A principios de este año llegaron tímidamente a la pantalla de Canal 10 y poco a poco fueron conquistando a la audiencia uruguaya en un horario muy especial, el de lunes a viernes a las 20 horas, inmediatamente después de "Subrayado".
No fue igual su aterrizaje en Canal 13 de Chile, al que arribaron luego de una muy fuerte campaña expectativa de cerca de tres meses de antelación. La misma incluyó la invasión en vía pública de miles de afiches en los que los ocho hombres Mercader —protagonistas indiscutidos de la historia— aparecían desnudos... aunque de espaldas.
El objetivo era claro: había que derrotar al archirrival TVN en lo que a teleseries refería a cualquier costo. Para lograrlo no se fijaron límites de ningún tipo, ni económicos (se dispuso de un presupuesto sin restricciones) ni estratégicos. En este último caso, el canal católico chileno fue en busca de la directora general de la competencia, Verónica Saquel, y de los actores también del canal competidor, Héctor Noguera (Angel Mercader) y Felipe Braun (Ariel). "Reconozco que fue el entusiasmo de ella en el proyecto lo que me convenció para cambiarme de canal, además del peso de una buena historia y aceptar un desafío que al final es útil para los actores en general", diría en su momento Noguera a los medios de prensa de su país sobre Saquel, persona que también fue clave para que los actores más sexys de la escena chilena formaran parte del proyecto.
No sólo se puso especial cuidado en la elección del elenco sino también en el equipo detrás de cámaras: el experiente director de teleseries Herval Abreu; el trío de guionistas conformado por Pablo Illanes, Coca Gómez y Sebastián Arrau; el director de cine Cristián Galaz para la filmación de los comerciales de televisión; el fotógrafo Gabriel Schkolnick para realizar los afiches oficiales de la serie, y el ex director de estética de TVN, Carlos Leppe.
El lugar donde transcurrió la historia también tuvo su qué ver. Se trata del exclusivo balneario Viña del Mar, algo que le sirvió al país desde el punto de vista turístico y a Canal 13 desde el punto de vista promocional dado que es el que tiene los derechos exclusivos de transmisión del famoso Festival de la Canción de Viña del Mar. El 80 por ciento de la telenovela se grabó en el balneario, entre su playa, una conocida tienda de la calle Arlegui, algunas casas y un famoso local de empanadas de mariscos llamado "Las Deliciosas Concón" (donde trabajaba Sonia). Sólo las escenas que transcurrían en la casa de los Mercader se grabaron en Las Vizcachas, en Santiago de Chile, aunque para la historia todo estaba ocurriendo en Viña del Mar.
MACHOS MACHISTAS. La historia de "Machos" gira en torno al clan Mercader, liderado por Angel Mercader, un padre severo, estricto y muy machista que ha educado bajo estas características a sus siete hijos varones, todos con nombres que empiezan con la letra "a" por una cábala del patriarca: Alonso (Cristián Campos), Armando (Rodrigo Bastidas), Ariel (Felipe Braun), Alex (Jorge Zabaleta), Adán (Gonzalo Valenzuela), Amaro (Diego Muñoz) y Antonio (Pablo Díaz).
Fue idea de Saquel basar la telenovela en el inexplorado mundo de los hombres ya que hasta entonces las heroínas eran siempre las mujeres. Para ello los guionistas se inspiraron en una familia que realmente existe en Chile, que en su mayoría desciende de Serafín Mercader, llegado a ese país a fines del siglo XIX proveniente de los Pirineos franceses. A los 45 años este señor se casó con una jovencita chilena con la que tuvo seis hijos, cinco de ellos varones.
En el diseño de la personalidad de cada Mercader fue pieza fundamental el Dr. Sergio Canals, especialista en psiquiatría infanto-juvenil, especialmente contratado por Canal 13 para esta tarea. Canals partió desde la patología para armar cada personaje: por ejemplo, el patriarca fue diseñado desde una personalidad narcisista y el impotente Adán desde el trauma derivado de llevar a los hombres a "debutar" al prostíbulo. Para construir al homosexual Ariel se inspiró en el gay David Fisher de la serie "Six feet under". Además, enfrentó a cada personaje con su contraparte, haciendo que el cuarentón viudo —Alonso— tuviera aspectos de mujeriego y viceversa en el caso del mujeriego Alex.
Por supuesto que hubo muchas cosas que quedaron por el camino, como la del "octavo hermano", que iba a interpretar Alvaro Escobar y que sería un Mercader que volvía de la India y que orientaría a sus hermanos desde una posición contemplativa y mística. También se pensó en enfermar a Angel de Alzheimer, pero como este mal no se genera de repente, sino que necesita de tiempo, la idea quedó en el tintero.
Los temas que sí estuvieron sobre la mesa y que generaron un gran impacto social, siendo comentados en todo Chile, fueron la infidelidad encubierta, la homosexualidad, la impotencia sexual, el amor entre distintas clases sociales, los hijos bastardos y el cáncer de mama, algunos de los cuales están en episodios que por aquí aún no se han visto.
REPERCUSIONES. Además de notas varias y el comentario de muchos de los capítulos de la telenovela en las primeras planas de los diarios, "Machos" también tuvo el reconocimiento que dan los premios dentro y fuera de fronteras: a la difusión turística, a su campaña de marketing y nominación al Emmy como uno de los ocho mejores programas de drama de Latinoamérica. Por otra parte, su banda musical se convirtió en CD de venta al público, CD que hoy también se puede adquirir en Uruguay.
La telenovela se transformó rápidamente en un producto de exportación, llegando a ser emitida por Televisión Española (TVE) donde, por tratarse España de un país más acostumbrado al tratamiento de estos temas, no provocó el mismo revuelo y convocatoria que en Chile. Sí captó una porción importante de la audiencia, con tres de cada diez españoles sintonizando la historia y ganándole así a su competidora directa, la colombiana "Mi gorda bella" (Antena 3).
En el país trasandino la historia de los Mercader duró ocho meses y le devolvió a Canal 13 el primer lugar en "la guerra de las teleseries". El día que se emitió el capítulo final —el lunes 27 de octubre de 2003—, las calles de Santiago quedaron desiertas y la Plaza de Armas se llenó de gente para ver el desenlace en pantalla gigante y marcar así 53 puntos de rating. Un final acorde a lo que este producto generó en Chile y que explica también por qué en Uruguay son cada vez más los que comentan los vaivenes de Angel Mercader y sus siete hijos.
Analía Filosi