Esta historia ya había sido contada en una película de 1977 que se llamó en castellano No robarás a menos que sea necesario. George Segal y Jane Fonda encarnaban allí al matrimonio que Jim Carrey y Tea Leoni repiten ahora con variantes.
Algunos escándalos corporativos norteamericanos (concretamente, el caso Enron, sobre el que hay una referencia explícita) sirven de telón de fondo al asunto. Carrey es nombrado vicepresidente de la empresa en que trabaja, pero en menos de veinticuatro horas se produce una quiebra fraudulenta que no solamente deja al personaje endeudado y sin empleo, sino que despoja de sus seguros y pensiones a todos los demás trabajadores. Por supuesto, el ejecutivo responsable de todo (Alec Baldwin) se larga con cuatrocientos millones de dólares. Unos ganan y otros pierden.
Pero Carrey no se queda quieto. Trata de conseguir trabajo (reconozcamos que es un tanto pretencioso al respecto: no se conforma con cualquier cosa) y luego opta por el robo a mano armada, aunque el arma en cuestión sea una inofensiva pistola de juguete. Su esposa Leoni lo acompaña al principio a disgusto (no cree mucho en las habilidades de su marido como ladrón), pero luego las cosas cambian, incluyendo un previsible vuelco hacia el Happy End y el castigo de los Verdaderos Villanos.
No hay que enojarse demasiado con el resultado, que funciona empero solo a medias. Lo mejor está en el tercio inicial, con su pintura satírica del universo corporativo, las transpiraciones reales de la competencia por un mejor puesto o un mejor sueldo, la carrera (literal) por llegar "arriba" antes que los otros. Y hay todavía algunos sabrosos apuntes adicionales acerca del desempleo, los inmigrantes ilegales y otras realidades acuciantes.
Sin embargo, la comedia pierde empuje a medida que avanza, y decae incluso bastante antes de su dulzón desenlace. Carrey ha progresado demasiado en su carrera (que ya incluye las más que interesantes The Truman Show, El mundo de Andy o Eterno resplandor de una mente sin recuerdos) como para poder permitirse impunemente un retorno a los recursos de humor físico de los tiempos de La máscara o la serie de Ace Ventura. Toda una zona del film se alarga y agota en la morisqueta y a golpe y porrazo.
Cuando no está payaseando, Carrey es capaz de todos modos de comunicar con eficacia el costado ansioso y neurótico de su personaje, y Tea Leoni resulta bastante divertida como la atribulada esposa que menea la cabeza cada vez que su marido mete la pata. Ellos dos, algunas ideas de libreto y cierta simpatía general permiten sobrellevar (sin excesivo entusiasmo) el asunto.
critica | guillermo zapiola
LAS LOCURAS DE DICK Y JANE
Fun With Dick and Jane
Director. Dean Parisot.
Libreto. Judd Apatow, Nicholas Stoller, Peter Tolan.
Fotografía. Jerzy Zielinski.
Productores. Jim Carrey, Brian Grazer.
Elenco. Jim Carrey, Tea Leoni, Deena Adar, Walter Addison, Michelle Arthur, Conrad Bachman, Alec Baldwin.
l Estados Unidos 2005.