bien que van las cosas... Tenía 19 años cuando hice mi primera película.. Así que abandoné la escuela y mis padres estaban con toda razón, muy nerviosos con esa decisión".

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar